«Nunca está de más colaborar con Segovia"

A.M.
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Coronel de Estado Mayor, ha realizado cursos de piloto de helicópteros, paracaidismo o guerra electrónica, Obtuvo el grado de Máster en Ciencia y Arte Militares en el Command and General Staff College del Ejército de los Estados Unidos.

El coronel Serrano, director de la Academia de Artillería - Foto: Rosa Blanco

El nuevo coronel director de la Academia de Artillería, Alejandro Serrano Martínez (Ceuta, 1968), aboga por mantener la colaboración del centro de formación de oficiales más antiguo del mundo con Segovia, «como parte de ella que nos sentimos», además de por «la vinculación de la Academia y de toda la Artillería con la ciudad». Por este motivo, aparte de otras razones técnicas, piensa que una decisión como un posible traslado «tendría muchos aspectos que  irían más allá del meramente operativo que deberían ser considerados y, seguramente, si alguien lo estudiara, lo consideraría». 

Se formó en la Academia de Artillería de Segovia, entre otros centros, entre 1987 y 1992, y regresó como teniente coronel como jefe del departamento de Instrucción y Adiestramiento y jefe del Batallón de Alumnos, ¿qué ha significado en su carrera este centro de enseñanza que ahora dirige?

En cinco años de carrera como alumno, antes de salir egresado como teniente, en 1992,  los dos años de la Academia de Artillería fueron cruciales en mi formación, sin desdeñar, la que recibí en Zaragoza, pero fueron los que reafirmaron mi vocación y verdaderamente me formaron como oficial. Siempre ha sido una referencia, tuve que volver diez años más tarde a realizar la parte específica del curso de capacitación de comandante y también eso supuso un reencuentro con la Artillería, con un nivel admirable de excelencia de profesores que nos marcó a toda la promoción, para nuestros futuros destinos.

¿Cuáles son sus planes para el que se considera centro de formación de oficiales más antiguos del mundo?, ¿se plantea algún objetivo especial?

Los establecería en tres grandes campos. En el lado de la enseñanza, es un momento para hacer un análisis de la formación que se imparte tanto a los alféreces cadetes como a los sargentos alumnos, caballeros y damas alumnos, porque, en un entorno cambiante, van modificándose las necesidades del Ejército y de las Fuerzas Armadas. El éxito del centro de enseñanza consiste en no anquilosarse, en no seguir haciendo las cosas que se hacían por rutina, sino en estar en un constante proceso de revisión que no implica necesariamente cambio pero si exige un esfuerzo intelectual. El primer reto es revisar la formación que estamos impartiendo para comprobar que está ajustada a esas necesidades o, en caso contrario, implementar los cambios que correspondan y para eso, además, no vale solo la Academia sino que tenemos que ir interrelacionándolo con los distintos actores principales,  desde los mandos de Artillería de Campaña y de Artillería Antiaérea a otras unidades que son quienes nos tienen que dar  las referencias necesarias para que sepamos si estamos ajustándonos a lo que ellos demandan o no. 

En el ámbito del Centro de Simulación creo que ya está bien asentado como centro de referencia, no obstante, el hecho de ser puntero nos marca una responsabilidad, con lo cual tenemos que continuar siéndolo y aportar a las unidades  un valor añadido en su adiestramiento, propiciando, al mismo tiempo, otras acciones que ya no dependen tanto de nosotros pero que sí son su evolución natural, como son su reconocimiento como Centro de Excelencia de Simulación de Artillería o, si es posible, su certificación como Centro de Simulación en el entorno aliado de la OTAN, que yo creo que no estamos tan lejos de ello.  En el entorno institucional, mantener el excelente nivel de relaciones que he heredado. Creo que todo lo que hacemos, que es mucho, no lo hacemos sin esfuerzo, sino con mucha ilusión y cariño; además nada de lo que se lleva a cabo debe dejar de hacerse porque supone una aportación tanto a nosotros como a la sociedad segoviana. Como parte de ella que nos sentimos, todo lo que sea colaborar nunca está de más, todo lo contrario.  

La ciudad de Segovia aparece vinculada con la Academia de Artillería, y al contrario, después de entrevistarse con los representantes de las instituciones, ¿ve la relación correcta?, ¿atraviesa por buen momento?

