El segoviano David Llorente, clasificado para las semifinales de K1 de los Juegos de Tokio con más apuros de los previstos tras saltarse una puerta en la primera manga, reconoció que quiere demostrar su "verdadero nivel" y que sabe que para conseguirlo necesita desatarse y "remar como un loco".

"Ya lo he podido hacer algo más en la segunda manga y si consigo meterme en la final me dejaré todo sin contenerme", aseguró el palista del club Río Eresma, quien admitió que en la primera serie quería hacer una "bajada tranquila, correcta y sin arriesgar". "Pero ese no soy yo y ya he salido a disgusto y cohibido. Así las cosas nunca salen bien", subrayó.

"Para la segunda manga he recapacitado un poco, he mantenido la compostura, he comido un poco y he visto el vídeo. Me he metido en modo David y he hecho una segunda manga más yo. Lo más importante ahora es que estoy dentro y hay que ir por el siguiente paso", apuntó el subcampeón mundial en 2019.

Admitió que el hecho de jugarse su continuidad en la segunda bajada no fue lo más agradable. "Creo que, a veces, cuanto más fácil es una cosa, más me cuesta. Y cuando hay más presión y más nervios puedo sacar mi mejor versión, aunque es verdad que ese momento previo a la competición no nos gusta a nadie. Pese a todo ello, he disfrutado mucho de la competición", indicó.

"No esperaba hacer un cincuenta en la primera manga ni competir en unos Juegos con el estadio vacío, pero es un sueño estar aquí. Estar en semifinales también lo es y ahora vamos a seguir soñando, a intentar seguir pasando pruebas y disfrutando", añadió Llorente, de 24 años.