La vacuna de AstraZeneca vuelve a estar otra vez en el punto de mira tras registrarse ayer otro episodio trombótico en una mujer tras recibir la primera dosis de la profilaxis de la empresa anglosueca. Y es que la Consejería de Salud del Principado de Asturias está estudiando si el caso de una paciente de 55 años que fue diagnosticada de una trombosis cerebral de senos venosos podría tener algún tipo de relación con este suero.
La mujer, que se encontraba estable al cierre de esta edición, permanecía ingresada en el Hospital Vital Álvarez Buylla, en Mieres, tal y como detalló ayer la Consejería de Salud, que estaba estudiando una posible relación con el fármaco, aunque a partir de hoy será la unidad de farmacovigilancia la que continúe con las indagaciones de esta supuesta relación.
Según apuntaron algunos expertos en los medios locales, habría que diferenciar entre un trombo arterial y sin plaquetas y uno venoso con plaquetopenia, que son los que han sufrido las personas que han sido vacunadas. Siguiendo esta teoría, relatan que un episodio así en una paciente de 55 años podría estar más relacionado con una hipertensión arterial o una arritmia cardiaca que con la alteración que se supone que causaría la vacuna.
En este caso, se trata del primer caso de trombosis cerebral que se investiga en Asturias entre las cerca de 25.000 personas que han recibido ya en la comunidad la vacuna de AstraZeneca, que en España se ha suministrado a un total de 1.722.791 personas por ahora.
Cabe recordar que la administración de esta vacuna fue suspendida de forma cautelar en España el 15 de marzo después de que se diagnosticaran varios casos de trombosis en varios países europeos en personas que habían recibido el fármaco. Sin embargo, el uso de esta vacuna se retomó nueve días después, una vez que la Agencia Europea del Medicamento (EMA) dictaminara que es segura.
CASO DESCARTADO
Por otro lado, el Instituto de Medicina Legal de Asturias descartó que la muerte de otra mujer de 40 años que había recibido la vacuna de AstraZeneca una semana antes del deceso esté relacionada con el fármaco. La joven sufrió un paro cardíaco a finales del pasado mes de febrero tras lo que se activaron los protocolos para estudiar si había vínculo.
El Instituto de Medicina Legal inició la investigación después de que el médico que atendió a la mujer no firmara el certificado de defunción al no apreciar una causa evidente del fallecimiento.
Estas pesquisas se producen siempre que el médico no rubrique la muerte y en este caso se daba la circunstancia de que la mujer había recibido la vacuna unos días antes, aunque el caso no fue notificado a la red de farmacovigilancia.