La Guardia Civil investiga a una persona como autora de tres delitos de robo con fuerza y daños en el interior de una explotación ganadera de caprino de Castillejo de Mesléon. El pasado mes de junio el propietario denunció que desde hacía unos meses un autor o autores desconocidos accedían al interior del recinto mediante fractura del candado de puerta o ventana, no sustrayendo nada ni observando nada revuelto. Sin embargo, al día siguiente de haber tenido lugar los hechos descritos varios cabritos aparecían muertos.

Los animales muertos fueron examinados por veterinarios, quienes determinaron que tenían síntomas de haber ingerido algún tipo de veneno. En otras ocasiones, con el mismo 'modus operandi', sustraían el pienso utilizado para alimentar a los animales o el silo donde el propietario almacenaba era abierto para que se derramase y quedase inservible. La leche que recogía de sus cabras también fue saboteada, y presentaba restos de tierra y excrementos, lo que impedía su venta.

"Todos los hechos anteriormente descritos supusieron grandes pérdidas económicas", subraya la Subdelegación del Gobierno, que explica que la Guardia Civil inició la ‘Operación Bee’. Las investigaciones concluyeron con las sospechas centradas sobre una persona como supuesto autor de varios delitos de robo con fuerza en las cosas y daños. Se trataba de un antiguo socio de la explotación ganadera.