No podía haber recogido en mejores condiciones... En mi etapa anterior en la Academia, entre 2012 y 2015,  que coincidió con la celebración del 250 aniversario, el entonces director, el general Sanz, seguro que sus antecesores también, ya era un claro precursor de las buenas relaciones con las instituciones, las actividades que promovía y los apoyos que prestaba. Eso lo que ha hecho es mantenerse con el tiempo, depurarse, matizarse y mejorarse, eso es lo que he heredado. Tan contento estoy con lo que me he encontrado y con lo que me ha contado mi antecesor, el coronel Martínez Ferrer, que mi único afán no es más que mantener y, si es posible, mejorar.  

A veces aparece el fantasma de la marcha del centro por la posible concentración de la enseñanza, ¿lo ve posible?

Oficialmente no tengo conocimiento de nada que apunte a que la Academia de Artillería pueda trasladarse de esta ubicación, no sería de extrañar, porque forma parte del trabajo del Estado Mayor del Ejército, que se hagan estudios de racionalización o mejora de los centros de enseñanza, pero, desde luego, desde que me he incorporado, si es que los hay, no pasan de ser estudios, no tengo ningún conocimiento al respecto. No es menos cierto que, precisamente, por la situación de la Academia, por la labor que se desempeña, por la existencia del Centro de Simulación, por sus peculiaridades, por la formación que se ofrece a los alumnos con aulas taller muy bien dotadas para impartir los títulos de técnico superior, tanto en Mecatrónica Industrial como Administración de Sistemas Informáticos en Red y, muy especialmente, por la vinculación de la Academia y de toda la Artillería con la ciudad de Segovia, una decisión de esa índole tendría muchos aspectos que  irían más allá del meramente operativo que deberían ser considerados y, seguramente, si alguien lo estudiara, lo consideraría. 

España ha atravesado un bloqueo político con presupuestos prorrogados y la presión de Estados Unidos para que los países de la OTAN eleven su gasto militar,  cuando la sitúan a la cola, solo por delante de Luxemburgo, con un 0,92% del PIB, aunque, en 2018, el gasto militar fue de 16.360 millones de euros, el decimosexto país que más gasta en defensa en el mundo, según el Instituto Internacional de Investigación para la Paz de Estocolmo, ¿en qué medida ha afectado esta situación a las Fuerzas Armadas y, concretamente, al desarrollo de los proyectos de la Academia?

Las Fuerzas Armadas y mucho más la OTAN exceden en mucho el nivel de comprensión de este humilde director… Es cierto que hemos pasado un periodo de crisis y que las Fuerzas Armadas, lógicamente, se han visto afectadas, como el resto de administraciones del Estado, hemos tenido que apretarnos el cinturón, por emplear una expresión coloquial. También es verdad que, en lo que compete a la Academia de Artillería, esto no nos ha afectado de forma fundamental en el cumplimiento de nuestra misión, ¿qué existen carencias?, existen, que se suplen con celo, como decían nuestros antiguos, pero se sigue llevando a cabo la misión fundamental y podemos seguir llevando a cabo muchas cosas paralelas, con lo cual no me atrevería decir que esos recortes nos afectan. Podríamos tener más cosas y seguramente nuestros mandos, empezando por la ministra, Margarita Robles, y por el resto del Gobierno estén trabajando por mejorar esta situación para poder dotarnos de los recursos necesarios a nosotros y al resto de administraciones, los que puedan ser serán y nosotros trabajaremos con ello, pero por lo que sé y por experiencia en destinos anteriores esos recortes hacen que no se pueda disponer de todos los medios que serían deseables pero no afectan fundamentalmente al desarrollo de nuestras misiones.  

Su formación comprende desde cursos de piloto de helicópteros,  paracaidismo y  guerra electrónica, uno de ellos en Alemania;  de Estado Mayor de las Fuerzas Armadas, de Estado Mayor y de Estudios Militares Avanzados, en Estados Unidos, y de Aptitud Pedagógica, además Máster en Ciencia y Arte Militares en el Command and General Staff College del Ejército de los Estados Unidos y Especialista Universitario en Fundamentos de Paz, Seguridad y Defensa por el Instituto Universitario Gutiérrez Mellado de la UNED, ¿un militar tiene que ser hoy tan versátil?

