La terminal de Vicálvaro abre la puerta al Madrid-Burgos

Ical
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Fomento estudia la viabilidad del corredor ferroviario por Aranda de Duero para "canalizar el aumento de tráficos" de mercancías que generará el nuevo nodo logístico

Acción reivindicativa celebrada hace unos años para reclamar el tren directo Madrid-Burgos, por Aranda. - Foto: Ricardo Ordóñez (Ical)

La reapertura de la conexión directa Madrid-Burgos podría encontrar en la terminal madrileña de Vicálvaro un aliado. El Ministerio de Fomento está estudiando la viabilidad de la línea para “canalizar el aumento de tráficos” que generará la nueva plataforma logística cuya primera fase estará terminada, en principio, dentro de 18 meses, por lo que la oportunidad definitiva para el proyecto podría llegar en 2021.

El Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (Adif) acaba de encargar en 18,7 millones las obras para la ejecución de la primera fase, que contempla la actualización de las instalaciones existentes, que contarán con vías aptas para trenes de 750 metros y que permitirán la recepción y expedición de servicios ferroviarios y un nuevo enclavamiento electrónico en el haz técnico sur de la terminal.

Por tanto, el Ministerio analiza la viabilidad de volver a abrir la conexión directa Madrid-Burgos para absorber el incremento de tráfico que generará la futura terminal de Madrid-Vicálvaro, uno de los “puntos estratégicos” para Adif del mapa logístico de España y el que articula toda la red de distribución de mercancías en el país, sirviendo de conexión entre los corredores Mediterráneo y Atlántico.

Las obras de la primera fase han sido adjudicadas en 18,7 millones y con un plazo de ejecución de 18 meses a la Unión Temporal de Empresas (UTE) formada por CAF Signalling y Sacyr Neopul. La remodelación pretende modificar la funcionalidad, que actualmente es una estación de regulación y clasificación, y que pasará a ser una instalación intermodal destinada a la carga y descarga de Unidades de Transporte Intermodal (UTI), con un diseño acorde con las tendencias actuales en la gestión de terminales de mercancías.

La primera fase contempla, por un lado, el desarrollo de un grupo de 18 vías que permitan el tratamiento de trenes de 750 metros en el haz sur y, por otro, la construcción de un módulo intermodal con cuatro vías de carga y descarga aptas para trenes de 750 metros, así como una losa de hormigón de transbordo. De todo ello, el contrato adjudicado se centra en una primera subfase, de un total de cuatro.

En el caso de que el Ministerio de Fomento opte por abrir la línea directa de Burgos a Madrid, con un ahorro de 110 kilómetros respecto al desvío actual por Valladolid, la puesta en servicio no podrá ser inmediata porque requerirá una obra importante y eso supone la redacción de un proyecto y la adjudicación de las obras, con todos sus trámites.

Fomento tiene sobre la mesa desde el año pasado el estudio elaborado por la Federación de Empresarios de Burgos que concluye que es “rentable y tiene demanda suficiente”. Tras un informe elaborado por la consultora pública Ineco, el Ministerio demandó otro complementario en febrero de 2017, que elaboraron Ayuntamiento, Diputación y la patronal de Burgos. En noviembre de 2017 se entregó, pero en enero de 2018 se volvió a requerir más detalle de la demanda y que se matizaran algunos datos técnicos.

Red de terminales intermodales

Adif, dentro de su nueva orientación estratégica, aspira a conseguir un modelo de negocio sostenible, con el objetivo estratégico de incrementar la cuota de transporte de mercancías y su integración con otros modos de transporte. Por este motivo, está trabajando, en cooperación con el Ministerio de Fomento y las comunidades, en el desarrollo de una red estratégica de terminales intermodales.

Considera que para dar servicio a la demanda prevista de transporte ferroviario de mercancías, con la implantación del ancho estándar en dichos corredores, será necesario disponer de terminales ferroviarias intermodales interoperables en los mismos, donde se puedan prestar servicios de calidad.

El proyecto de Vicálvaro, presentado a los principales actores del sector logístico en España, se ha dividido en varias fases que permitirán la adaptación de la terminal progresivamente de acuerdo al crecimiento de los tráficos y la actividad llevada a cabo en la misma, con lo que se consigue una mayor racionalidad y adecuación del gasto conforme a las necesidades y recursos disponibles de cada momento.

La remodelación de la terminal Madrid-Vicálvaro está cofinanciada por el Mecanismo ‘Conectar Europa’ (CEF).