El 'techo' alevín de Castilla y León vive en Marazoleja

Nacho Sáez
-

Mide 1,80 con 11 años, juega en el Elasa Saltamontes Valverde y la federación regional le ha citado para participar en una concentración estas Navidades. Juan Gabriel Calvo es el jugador más alto de su edad de toda la Comunidad.

El 'techo' alevín de Castilla y León vive en Marazoleja

Ante la falta de instalaciones y niños con los que poder jugar en su pueblo, Marazoleja, sus padres le han comprado una canasta para que practique el tiro cada vez que le apetezca. Así no tiene que desplazarse siempre a Valverde del Majano, donde estudia y está su equipo de baloncesto. Juan Gabriel Calvo, a sus 11 años, ha sido citado por la federación regional para participar en una concentración estas Navidades (en Miranda de Ebro) que realizará la selección de Castilla y León de minibasket. Un ‘stage’ que servirá para perfilar qué jugadores acuden al próximo campeonato de España de esta categoría.

Las cualidades de este niño de Marazoleja no han pasado desapercibidas para los técnicos, que ya contaron con él en el Programa Regional de Detección de Talento. Con su 1,80 metros de altura, es el techo del baloncesto alevín en Castilla y León. No hay ningún jugador de su edad en la Comunidad más alto que él, ni tampoco por supuesto en su equipo, donde parece el hermano mayor del resto. Posa para las fotografías de este reportaje escoltado por sus compañeros, con los que se aprecia la diferencia física.

Sin embargo, la estatura es el único signo de distinción  de Juan Gabriel. Él se siente uno más dentro de un grupo de amigos, cualidad que define al Elasa Saltamontes Valverde. Los integrantes de este equipo de minibasket jugaron por primera vez juntos en la Superliga DIA –una competición de promoción– y desde entonces no se han separado, incluso a pesar de que a algunos les tienen que llevar sus padres en coche desde Segovia u otros municipios. Iago Herrero es de Garcillán; Aitana Arribas, de Hontanares de Eresma; Eduardo Palomo, de Abades, y Daniela de Frutos, Jimena Barreno y Jaime Maroto, de Segovia capital.

El 'techo' alevín de Castilla y León vive en MarazolejaEl 'techo' alevín de Castilla y León vive en MarazolejaEsta escuela de baloncesto y también la de fútbol sala de Valverde se han convertido en una referencia para el entorno y están permitiendo consolidar un modelo de trabajo basado en la educación en valores y en entrenamientos específicos. «Tenemos un ambiente, familiar, ofrecemos una atención personalizada y creemos que conseguimos motivar a los chicos para que, según van creciendo, continúen jugando y no lo dejen», explica una de sus responsables, Carmen Gómez Elices, orgullosa de la implicación de las familias.

Valverde explota las posibilidades que le ofrece su pabellón municipal, uno de los más modernos de la provincia. Este se encuentra de estreno, además, ya que hace sólo unos días concluyó la instalación del nuevo parqué. El antiguo tuvo que ser retirado el pasado mes de abril por una inundación provocada por las lluvias, y desde entonces los usuarios del pabellón habían tenido que practicar los diferentes deportes sobre la capa de cemento que se encuentra debajo. También en el patio del colegio o en la plaza del pueblo, convertida en cancha improvisada por culpa de aquella inundación en la que los vecinos, de forma voluntaria y espontánea, acudieron al pabellón, para colaborar en la retirada de la tarima con el objetivo –finalmente sin éxito– de salvarla.

Ese compromiso con su pueblo entronca con el caso de Juan Gabriel y su convocatoria con la selección de Castilla y León. «La implicación familiar es básica. Supone rehacer agendas y costes económicos no previstos en entornos rurales, como es el caso de Juanga, donde los núcleos familiares son muy humildes. Toda la ayuda que desde el club demos (facilidades para colaborar en desplazamientos, entrenamientos extra para que mejore, traslados a entrenamientos y partidos...) está más que justificada para que pueda disfrutar de su sueño»,  indica la responsable de un Elasa Saltamontes Valverde que cuenta como entrenadora con Miriam Rollán, la jugadora del Unami de Primera Nacional.

La escolta balear es un espejo para Juan Gabriel, que simultanea su presencia en el equipo valverdano de minibasket con apariciones en los infantiles del Claret, una categoría por encima de la que le corresponde por edad. «Es que en alevines no tiene rivales y uno de nuestros objetivos es tener convenios con otros clubes para que los jugadores puedan mejorar», resume Gómez Elices. No es el único que sube de categoría periódicamente. También lo hace por ejemplo su compañera Daniela de Frutos, alistada con el equipo infantil del CD Base.

Daniela y también Lorena Villegas han formado parte de esa preselección de Castilla y León en la que ya sólo continúan Juan Gabriel y Yago Herrero. Un éxito que el Saltamontes Valverde asume con cautelas. «Somos conscientes de que las generaciones son muy diferentes. A veces los premios deportivos vienen en forma de convocatorias de selección, lo que nos enorgullece, y otras en forma de niños apasionados, llenos de valores. En Saltamontes ponemos siempre la atención en el deportista, en cada uno de ellos, dando importancia relativa al talento y otorgándola sobre todo al esfuerzo, el interés y el orgullo de pertenencia», argumenta Gómez Elices. El club proporciona a sus jóvenes jugadores unos entrenamientos adaptados a sus condiciones técnicas y físicas, pero prioriza la diversión con el objetivo de evitar el abandono del deporte, que en el medio rural se concentra de forma significativa tras el paso del colegio al instituto, al estar centralizada esta etapa de la enseñanza en los grandes núcleos de población. En el caso de Valverde, en Segovia capital.

Saben lo que es salvar esos obstáculos y llegar al deporte profesional la propia Gómez Elices y Diego Palomo, responsable de la escuela de fútbol sala. Jugadora una del mítico equipo de Jesuitinas de Primera e integrante el otro de varios equipos de Segunda División de fútbol sala, representan en Valverde la cúspide de una pirámide en la que «multiplicamos los esfuerzos para proponer actividades e iniciativas». La responsable de la escuela de baloncesto disecciona la filosofía del Saltamontes Valverde: «Somos una familia con pilares y valores muy ligados a la vida en nuestros pueblos. El deporte rural no lo consideramos una excusa sino una fortaleza».

Y ahora tiene una promesa en ciernes en Juan Gabriel, ese techo alevín de Castilla y León que no tiene ídolos ni equipos preferidos, sino que simplemente disfruta con una pelota de baloncesto y del hecho de poder jugar junto a sus amigos del colegio. En su clase, de 21 alumnos, 12 practican el básket.