El Bitci Baskonia sentenció este jueves al Asvel Villeurbanne, 91-66, en un tercer cuarto arrollador que les permitió romper el partido y confirmar en la decimocuarta jornada de la Euroliga que la victoria en Liga Endesa ante el FC Barcelona no fue flor de un día.
El ritmo que imprimió el equipo de Neven Spahija y la calidad de su defensa tras el descanso fue definitivo para recuperar las mieles del triunfo en una complicada competición continental ante un conjunto revelación venido a menos en el último mes.
Los azulgranas pudieron frenar la capacidad de anotadora que mostró Chris Jones en la primera mitad y hasta cinco baskonistas superaron la decena de puntos.
El Baskonia se conecta a la Euroliga
La inteligencia de Matt Costello (16 créditos de valoración) o el cambio radical de Wade Baldwin (19) fueron dos de las muchas notas positivas de un equipo en el que destacaron varios jugadores como Simone Fontecchio y Rokas Giedraitis.
El duelo arrancó mucha velocidad y acciones muy eléctricas de las que sacó más provecho el conjunto galo, liderados por un inspirado Chris Jones, autor de diez puntos en el primer cuarto. Ambos se encontraban más a gusto a campo abierto, donde desplegaban todo su arsenal.
En el cinco contra cinco los ataques de las dos escuadras eran más pesados y se resolvían con bloqueos directos o jugadas de talento de galos y vascos que mantuvieron la igualdad durante el primer acto, 19-19.
El Baskonia reaccionó al gran inicio de periodo del Asvel que logró imprimir velocidad, subir líneas defensivas y salir en velocidad para castigar a los locales. Matt Costello comenzó a producir desde que saltó a la cancha y los azulgranas tomaron la delantera de nuevo.
TJ Parker respondió colocando al joven Victor Wembanyama y Youssoupha Fall en pista, sus dos hombres más altos -220 centímetros-, pero no tuvo el resultado esperado y recurrió a la creatividad de Elie Okobo y Chris Jones para resolver sus ataques y poder cerrar más el partido, 45-44.
El ritmo anotador creció tras el paso por vestuarios. Steven Enoch y Simone Fontecchio actuaron como estiletes ofensivos de su equipo y el Baskonia tomó una renta de 14 puntos, gracias un parcial de 14-2, fruto también de buenas defensas. De hecho, hasta en cuatro ocasiones se agotó la posesión del reloj del Asvel en el tercer asalto.
El último cuarto arrancó con un 69-55 que marcaba el camino del triunfo de los baskonistas, dispuestos a finiquitar un partido que les costó romper, pero subidos en la ola del buen juego que desplegaron en el Palau Blaugrana, los vitorianos confirmaron su mejoría y vencieron por 91-66.