La Casa del Sello acoge una jornada que, bajo el título ‘Proyecto: Suelos de Castilla y León’, vuelve a mostrar el trabajo de colaboración que se lleva a cabo entre el Laboratorio de Prodestur de la Diputación de Segovia y el Instituto Tecnológico Agrario de Castilla y León, y que ha sido inaugurada por la diputada de Prodestur, Magdalena Rodríguez, y el jefe de la Unidad Territorial de Segovia del ITACyL, Felipe Gómez de la Calle.
En su bienvenida a la treintena de inscritos en la jornada, la mayor parte de ellos técnicos y representantes de cooperativas y empresas agrarias, sindicatos agrarios, consultorías e ingenierías, además de técnicos de la Junta de Castilla y León, tanto Magdalena Rodríguez y Felipe Gómez, han hecho hincapié en la importancia de la celebración de jornadas como ésta, que “pretenden dar a conocer entre el sector las características de los suelos de nuestra Comunidad Autónoma, con el fin de sacar el máximo rendimiento y productividad a sus trabajos y de que, además, lo realicen de un modo sostenible que repercuta, no sólo en la economía, sino también en el medioambiente de la provincia”, según explicaba la diputada.
A través de las ponencias ‘Suelos de CyL: Base de Datos, Mapas Edáficos y Visores’, a cargo de Miriam Fernández, técnico del ITACyL, y ‘Datos y herramientas digitales para la actividad agraria’, impartida por el también técnico del Instituto, Alberto Gutiérrez, la jornada, centrada en la difusión del proyecto ‘Suelos de Castilla y León’, liderado por el ITACyL y del cual es colaborador Prodestur, servirá para dar a conocer el trabajo realizado y será complementada con formación relativa a las herramientas digitales para la actividad agraria, con el fin de que éstas puedan ser empleadas como criterio de decisión por los agentes del sector agropecuario. “Este pequeño curso va a ser muy práctico para todos los asistentes, porque todos esos datos que se les va a proporcionar hoy les permitirán conocer más en detalle el grado de fertilidad de los suelos a la hora de programar los diseños de fertilización o de emplear diferentes cultivos, atendiendo a las características de cada terreno”, matizaba Magdalena Rodríguez.
Desde hace años, la Diputación de Segovia, a través del Laboratorio de Prodestur, y el Instituto Tecnológico Agrario, han concretado su colaboración por medio de diferentes estudios y proyectos de análisis. Entre las actuaciones llevadas a cabo por ambas instituciones en pro del sector agropecuario de la provincia, e incluso de Castilla y León, destacan, por ejemplo, la consecución de la acreditación para el análisis de plaguicidas del Laboratorio de Prodestur, siendo éste el primero de la Comunidad en lograrlo, o el proyecto de saneamiento de semilla de la variedad local del ajo de Vallelado a través de técnicas pioneras en España. Además, el ITACyL y la institución provincial también han colaborado para los análisis organolépticos del garbanzo de Valseca, en el proceso de lograr su Marca de Garantía, y han cooperado en el proyecto promovido por Asoprofit para el estudio de enfermedades emergentes en los cultivos de zanahoria, cebolla y puerro en Castilla y León.
En lo que respecta exclusivamente al asunto a tratar hoy durante la jornada, en 2011, Prodestur, que entonces era el Consorcio Agropecuario Provincial de Segovia y ya había desarrollado de forma pionera una herramienta online dirigida a técnicos de campo basada en la caracterización de los suelos de la Comarca del Carracillo, estableció la primera colaboración en este ámbito con el ITACyL para la elaboración de un mapa de suelos.