El bañador y la toalla regresan al cajón hasta el año que viene. Los días de vacaciones han llegado a su fin y toca retomar la rutina, que se identifica con la vuelta al cole mejor que con ninguna otra cosa. El próximo 10 de septiembre comenzarán las clases para los alumnos de Educación Infantil y Primaria, mientras que en Secundaria el inicio del nuevo curso tendrá lugar una semana más tarde, el día 17. Serán momentos para el reencuentro entre compañeros después del verano y también de estreno para los pequeños que irán por primera vez al colegio.

A la hora de elegir centro para realizar ese primer curso de infantil, el Claret y El Peñascal son los preferidos por una mayoría de familias segovianas. Aunque un 96,55 por ciento de estas ve satisfechos sus deseos y consigue plaza para sus hijos en el colegio elegido como primera opción, no todo el mundo corre la misma suerte. En El Peñascal hubo 15 solicitudes más que vacantes disponibles, y en el Diego de Colmenares, siete. 

Sin embargo, estos centros son la excepción, al menos en la capital, ya que –según los datos facilitados por la Dirección Provincial de Educación– en el resto han quedado plazas libres para primero de Infantil, que es el curso en el que existe más competencia a la hora de elegir dónde estudiar. «Observamos que hay determinados centros que están sumergidos en una tendencia de pérdida de alumnos en los últimos años, y creemos que la Administración debería priorizar que se cubran las plazas que quedan libres en los colegios públicos antes que ofertar en concertados», señala el secretario de Acción Social en Segovia de la Asociación Nacional de Profesionales de la Enseñanza (ANPE), Enrique de Diego. Una postura en la que coincide con la Fedampa (Federación de Asociaciones de Madres y Padres de Alumnos Antonio Machado). «Habiendo plazas en la escuela pública, quien quiera ir a la privada que la pague», apunta su presidenta, Isabel Gordo, que a las puertas del inicio de un nuevo curso pone como primera tarea que «las familias tengan una participación activa en los proyectos educativos de nuestros hijos». 

En su opinión, el papel de aquéllas en la toma de decisiones de los consejos escolares y consejos directivos de los colegios «quedó muy sesgado con la LOMCE [Ley Orgánica para la Mejora de la Calidad Educativa]». «Hay que escuchar a las familias porque hay retos muy importantes que afrontar, como el bilingüismo, la implantación de nuevas tecnologías, la convivencia o la innovación pedagógica», añade, al tiempo que reclama «crear recursos para dinamizar las AMPAs y que novedades como la administración electrónica no provoque que muchos padres abandonen esta labor altruista que realizan». 

Otra cuestión que puede marcar el próximo curso es la reivindicación de los profesores para que se recupere la norma que establecía en 18 para los profesionales de Primaria y en 24 para los de Secundaria el número semanal de horas lectivas. «La Junta había dicho que lo iba a hacer, pero vemos que van a empezar las clases y que seguimos con 19 y 25, respectivamente», critica el secretario de Acción Social de ANPE, que considera que «además de que repercute en la calidad de la enseñanza que ofrecemos, impide que haya más contrataciones de profesores». Una creación de empleo que se puede ver amenazada también por la creciente despoblación que sufre Segovia.

El 23 por ciento de las plazas de primero de Infantil ofertadas en la capital quedarán libres este curso 2018/2019. Un paisaje que se agrava en centros como el Eresma, donde las vacantes que no se ocuparán ascienden al 68 por ciento. En el Domingo de Soto y en el San José, por su parte, son una de cada dos, mientras que en el Martín Chico casi llega al 50 por ciento y en el Carlos de Lecea y en el Nueva Segovia se sitúa en el 40 por ciento.

provincia. «Algo está pasando, habrá que analizar el qué, aunque es verdad que los centros son entes vivos en los que a veces unos son más demandados respecto a otros porque tienen un proyecto educativo más innovador o que está cosechando mayor éxito en ese momento. Todos deben ser de referencia, pero hay algunos que, en cambio, realmente están saturados», explica la presidenta de la Fedampa Antonio Machado. Esta subraya, no obstante. que «si de verdad se apostara por la escuela pública, sería mínimo el número de alumnos que se iría a la concertada». 

En la provincia, el Arcipreste de Hita, en El Espinar, y Los Arenales, en Cantalejo, son los más demandados. Allí también se preparan ya para un inicio de curso que obligará a las familias a desembolsar entre 1.250 y 710 euros en función de si llevan a sus hijos a un centro público o concertado. La Unión de Consumidores de Castilla y León ha elaborado un informe que fija en un uno por ciento el incremento que se producirá en los gastos por la vuelta al cole respecto al curso pasado. «Entre las recomendaciones que realizamos a los padres están que reutilicen el material escolar siempre que sea posible, que hagan una lista de sus necesidades, que se informen de las ayudas que existen y que no dejen las compras para el último día», señala el director técnico y jurídico de su delegación en Segovia, Guillermo García.

Un total de 325 euros constituye el coste medio del uniforme en los colegios concertados en los que es preceptivo, que en el caso de Segovia es sólo las Concepcionistas. Mientras, el equipamiento deportivo supone un gasto de 263 euros en los centros concertados y 207 euros en los públicos; los libros básicos, 260 en ambos; el material escolar, 117 y 96; y el comedor, 163 y 147, según este informe de la Unión de Consumidores de Castilla y León.    «Nos llama la atención que cada vez empieza a tener más presencia la compra ‘online’ y que aumenta la demanda del servicio de comedor escolar para que las familias puedan conciliar la vida personal y laboral», destaca García, al frente de  la delegación que esta organización abrió en Segovia el pasado mes de diciembre, con sede en la calle Marqués del Arco número 5.

El programa Releo Plus vuelve a ser la principal fuente de ayudas públicas para afrontar esta vuelta al cole, aunque la Fedampa Antonio Machado lamenta que «deja fuera a muchas familias porque es un programa de gestión de becas que está limitado por la renta de los hogares». En opinión de su presidenta, la inversión de la Administración debería ir destinada a los bancos de libros para que todo el mundo se pudiera beneficiar».

libros. La campaña de venta de libros de texto se ha visto alterada este verano por la llamada de atención realizada por la Asociación de Libreros de Segovia, que ha asegurado que existen AMPAs que se dedican a esta actividad sin licencia comercial, lo que supone una competencia desleal que puede acarrear multas de 100.000 euros, según resaltan. «No entendemos esta polémica porque no nos dedicamos a la venta de libros de texto», responde la presidenta de la Fedampa Antonio Machado. «No podemos y por eso, no facturamos. Tampoco querríamos porque supondría un problema su gestión. Las familias lo que hacemos simplemente es un intercambio y las AMPAs sólo somos intermediarios para aquéllas que lo puedan necesitar».

Cualquier ayuda para lograr aunque sea un pequeño ahorro es bienvenida en los hogares, como demuestra que la venta de libros de texto de segunda mano ha aumentado un 186 por ciento en Castilla y León, según datos ofrecidos por la plataforma digital Milanuncios. Valladolid sería la provincia que mayor actividad económica generaría en este sentido, mientras que Segovia se situaría entre las que cuentan con el precio medio por libro más económico (entre 19 y 19,5 euros) junto a Burgos, Ávila y Salamanca. Por otra parte, un análisis de la web de ahorro Kelisto.es calcula que los costes del regreso a las aulas generarán una factura anual de 301 millones de euros en Castilla y León durante el nuevo curso, con un coste por familia de  861 euros de media. El comienzo del curso es agradecido por muchos, pero les va a tocar rascarse el bolsillo.