El candidato de Ciudadanos a la Presidencia de la Junta de Catilla y León denunció hoy que la sanidad de la Comunidad necesita “aligerar la dieta” de promesas y “caramelos envenenados”, y mejorar en gestión para que los servicios funciones y los profesionales se sientan reconocidos por su trabajo. Igea realizó estas declaraciones al hilo de la nueva polémica sobre las últimas oposiciones de Enfermería, celebradas el pasado 12 de mayo, que han sido criticadas por las organizaciones profesionales, algunos opositores y los sindicatos del sector.

“Es la enésima vez que las oposiciones de Sanidad en Castilla y León se ven judicializadas, cómo los tribunales las tumban”, mantuvo, para insistir en que durante estos cuatro años no ha habido una oposición, ni una designación que no haya sido recurrida. “Es absolutamente lamentable la incapacidad de la Consejería de Sanidad”, dijo, al tiempo que criticó las declaraciones que hizo hoy el líder del PP, Alfonso Fernández Mañueco, al anunciar que pedirá a Sacyl una investigación para ver lo que ha ocurrido.

Frente a ello, Igea explicó que su apuesta por una sanidad de calidad, con resultados en salud equivalentes con independencia de la provincia en la que se viva, y en la que los ciudadanos tenga la libertad de elección de centro. Eso se logra con un control de la calidad del sistema, midiendo resultados, con una gestión eficaz, que pasa por que los gerentes de los hospitales rindan cuentas en la Comisión de Sanidad de las Cortes, con “soluciones reales” y no promesas que no se cumplen, como el nuevo Hospital Carrión de Palencia que en tres campañas electorales sigue siendo el más anunciado de la historia.

Ha arropado a las candidatas por Segovia, Marta Sanz, a las Cortes, y Noemí Otero, a la alcaldía. Igea ha pasado la jornada en Segovia, primero en las Hoces del Duratón y por la tarde en un paseo ciudadano por la capital.