Lejos de la imagen del recimiento caluroso de los segovianos a la imagen de su Patrona, la Virgen de La Fuencisla, coronada canónicamente el 24 de septiembre de 1916, la pandemia ha provocado este año que se tomen medidas con el fin de evitar posibles aglomeraciones de público en la Plaza Mayor, por lo que su traslado se produjo, este miércoles, al final de la tarde, con total discreción y sin anunciarlo previamente. Tan solo se habían registrado traslados en vehículo, en alguna ocasión, debido a la lluvia. 

El presidente de la Cofradía Nuestra Señora de la Fuencisla, JulioBorregero, ha explicado que, debido a la pandemia, decidieron suspender todos los actos que se iban a celebrar en la vía pública, a los que otros años han acudido miles de personas, para presenciar el paso de la Virgen, en todo el itinerario entre el Santuario y la Plaza Mayor, principalmente desde el Acueducto. Ahora «sería imposible controlarlo», subraya.  

EL DÍA y La 8 Segovia acompañaron a los miembros de la Cofradía en las labores de preparación y traslado en automóvil de la imagen desde el Camarín de su Santuario a la Catedral, donde, este jueves, se ha celebrado la recepción oficial, lo que ofrece unas imágenes insólitas.  

Traslado en la intimidadTras la misa de la tarde, Borreguero y el miembro de la junta de la Cofradía, Andrés Salcedo, entre otros, subieron al Camarín del Santuario, construido entre 1598 y 1613, para preparar la bajada de la imagen de su lugar habitual,  dando paso después a las camareras para que le retiraran el manto, correspondiente al TiempoOrdinario. 

A continuación por estrechos pasillos, algunos entre rocas, esta escultura gótica, de los siglos XIVy principios del XVde pequeño tamaño pero de rasgos muy finos, como asimismo la del niño, fue conducida hacia la conocida como Sacristía Mayor,  donde, de nuevo, las camareras, sin la presencia de más personas, vistieron a la Virgen con el manto que lucirá durante la novena, en esta ocasión el de terciopelo de color verde donado por la Comandancia de la Guardia Civil de Segovia, el 7 de diciembre de 2019, con motivo del 175 aniversario de la creación del Cuerpo, cuyo escudo se aprecia en lugar visible. 

Atrás, en el recorrido, había quedado también el museo, recientemente reformado,  con el fin de que  se puedan apreciar los mantos de la Virgen. Debido a falta de espacio, solo se podían ver tres y ahora ya son visibles un total de 15, que se van cambiando, de un conjunto que supera los 30. 

La leyenda surgida en torno a la imagen sostiene que fue traída a la ciudad en el año 71 por San Jeroteo, primer obispo de su diócesis, cuya escultura había sido realizada por San Lucas. 

Ante la sorpresa de algunas personas que se encontraban cerca del Santuario, desconocedores del traslado, la imagen fue sacada por dos camareras hasta un vehículo que la trasladó a la Puerta de San Frutos de la catedral, precedido por otro de la Policía Local.  

Salvo el personal de la Catedral y efectivos policiales nadie esperaba la imagen de la Patrona, quer fue introducida en la capilla del Santísimo. Borreguero ha mostrado su disgusto por no poder celebrar el traslado habitual y ha pedido la responsabilidad de los ciudadanos para que cumplan con las normas sanitarias.