Segovia apunta a la prórroga de restricciones

D. A.
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Sanidad prevé prorrogar el lunes el cierre del interior de la hostelería de Segovia y El Espinar, mientras Riaza también presenta todavía tasas muy altas, aunque la curva de contagios de la provincia ya muestra una leve tendencia de bajada

Segovia ve bajar los contagios, pero no las restricciones - Foto: Rosa Blanco

La curva de contagios que a mediados de la semana pasada ya se aplanaba en Segovia ha empezado a descender. La tendencia es favorable y la cuarta ola se está quedando en menos de una quinta parte de lo que fue la tercera, pero Sanidad considera que los niveles actuales de covid siguen siendo muy altos. 

Todavía costará alcanzar los que Sanidad ha fijado para iniciar la desescalada y de momento, el próximo lunes cuenta incluso con aprobar una nueva prórroga del cierre del interior de la hostelería y las casas de apuestas que aprobó para un periodo inicial de dos semanas en la capital, El Espinar y Riaza. Los tres municipios presentan tasas muy por encima del tope fijado de 150 contagios por cada 100.000 en 14 días, que es el listón que determinó su cierre desde el 6 de abril, si bien en el caso de Riaza, al tener menos de 5.000 habitantes, se analizan otros parámetros al mismo tiempo que dejan aún en duda si también verá prorrogada la restricción.

También continuará cerrada la hostelería en Palazuelos de Eresma, aunque allí ya se contaba con ello, dado que en ese municipio el cierre de 14 días empezó el pasado martes y Sanidad, por tanto, no piensa reevaluar la conveniencia de mantener esta medida o no hasta el 26 de abril. Y además, está por verse qué sucede en otros municipios de la provincia que presentan tasas muy altas, caso de Valverde del Majano, Nava de la Asunción o Carbonero el Mayor, pero desvirtuadas en buena medida por el hecho de tener poblaciones pequeñas donde bastan pocos casos para que se disparen sus cifras. 

En total, la Junta aprobó el cierre del interior de la hostelería, casas de apuestas y juegos en 21 municipios de la Comunidad a partir del 6 de abril, así como en otros nueve desde el martes 13. Y este jueves, el vicepresidente de la Junta, Francisco Igea, preguntado por la prensa sobre la reevaluación de situación prevista para el próximo lunes, señaló que «lo lógico» es que sólo se levante tal restricción en los que lleven «al menos siete días» con tasas de incidencia acumulada en 14 días (IA14) por debajo de los 150 casos por cada 100.000 habitantes, además de presentar «tendencia descendente» en el ritmo de contagios.

Segovia ve bajar los contagios, pero no las restriccionesSegovia ve bajar los contagios, pero no las restriccionesEn este contexto, Segovia capital todavía presentaba el jueves una IA14 de 611, el cuádruple del umbral fijado. La de El Espinar estaba en 220, mucho más próxima a los 150 fijados, aunque, si Sanidad cumple a rajatabla lo advertido por Igea, evidentemente ya no puede encadenar siete días seguidos con esa variable en niveles inferiores.

Más singular es el caso de Riaza. Este jueves aún reflejaba una abultada incidencia de 1.136 casos por cada 100.000 habitantes en 14 días, la quinta más alta de la Comunidad. No obstante, cuando la Junta decidió cerrar su hostelería, era la más alta al superar incluso los 2.400 de IA14, y no debe olvidarse que esta localidad apenas supera los 2.100 habitantes, de ahí que con pocos casos sus tasas se disparen. En los siete días anteriores a este jueves, de hecho, registró ‘sólo’ 5 positivos confirmados por pruebas diagnósticas de infección activa, por lo que su tendencia es claramente descendente, pero a la espera de que Sanidad valore el lunes otros parámetros aparte de la IA14 para decidir si prorroga o no esta restricción.

Sucede parecido con otros municipios segovianos de menos de 5.000 habitantes que de momento no han tenido que cerrar el interior de su hostelería, pero que apuntan a llegar al próximo lunes con sus IA14 muy altas. Este jueves, Valverde la tenía en 897, pero con sólo cuatro casos confirmados en los siete días previos; Nava de la Asunción, 582 de incidencia en 14 días y sólo 3 casos en los últimos siete;Carbonero, 321 y 7;La Lastrilla, 299 y 9; y Villacastín, 270 de IA14, pero con sólo un caso en una semana.

