El Hospital General suspende cirugías y suma traslados

A.M.
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La dirección del Complejo Hospitalario reduce a cuatro los quirófanos, retira permisos, abre más alas para enfermos contagiados y ya ha derivado a 14 pacientes a otros hospitales

Imagen de archivo de una intervención en Valladolid - Foto: Ical

Las cifras de ocupación del Hospital General siguen aumentando con pacientes Covid-19 hasta el punto que hace necesario la apertura de más zonas del complejo, actualmente con las plantas tres y cuatro ocupadas según el gerente de Asistencia Sanitaria, Jorge Elízaga, a la vez que se reduce la actividad quirúrgica, pasando de ocho a cuatro quirófanos, solo para casos urgentes y de prioridad 1, oncológicos, y habiendo trasladado ya a diferentes hospitales de la Comunidad a un total de 14 pacientes, de los cuales siete se encuentran en estado crítico.

Los datos de este jueves revelan 121 positivos ingresados en planta, además de 137 no Covid y 12 en la UCI, aparte de cinco con otras patologías en reanimación, parte convertida en unidad de críticos. Se anotan tres fallecimientos más, 15 en los últimos siete días solo en el Complejo Hospitalario, donde la media de edad de los pacientes es de 42 años.  Actualmente ingresan de 20 a 22 personas diarias. 

Partiendo de que se registran unas ocho altas diarias, incluidos en la cifra también traslados, cada día suben de media entre 10 y 12 pacientes en relación al anterior. La Gerencia de Asistencia Sanitaria ha mantenido contacto con la Gerencia Regional para ver la si se van a habilitar más camas en el hospital Rondilla, en Valladolid, a donde podían trasladar 20 pacientes desde Segovia, este viernes, 

Elízaga sostiene que «la clave del asunto son los traslados porque no pretendemos habilitar otras áreas, cuando lleguemos a la capacidad más alta, como ocurrió en el inicio de la pandemia.

En el ala de traumatología, la futura que se destinará a pacientes Covid, según el gerente,  se encuentran también aquellos que están pendientes de confirmación, «muy pocos, porque casi todos salen de urgencias con un diagnóstico hecho,  clínicamnete es sugerente de que tengan Covid pero la prueba es negativa y se mantienen en observación». 

Con un total de 105 profesionales en seguimiento, con prueba positiva o en cuarentena por contacto de familiares, la complicación se redobla, principalmente en enfermería donde está agotada la bolsa de empleo, lo que ha provocado que la Gerencia haya anulado los permisos, «llegando a un acuerdo previamente, no es una imposición», aclara Elízaga.    

En estos días se ha originado una polémica tras un comunicado en el que el Sindicato de Enfermería Satse denunciaba el «mal funcionamiento de los respiradores habilitados [en reanimación [con doce puestos, donde también pueden ingresar de dos a tres pacientes Covid]; ya sea porque son muy antiguos o se encuentren averiados, están sufriendo diversas averías e incidencias que están poniendo en riesgo la salud de los pacientes, dejan de funcionar de repente o se desprograman los modos ventilatorios».

Jorge Elízaga ha explicado que «no se puede hacer una anécdota de una circunstancia que ocurre casualmente, es un poco perverso,  cualquier maquinaria puede tener fallos, pero todos los respiradores que tenemos han sido chequeados por electromedicina, incluso uno de los recién adquiridos tuvo un pequeño fallo, puntualmente uno puede fallar, lo arreglas y pones otro en su lugar, decir que fallan constantemente me parece fuera de lugar».

Otra de las quejas que planteaba el sindicato era que «es imposible atender de manera adecuada porque solo tres camas cuentan con telemetría [donde el control se puede realizar a distancia], actualmente los pacientes que ocupan una cama que no está habilitada con este sistema no tienen un control continuo centralizado por parte de las enfermeras». 

El gerente ha reconocido que para que todas las camas se puedan vigilar desde un control central hay que hacer una obra importante, «pero para eso tenemos enfermeras que están pendientes y los pacientes están perfectamente vigilados». Sobre este aspecto, la procuradora del PSOE, Alicia Palomo, ha pedido la comparecencia de la consejera de Sanidad, Verónica Casado.