Un abrazo ciclista a la ciudad

D. A.
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Un ciudadano ha ideado un 'Anillo Ciclista' de tres kilómetros en torno al área central de Segovia, iniciativa que ha compartido con el colectivo Bicicla y que cuenta con el apoyo de IU para estudiarla de cara a 2021

Juan Carlos Monroy (izquierda), autor de la propuesta de Anillo Ciclista, y Roberto Segovia, promotor de Bicicla, en la marcha del pasado domingo 4 de octubre. - Foto: Rosa Blanco

En una ciudad con sólo dos carriles bici pintados hace diez y once años (el de Padre Claret, ya medio borrado y con mobiliario urbano entorpeciendo, y otro de apenas 300 metros en el parque del Cementerio), un trazado ciclista de casi tres kilómetros supondría un cambio de tercio radical hacia un modelo real de movilidad sostenible. De momento sólo es una idea de un ciudadano amante de la bici urbana que la ha compartido con el colectivo Bicicla, pero Izquierda Unida, que este mandato tiene rol de mando compartido en el Ayuntamiento como socio de gobierno del PSOE, espera que los técnicos municipales estudien su viabilidad. 

Cierto es que Segovia tiene carriles con velocidad limitada a 30 km/h en Gerardo Diego, Constitución, carretera de San Rafael, calle de las Nieves o Vía Roma, y que en el casco histórico la limitación es de 20 km/h, pero el salto sería importante si cuajara el denominado Anillo Ciclista. Rodea el centro de la ciudad, lo abraza e invita al ciclista a abrazarlo como hicieron decenas de segovianos con sus bicis el pasado domingo para promocionarlo, y entre ellos el autor del trazado, Juan Carlos Monroy. 

«En Segovia hay muchos prejuicios sobre el uso de la bici como que hay demasiadas cuestas, mucho adoquín, frío… Pero aquí no hace más frío que en Berlín, tampoco más adoquines que en Roma ni más tráfico que en Londres o París, donde se usa la bici de manera normal y la gente está más habituada», destaca. Por eso se cuestionó «cómo puede ser que en la ciudad de Perico Delgado no exista un carril bici seguro» y empezó a pensar en cómo llevarlo a cabo: «Un día cogí la bici, empecé a pasear por Segovia y se me ocurrió la idea del anillo», relata. «Un trazado donde la circulación de bicicletas sea única, que no interfiera en la calzada y no ponga en peligro al ciclista ni al conductor, ni afecte tampoco al peatón y sus aceras. Si cada uno tiene su territorio salimos ganando todos», valora.

Tal y como explica Monroy, el itinerario propuesto abraza por el norte a la Academia de Artillería, por el sur a la Base Mixta, por el Este al campus María Zambrano de la UVa y por el oeste, paralelo a la parte baja del Acueducto, desde la plaza de Día Sanz, tomando la calle Almira y siguiendo hacia Cañuelos hasta reconectar con la zona de la Base Mixta, prácticamente a la altura de la rotonda de la plaza de toros. «Así unen puntos estratégicos para facilitar que los ciudadanos puedan acudir en bici a una exposición a la cárcel, a la Universidad, al instituto o a comprar en comercios de los barrios, por ejemplo».

El carril bici contendría doble sentido «en un 90% de su trazado». En unos tramos coge parte de acera, cuando ésta es suficientemente ancha como para no dificultar el ‘tráfico’ de peatones, o del parterre, como ocurriría en Juan Carlos I o en la parte alta de Padre Claret. En otros ocupa algo de calzada, como en las plazas de Santa Eulalia y del Somorrostro. También hay vías con tramos compartidos con los coches, como en Blanca de Silos, donde sugiere considerar la supresión de algunos aparcamientos para facilitar un carril bici bidireccional, o en Pintor Montalvo; y vías compartidas con los peatones, caso de Almira o Cañuelos. Asimismo, valora la existencia de un parking de bicis en María de Pablos, pegado al campus, o su posible creación en Día Sanz; e incluso anticipa posibilidades de ampliación del trazado ciclable con la creación de otros anillos complementarios por los barrios.

El portavoz de IU y concejal de Medio Ambiente, Ángel Galindo, conoció la propuesta en una reunión informal que mantuvo recientemente con Bicicla y en principio, le ha convencido. El encuentro lo solicitó el propio Galindo para recabar ideas de cara a la elaboración del presupuesto municipal de 2021 con el PSOE, y esta propuesta, cuando menos, tiene visos de ponerse sobre la mesa para su estudio.

«Yo creo que es una muy buena idea», valora Galindo. «Ahora sería cuestión de que los técnicos municipales la analizaran al detalle para comprobar su viabilidad y cómo adaptarla a un proyecto, además de ver su coste, pero la propuesta parece buena y nos gustaría que se tuviera en cuenta en los próximos presupuestos», incide. «De momento la vamos a poner encima de la mesa», un pequeño paso adelante para fomentar que el ciudadano acabe pedaleando con más confianza en un tiempo en el que no sólo Segovia, sino medio mundo, busca un modelo de movilidad que vaya más allá del transporte público colectivo como única alternativa al coche privado o los recorridos a pie.