En cuanto a los municipios segovianos de más de 5.000 habitantes, que son los que se ven afectados por el cierre de forma casi automática si presentan una IA14 por encima de 150, San Ildefonso apunta a librarse con holgura porque el jueves reflejaba una tasa de 38, y especialmente llamativa, por favorable, resulta la situación de Cuéllar. La estadística de la Junta refleja que la villa no habría registrado un solo contagio en todo el mes de abril, hasta el punto de tener sus tasas de incidencia en 7 y 14 días a cero; aunque esa circunstancia contrasta con el hecho de que Sanidad le atribuyera el lunes un brote de tres casos y cinco contactos en estudio.

SITUACIÓN GENERAL. A nivel provincial, la IA14 de Segovia se situaba este jueves en 355 casos, el peor dato de la Comunidad, donde la media se quedaba en 196, mientras la media nacional rebasaba ligeramente los 200. Pero la tendencia ya es favorable, teniendo en cuenta además que esta es la semana en que se estarían confirmando positivos por contagios que se produjeran durante la Semana Santa, y aun así están descendiendo.

Tomando de referencia la tasa de incidencia acumulada en 7 días, el pico de esta cuarta ola se alcanzó el 7 de abril con 183, cifra que el jueves había bajado a 170; y el pico de IA14, el 9 de abril con 382, frente a los citados 355 también publicados el jueves. Nada que ver además con los picos de la tercera ola, cuando hacia finales de enero se alcanzaron 1.197 y 2.170 casos en 7 y 14 días, respectivamente.

La consolidación del descenso de la incidencia también viene avalada por otro dato, el llamado ‘número reproductivo básico instantáneo’ o Rt, que estima la cantidad de personas que resultan contagiadas por cada positivo confirmado. Si ese indicador está por encima de 1, significa que la incidencia es creciente; si está por debajo, decreciente. Y Segovia, que vio cómo este índice subía de 1 el 9 de marzo, justo la semana en que empezó el repunte hacia la cuarta ola, lo vio bajar de 1 por primera vez desde entonces el domingo 11 de abril (0,90). Subió algo el lunes (0,94) y el martes (1), pero el miércoles descendió otra vez (0,93). Hay altibajos, pero la tendencia general es de un leve descenso que invita a pensar que, efectivamente, la provincia puede estar dejando atrás el pico de la cuarta ola.

No obstante, si Segovia replica la curva de descenso de la tercera ola, todavía le costará bajar a niveles que le permitan pensar en desescalar. En este sentido, los 355 casos por cada 100.000 habitantes en 14 días que reflejaba este jueves supone haberse situado en niveles similares a los que tenía el 19 de febrero (344), y entonces no bajó de 150 hasta el 2 de marzo (146).Pasaron por tanto dos semanas, y teniendo en cuenta que el criterio general que aplica Sanidad, con el llamado ‘semáforo covid’ como referencia, pasa por no permitir que un territorio no baje de nivel de Alerta hasta que pase dos semanas en niveles inferiores a la que tenga vigente, cabe la posibilidad de que no se pueda pensar en alivios generales de restricciones hasta bien entrado el mes de mayo.

Entretanto, respecto a la presión asistencial, tal y como señala el gerente de Asistencia Sanitaria de Segovia, Jorge Elízaga, la situación que vive el hospital es «dual». «Por una parte el número de ingresos en planta es asumible, teniendo habilitadas dos alas, es decir una planta completa, cuya máxima capacidad es de 72 camas», de las cuales el jueves había 34 ocupadas. «El mayor problema, sin embargo, está en la UCI», con 14 pacientes covid sobre un total de 31 camas habilitadas, aunque en condiciones normales (sin ocupar camas para pacientes que pasan por quirófano por otras patologías), la UCI sólo tiene espacio para 16. La estancia media de un paciente covid en planta se sitúa en torno a once días, pero en UCI oscila de tres a cuatro semanas, e incluso hay cinco que llevan desde enero o febrero, de ahí la dificultad de reducir allí la presión asistencial. 

La mortalidad, eso sí, sigue contenida sobre todo gracias a la progresiva vacunación de la población más vulnerable. En los 15 primeros días de abril, el hospital ha notificado tres muertes por covid y en marzo fueron seis, nada que ver con las 37 y las 56 de febrero y enero. Igea señalaba además el pasado lunes que espera que el 70% de la población de la Comunidad haya recibido al menos una dosis «en 30 o 50 días», previsión que no debe llevar a bajar la guardia, pero invita a pensar que lo peor ya pasó. Sin olvidar que, desde que se desató la pandemia, el balance oficial de mortalidad covid de la Junta dice que Segovia acumula ya casi un millar de fallecidos.