El PIB autonómico crecerá este año entre un 4,2 y un 5,4%

SPC
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Las estimaciones de los institutos de predicción advierten de que la situación seguirá condicionada por la pandemia, la inflación y el desabastecimiento

Una máquina trabaja en el centro logístico de Villafría (Burgos). - Foto: Luis López Araico

La economía de Castilla y León crecerá entre un 4,1 y un 5,4% en 2022 y cerrará el año con un avance entre el 4,9 y el 5,6%, según las estimaciones públicas y de los principales institutos de predicción de España. En concreto y según la información recogida por Ical, la previsión más optimistas sobre el dinamismo económico de la Comunidad, es la de Unicaja Banco, que apunta a un avance del 5,4%. Por el contrario, en el extremo opuesto la previsión más pesimista sobre la evolución económica de Castilla y León es la de Hispalink, que apunta a un crecimiento del 4,2%. La Junta de Castilla y León espera que la economía crezca un 4,9% y se superen los niveles de PIB prepandemia; un dato en el que coincide el Observatorio Regional de BBVA. En cuanto a 2021, la previsión más optimista es la del propio Gobierno autonómico con un 5,6%; mientras que la peor es de Hispalink, con un 3,6%. Asimismo, Unicaja la sitúa en el 5,2%; BBVA, en el 4,9%; y Funcas en el 4%. 

Lo que está claro y así lo afirman desde diversos ámbitos universitarios como el equipo de Coyuntura Económica de la Universidad de Burgos, integrado por Manuel Morquillas y José María Calzada, y el catedrático de Comercialización e Investigación de Mercados de la Facultad de Ciencias Económicas y Empresariales de la Universidad de León, José Luis Placer, es que la economía seguirá condicionada por la covid, así como por la hiperinflación por los costes energéticos y la crisis de abastecimiento de las materias primas al menos durante la primera mitad del ejercicio.

En este sentido, los expertos de la UBU Manuel Morquillas y José María Calzada estiman que la economía de la Comunidad crecerá un cinco por ciento este año, y cuatro décimas más el que viene. Eso si, dejan claro que «las predicciones económicas son difíciles de formular siempre y especialmente en momentos de enorme incertidumbre como el provocado por la pandemia de la covid-19». En este sentido, exponen a Ical, que el grado de acierto en estas previsiones está condicionado por varios factores. 

En concreto, apuntan a los riesgos a la baja por la posibilidad de nuevos rebrotes y la aparición de nuevas variantes de la covid, como el caso de ómicron que ya está obligando en muchos países europeos a restricciones de movilidad, que afectan a la actividad y provocan cuellos de botella en la cadena de suministros. Y es que recuerdan que la economía de Castilla y León puede verse especialmente afectada por la evolución de la pandemia en la UE, porque presenta una exposición comercial a este espacio superior al conjunto de España.

Los economistas también advierten del impacto del aumento de los precios de las materias primas y los alimentos, y la presión sobre los costes, aunque «se prevé que estas presiones inflacionistas sean coyunturales y se desacelerarán a lo largo de 2022». «Para evitar esta espiral inflacionista estimamos que son desaconsejables los contratos de trabajo con cláusulas de indexación, que pueden desencadenar la inflación de costes asociada a la espiral precios-salarios», aseveran.

Por su parte, José Luis Placer, desde la ULE aseguró que en 2021, tras un notable crecimiento en el primer semestre, los últimos datos disponibles avanzan «una contracción de la recuperación económica tanto a nivel nacional como autonómico», que llevará a un incremento del PIB para todo el año inferior al previsto inicialmente. Para Castilla y León, dijo, el incremento del PIB no superará el 5%, situándose así por debajo de la media nacional. Este experto recordó que la economía está bajo el efecto de una serie de factores negativos como la nueva oleada del virus, los problemas de suministros, el precio de la energía y la inflación