¿Qué fue de los héroes de la Copa de Europa del Caja?

Nacho Sáez
-

Cuando se cumplen veinte años del primer título internacional del Caja Segovia, El Día rastrea las huellas de quienes formaron parte de aquel inolvidable equipo. Hay un actor, un empresario, un comerciante, un profesor...

Los integrantes del Caja Segovia posan con el trofeo de campeones tras derrotar al BNL Roma. - Foto: Libro 'Un campeón entre dos siglos'

La redifusión el pasado 17 de abril de la final que permitió al Caja Segovia conquistar su primer y único título de campeón de Europa ha despertado la nostalgia en los aficionados segovianos al fútbol sala. Desde hace unos meses ya no tienen equipo en la élite y el recuerdo de ese pasado esplendoroso se ha convertido en el principal pasatiempo para ellos, especialmente durante este confinamiento. 

Aquel partido lo ganó el Caja por cuatro goles a uno al BNL Roma con un Daniel Ibañes estelar y dio continuidad a un ciclo mágico de éxitos con tres Copas y una liga que se redondearía en los meses siguientes con el Mundial de clubes que el equipo segoviano conquistaría en Moscú. Pero ese triunfo continental comenzó a marcar un antes y un después en la trayectoria de una increíble generación de jugadores que se fue dispersando por la lógica pretensión de la mayoría de ellos de unirse a proyectos deportivos con más recursos.

Al final de la temporada 1999-2000 hicieron las maletas Orol, Marcelo Serpa y Óscar Jiménez rumbo al Interviú Boomerang iniciando el fin de ciclo de uno de los equipos que mejor ha jugado al fútbol sala en el mundo. Todavía hubo tiempo para que llegaran al equipo otros jugadores míticos como Cristian, Alexandre o Álvaro Aparicio y  para que se levantase el Mundial y una Supercopa de España, pero seguramente ya nada fue lo mismo.

¿Qué fue de los héroes de la Copa de Europa del Caja?¿Qué fue de los héroes de la Copa de Europa del Caja?

«Recordar la Copa de Europa supone que un sinfín de imágenes y sensaciones se agolpen en mi mente apretando con fuerza el corazón, aún hoy emocionado y haciendo mil pedazos el alma para repartirla entre todos con generosidad», escribió el vicepresidente de aquel Caja, Malaquías del Pozo, en su libro ‘Un campeón entre dos siglos (1998-2001). Este viernes 1 de mayo se cumplen 20 años exactos del día en el que  Segovia reinó en Europa y El Día ha querido conmemorarlo rastreando las huellas de los héroes que lo hicieron posible. Ninguno terminó sus carreras en el Caja, pero todos dejaron una huella imborrable en los aficionados, que hoy continúan repasando con enorme devoción las imágenes de aquella gesta.

En una de las más icónicas en la celebración de cualquier título, la de jugadores y cuerpo técnico posando sobre la cancha nada más recoger el trofeo de campeones, no aparece curiosamente uno de sus principales artífices. Venancio López se perdió aquella fotografía –al menos en las que aparecen en el libro de Malaquías del Pozo–, pero su nombre está inscrito con letras de oro en la historia del fútbol sala segoviano. Cogió las riendas del proyecto que había iniciado Jesús Candelas con la victoria en la Copa de España de 1998 y llevó al Caja a lo más alto en las dos ediciones siguientes de esta competición, en la Liga de 1999 y en la Copa de Europa y el Mundial del 2000. 

A principios del 2002 dejó el equipo segoviano y se tomó unos meses sabáticos antes de dirigir a Guatemala, al Lobelle Santiago y finalmente a la selección española, donde completó una década prodigiosa antes de pasar a los despachos. Actualmente es el director técnico deportivo para el fútbol sala de la Real Federación Española de Fútbol, por lo que ha pasado a un segundo plano, pero hay pocos nombres con más prestigio en este deporte a escala internacional incluso.

En el corazón de los aficionados seguramente solo compita a su misma altura Daniel Ibañes, el emblema de aquel equipo. Considerado en su momento el mejor jugador del mundo, fichó en el 2002 por el Interviú Boomerang, donde se retiró y donde desempeñó –tras colgar las zapatillas– varios puestos en su organigrama antes de iniciar una carrera como entrenador que, tras pasar por el Burela y por la República Checa, le llevó al Real Betis, donde desde esta temporada es el director deportivo de la sección de fútbol sala. En estos momentos aguarda si la Liga Nacional de Fútbol Sala les concede una plaza en la Primera División la próxima temporada. También fundó en Segovia el Segosala.

Desde el 1 de mayo del 2000, las vidas de la mayoría de sus compañeros han transcurrido paralelas al deporte, aunque algunos también han desarrollado facetas profesionales fuera de él. Son los casos de Antonio Adeva y Juan Werner, dueño de una gestoría y comercial de una empresa de zumos y vinos, respectivamente. Pero siempre serán los héroes del Caja. «En lo personal y en lo deportivo, aquella época resultó inolvidable», destaca Orol. «La primera Copa de España que ganamos fue la más bonita, pero vi la final en Teledeporte», remacha Adeva.