Sí, sin que me atreva a decir que mi currículum es versátil en ese sentido. Ahora mismo un oficial y un suboficial, cada uno en su escala, tiene un recorrido muy amplio y una cantidad de cometidos a desempeñar a lo largo de su carrera, que es bien larga en servicio a España, más corta de lo que podría ser en la Administración civil. Esos cometidos empiezan con un trabajo muy dedicado a las unidades, a la fuerza, al desempeño de las misiones propias del Ejército y se van culminando conforme se van alcanzado determinados empleos y grado de madurez con otro tipo de especialización que da pie a otros cometidos, ahí es donde entra la versatilidad. Los oficiales y suboficiales tienen lo que denominamos segundo tramo de carrera donde se adquieren otras competencias que permiten que, conforme se ha alcanzado en experiencia y en edad se desempeñen otro tipo de trabajos. Mi versatilidad ha sido distinta, en cierta medida, lo que no quita para que me haya dado distinta visión y diferentes experiencias que todas suman para llegar a donde uno llega y luego poder hacer las cosas que uno hace.

¿Qué experiencia ha obtenido en las misiones de paz en las que ha participado en la antigua Yugoslavia y en el Líbano?

Las dos misiones en las que estuve desplegado en Bosnia fueron con unidades de helicópteros, yo destacaría la segunda porque me correspondió el honor de ser el jefe del destacamento español de helicópteros en Bosnia, aunque estábamos integrados en un batallón francés, pero las responsabilidades de un jefe van más allá de la primera en la que estuve trabajando dentro de la plana francesa como oficial de operaciones. Tengo un gran recuerdo del equipo que formamos y de la cantidad de cosas que hicimos. La de Líbano fue diferente, estuve en el cuartel general de la misión de Naciones Unidas, los cometidos eran distintas, era comandante, era un puesto de Estado Mayor. Me sorprendió la situación, fueron unos meses después de la invasión israelí y de la nueva interposición de Naciones Unidas, esa UNIFIL II, como prolongación de los cometidos que tenía la que ya se instaló en 1978, todavía se percibía tensión entre la parte israelí y la parte libanesa y el trabajo que se hacía por las fuerzas de UNIFIL fue algo que me marcó, también es cierto que en las otras dos ocasiones trabajamos bajo el paraguas de la OTAN y esta era mi primera experiencia en el seno de Naciones Unidas donde también, por otra parte, la interacción entre el pilar civil y el pilar militar son peculiares porque el primero tiene muchísimo más peso que en otras misiones en las que trabajamos en coalición militar o dentro de unidades de la OTAN.   

¿En qué medida le preocupa la situación de Cataluña, si partimos del artículo 8º de la Constitución que plantea, entre otros aspectos, que las Fuerzas Armadas deben defender la integridad territorial de España y el ordenamiento constitucional?. 

Las Fuerzas Armadas son una herramienta de nuestro Gobierno, están para que el Gobierno determine, en el marco de la Constitución y de acuerdo con las leyes y normas que nos rigen. Desde hace muchísimos años, y hoy más que nunca, están a las órdenes del Gobierno y al servicio de la nación. No vinculo la situación de Cataluña con el artículo 8º en tanto en cuanto  no nos corresponde a nosotros ni opinar ni decidir. Si el Gobierno determina lo que sea, las Fuerzas Armadas estarán y, fuera de eso, cumplirán con las misiones cotidianas que tienen. Siendo un tema muy complejo, y pudiendo tener opinión como ciudadano, creo que sí que es importante que quede bien claro que las Fuerzas Armadas están al servició de la nación y a las órdenes del Gobierno, más allá son conjeturas que no nos aportan nada a nosotros ni tampoco al debate social y político de nuestra nación.  

Recientemente, en un acto público en la Plaza Mayor, en la capital, promovido por la plataforma ‘España Existe’, con presencia de representantes de VOX,  sonó el himno de la Artillería, ¿le parece adecuado el uso de uno de los símbolos del Arma?

Como artillero, como inspector del Arma de Artillería, considero que el himno de Artillería es un símbolo y que debe utilizarse para lo que es… Posiblemente no fuera el lugar más correcto, no obstante, lo mismo que el Himno Nacional, es en cierta medida patrimonio de todos los españoles y, siempre que no medie mala intención, tampoco me vería con el peso moral de prohibirlo, ni autoridad, por supuesto. Me sorprende pero no me siento especialmente ofendido.