La Gerencia de Asistencia Sanitaria de Segovia ha presentado en los últimos días a las juntas técnico-asistencial y de personal el plan de desescalada que va a aplicar en la Atención Primaria y Hospitalaria con el objetivo de instaurar en este ámbito, como en el resto de la sociedad, la ‘nueva normalidad’. Durante las peores semanas de la crisis, tanto los consultorios y los centros de salud como el Hospital General de Segovia se cerraron a cal y canto a los pacientes que no tuvieran coronavirus, salvo aquellos con urgencias graves o que se tuvieran que someter a operaciones no demorables, como por ejemplo las oncológicas. Ahora toda la red se prepara para desempeñar sus funciones habituales en el marco que ha creado la Covid-19.
Un escenario inédito que probablemente va a modificar el modo de funcionamiento de la sanidad que estaba impregnado hasta ahora en el imaginario colectivo. Al menos de momento va a primar la atención telefónica para el contacto con los médicos de cabecera y con los especialistas. Las salas de espera abarrotadas son historia. En Atención Primaria, los facultativos solo citarán a los pacientes en los consultorios o en los centros de salud «cuando lo consideren absolutamente imprescindible», según remarca el gerente de Asistencia Sanitaria de Segovia, Jorge Elizaga, que ve preferible incluso la asistencia domiciliaria: «No queremos que en los centros de salud haya un trasiego constante de personas».
Lo mismo se puede trasladar a las llamadas ‘consultas externas’ del Hospital General. La atención se va a llevar a cabo mayoritariamente por teléfono y la presencial no podrá superar el treinta por ciento de la capacidad de la sala de espera y requerirá que el enfermo realice previamente una encuesta epidemiológica para descartar que sufra la Covid-19 y la pueda propagar con su visita al médico. Ese protocolo se extiende también a aquellos que tengan cita para someterse a una prueba en los servicios diagnósticos, una parte del Hospital que está funcionando no por encima del 33 por ciento de su capacidad para todo lo que no tiene que ver con el coronavirus con el fin de preservar la seguridad.
«No hay que olvidar que a muchos médicos los hemos sacado de sus especialidades para que ayudaran en la epidemia, lo que también ha impedido que las consultas siguieran a su ritmo normal», recuerda Elizaga. Durante algunas semanas también fue imposible operar porque el área de reanimación se destinó a extender la UCI, que llegó a albergar en el pico de la curva a 25 pacientes covid. Ahora están en funcionamiento cuatro de los nueve quirófanos que tiene el Hospital. La reanudación de la actividad quirúrgica está chocando con los cambios de distribución de la UCI a la que ha oblligado la pandemia, que hace que cinco de los 12 puestos disponibles en reanimación se destinen a enfermos críticos por patologías diferentes al coronavirus con el objetivo de asegurar ese doble circuito que ya es sagrado en el sistema sanitario.
No es descubrir nada que todas las operaciones que no se han realizado durante estos dos meses se van sumando a las listas de espera del Hospital, que se encontraba en una buena posición comparado con el resto de hospitales de Castilla y León de acuerdo a los últimos datos que ofreció la Consejería de Sanidad en este sentido durante el mes de enero. Respecto a todos los tipos de pacientes, esto es prioridad 1, 2 o 3, figuraba entre los que la demora media para operarse era menor. Ahora se ha disparado desde los 54 días en los que se hallaba el 15 de marzo a los 99 actuales, según ha podido conocer esta redacción de fuentes de la Gerencia de Asistencia Sanitaria de Segovia.
En estos momentos hay un total de 1.365 personas a la espera de someterse a una intervención quirúrgica, una cifra que apenas ha subido desde el 15 de marzo (entonces era de 1.355), aunque Elizaga lo justifica por la ausencia de consultas durante estos dos meses. «Esperamos conseguir un cierto equilibrio. Ya hemos vaciado la lista de espera de los pacientes con prioridad 1, que son habitualmente los oncológicos y que no admiten una demora superior a los 30 días», remarca el propio gerente de Asistencia Sanitaria de Segovia. La especialidad de Traumatología continúa al frente de esas listas de espera que va a agravar la crisis del coronavirus.