Más de 100 nuevos establecimientos hoteleros y rurales

ICAL
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El presidente de la Asociación Vallisoletana de Turismo Rural exige controles más exhaustivos de los establecimientos ilegales

Más de 100 nuevos establecimientos hoteleros y rurales - Foto: Miguel Ángel Valdivielso

La oferta de hoteles y casas rurales creció en Castilla y León durante el último año, pese a la explosión en el sector de los apartamentos y las viviendas turísticas. La Comunidad contaba a finales del primer semestre de este año con 4.084 casas rurales y 1.903 hoteles, que sumaron respecto al mismo periodo de 2018, un total de 108 y nueve establecimientos nuevos, respectivamente. En cuanto a los camping, se perdió uno respecto a junio de 2018, hasta 118, y los albergues crecieron en 25, con 314 opereativos a finales de junio. Un aumento de esta oferta turística pese a que se contabilizaron 730 nuevas viviendas y 22 apartamentos para turistas, hasta las 1.804 y 364, respectivamente, según los datos que ifrece la Junta en el Boletín de Coyuntura Turística de Castilla y León de junio de 2019.

En su conjunto, la Comunidad registró, hasta junio de este año 8.587 alojamientos turísticos, frente a los 7.694 del mismo periodo del año pasado, según los datos de la Consejería de Cultura y Turismo, de los que cerca de la mitad -4.084- fueron establecimientos rurales.

Por provincias, en el caso de los alojamientos rurales, León perdió uno de los establecimientos, y por el contrario Ávila vio como su oferta creció en 34 alojamientos, un 3,65 por ciento, seguida de la provincia de Burgos, con 20, un 4,66 por ciento, y Palencia, con 14 nuevos establecimientos rurales, cerca de un seis por ciento, el mayor crecimiento porcentual de la Comunidad.

Respecto a las plazas, el mayor incremento se produjo en este tipo de alojamientos, donde todas las provincias castellanas y leonesas lo hicieron, de media un 3,2 por ciento. Al igual que en el número de establecimientos, Palencia fue la que más creció porcentualmente con un 8,49 por ciento, añadió a su oferta 183 plazas rurales. Ávila aumentó en 297 sus plazas, seguida de León con 227, Soria, 171, y Salamanca incrementó las plazas en alojamientos rurales en 104. Por debajo de estas cifras se encuentran Valladolid y Zamora, con 25 y 13 plazas, y León donde, pese a disminuir su oferta, las plazas aumentaron en cinco.

El presidente de la Asociación Vallisoletana de Turismo Rural, Luis Chico, en declaraciones a la Agencia Ical, explica que los datos "responden a las expectativas", aunque se pregunta si se está tocando techo, puesto que "no dejan de abrirse establecimientos pero quizás no se está cubriendo la demanda".

Además, uno de los principales factores que influyen en la apertura de estos nuevos alojamientos es que se ven como una "inversión" y una manera "fácil" de ganar dinero, pero "no cumplen con la normativa". Estos alojamientos ilegales, detalla Chico, no tienen seguro, no están dados de alta como autónomos y ofrecen las habitaciones "a precio de saldo", lo que perjudica a los profesionales que tienen que cumplir con todos los requisitos legales.

"En muchos casos abren casas rurales para cubrir los gastos y pagar el Impuesto sobre Bienes Inmuebles (IBI) y solamente abren los fines de semana porque durante la semana tienen otro trabajo", critica.

Más controles

Luis Chico exige que la Junta de Castilla y León realice controles más exhaustivos de los establecimientos ilegales, pero como cierran de lunes a viernes, que es cuando se realizan las inspecciones, no se revisan. "Igual para la Junta es positivo porque les interesa tener más alojamientos abiertos, pero mucha gene va a tener que cerrar porque no sale rentable", denuncia.

Chico reitera también que, pese a que los alojamientos rurales han aumentado en el último año, la conectividad no ha mejorado, sigue siendo "precaria", "no hay cobertura en el medio rural e imposibilita hacer promoción y que los clientes puedan enviar vídeos o fotos de sus vacaciones" para fomentar el turismo rural.

Por último, solicita que se cumpla con la calidad y el servicio que hacen que Castilla y León sea "líder" en este ámbito y pide que las administraciones conozcan la situación, puesto que están "en las oficinaes de las grandes ciudades y no en el medio rural".

Hoteles, hostales y pensiones

Respecto a los hoteles, hostales y pensiones, Ávila, Zamora y Soria fueron las que perdieron algún alojamiento de este tipo respecto a 2018. Mientras que Valladolid mantuvo el mismo número, todas las demás provincias vieron como establecimientos hoteleros crecieron en este periodo.

En concreto, Zamora y Ávila perdieron un establecimiento hotelero, mientras que Soria perdió dos. En cuanto a las provincias que aumentaron su oferta, León fue la que más aumentó con un 1,44 por ciento, con seis nuevos establecimientos. Seguida de Burgos, con un 1,21 y cuatro alojamientos nuevos. Las demás provincias aumentaron en uno su oferta de hoteles, hostales y pensiones respecto a 2018.

Mientras que el mayor número de establecimientos es de tipo rural, la mayoría de las plazas se ofertan en hoteles, hostales y pensiones, 71.705 frente a las 36.299 plazas rurales. En este sentido, Burgos incrementó su oferta en medio punto, con 59 nuevas plazas, seguida de Segovia, con 43. En la provincia de Ávila se ofertaron 26 plazas más que en el mismo periodo de 2018, y en Salamanca fueron 17. Palencia y Valladolid fueron las que menos incremento experimentaron, con ocho y seis plazas nuevas en los hoteles, hostales y pensiones de la provincia.

Por el contrario, Zamora y Soria disminuyeron el número de plazas en un 0,45 y 0,42 por ciento, respectivamente, y en León el número de plazas cayó un 0,18 por ciento con 25 plazas hoteleras menos. En Zamora y en Soria cayeron en un más de un 0,4 por ciento, perdiendo 18 plazas en cada provincia.