Las ayudas al alquiler de la Junta de Castilla y León alcanzarán por quinto año consecutivo a todas las solicitudes que cumplen los requisitos con un importe medio de 1.657 euros que recibirán los 13.231 beneficiarios de las subvenciones correspondientes a la convocatoria del año 2020. La mayor parte de las personas (92,4%) que cumple los requisitos exigidos recibirá la ayuda próximamente por ser los más necesitados y el 7,5% (994) tendrá que esperar al sobrante de fondos después del proceso de justificación del cumplimiento de requisitos de ese primer listado. En todo caso, el consejero de Fomento y Medio Ambiente, Juan Carlos Suárez-Quiñones, aseguró ayer que no será necesaria una ampliación del presupuesto, después de que la administración autonómica haya destinado, desde el primer momento, un total de 20,3 millones, al incluir una partida de cinco millones de fondos extraordinarios.
La convocatoria de las ayudas al alquiler se publicarán en el Boletín Oficial de Castilla y León (Bocyl) mañana, día en que los 12.237 primeros beneficiarios recibirán un SMS de la Junta con la advertencia de que disponen de un mes para aportar los justificantes bancarios del pago de la renta de los meses subvencionables, de enero a diciembre de 2020 ambos incluidos.
Del total de beneficiarios, 7.457 son mujeres (61%), mientras que 4.780 son varones (39%). Además, hay 3.441 jóvenes (el 28,1% del total), lo que en términos económicos supone 6,7 millones. Una diferencia que se debe a que los menores de 35 años no reciben el 40% de la renta anual, como los demás, sino el 50%, al igual que los mayores de 65 años.
Las ayudas al alquiler están destinadas a sectores de población con escasos recursos económicos. De esta manera, los ingresos de las unidades de convivencia no pueden superar tres veces el IPREM (22.598 euros), aunque la mayor parte de los beneficiarios (64,1%) está muy por debajo de los 7.500.
Acompañado de la directora general de Vivienda, María Pardo, el consejero subrayó que la convocatoria que ahora se resuelve mantiene las mejoras que se introdujeron en 2018 y se mantendrán en la del año 2021. Suárez-Quiñones valoró el incremento de cinco millones en el presupuesto de 2020, lo que agilizará el pago de las ayudas al incorporarse ya a la lista principal la práctica totalidad de los beneficiarios. En la convocatoria de 2019 hubo 9.056 beneficiarios y 4.979 solicitantes con informe favorable quedaron en lista de reserva, que precisaron dos momentos posteriores para su pago.
Justificante bancario
Suárez-Quiñones aprovechó la presentación de la resolución de la convocatoria para significar que esta política de la Junta no solo demuestra que está al lado de los que menos tienen sino que también contribuye a la seguridad en el pago de los alquileres. No en vano, la administración exige la justificación del pago bancario de las rentas, fomentando con ello la puesta de vivienda en el mercado de alquiler, incremento de oferta que contribuye a la estabilización de los precios del alquiler. La exigencia de justificación bancaria del pago de la renta, además, contribuye a la regularidad fiscal de este sector.