La Dirección General de Salud Pública de la Junta de Castilla y León, a través de su Servicio de Epidemiología en Segovia, continúa la vigilancia del brote activo por la Covid-19 declarado ayer en el municipio segoviano de Chañe y que, actualmente, se mantiene en siete pacientes con resultado positivo en las pruebas PCR realizadas.

El estudio de contactos que se está llevando a cabo en el marco de esta alerta epidemiológica se ha ampliado hasta 20 personas controladas (11 pendientes de prueba y 9 que ya han dado negativo en la primera PCR), a las que se están realizando las correspondientes encuestas de contactos, analíticas e investigación de relaciones sociales, tanto en sus entornos familiares como sociales y laborales; de estas actuaciones, que se mantendrán en cuanto el brote esté activo, podrán derivar en nuevos estudios de contactos.

Los siete positivos se mantienen en situación de aislamiento domiciliario y el resto de los contactos en estudio se encuentran en cuarentena en sus residencias.

El brote afecta a siete trabajadores temporeros de nacionalidad extranjera de la cooperativa hortofrutícola "Viveros Campiñas". Su responsable, Gustavo Herranz, asegura que cuentan con "estrictas medidas higiénicas  como centro de trabajo, y que además piden a sus empleados que en su ámbito personal y social también mantengan esa misma responsabilidad". En su opinión, el contagio es más probable que se haya registrado fuera del ámbito laboral. 

En la actualidad están en plena campaña de recolección, con 600 trabajadores.