La Junta de Castilla y León ha confirmado el fallecimiento de un total de 61 personas que estaban alojadas en las más de 810 residencias de personas mayores tanto públicas como privadas y centros de personas con discapacidad públicos.

Desde la Junta de Castilla y León han aclarado que en el caso de los fallecidos son los datos que facilitan los centros residenciales y han añadido que no todos ellos tienen el COVID19 confirmado si bien "en
el momento del fallecimiento mostraban síntomas compatibles con la enfermedad".

En concreto y según los datos facilitados este martes, 24 de marzo, por el Gobierno autonómico en el caso concreto de Segovia hay 16 muertos. Otros 10 fallecidos residen en residencias o centro de discapacidad de Burgos, ocho en Valladolid y otros ocho en León (ayer no había fallecidos en las residencias de esta provincia), siete en Salamanca, seis en Ávila, cuatro en Soria y dos en Palencia con ningún caso de muertes en Zamora.

Por su parte, los datos confirmados e ingresados (personas a las que se les ha practicado la prueba del COVID-19 con resultado positivo) asciende a 335, de ellos 80 en Salamanca, 76 en Burgos, 52 en Valladolid, 38 en Soria, 31 en Segovia, 23 en León, 17 en Palencia, 16 en Ávila y dos en Zamora.

Finalmente, otras 1.840 personas permanecen aisladas o en observación (391 en León, 343 en Soria, 291 en Burgos, 230 en Segovia, 152 en Salamanca, 140 en Ávila, 106 en Valladolid, 97 en Zamora y 90 en Palencia).

En los casos de aislados o en observación en incluyen personas que presentan síntomas (todos o alguno) y a las que se aplica el protocolo recomendado; personas que estaban aisladas previamente por sus patologías y personas que en algunos casos se encuentran en aislamiento preventivo por haber estado en contacto con casos confirmados pero que no presentan síntomas.