La alta incidencia registrada en la localidad de Abades, con 15 positivos a fecha de este jueves, ha llevado al consistorio, de 857 vecinos, a pedir el confinamiento voluntario a sus vecinos.
En un bando, firmado por la alcaldesa Magdalena Rodríguez, y ante el riesgo de transmisión comunitaria de coronavirus:
-Se propone a la ciudadanía un autoconfinamiento voluntario como medida de choque para paliar el aumento de casos. Se recomienda salir del domicilio únicamente para realizar actividades esenciales (trabajo, colegios e institutos, y compras de primera necesidad).
-El Ayuntamiento cerrará todos los edificios municipales, entre los que se encuentran: el centro cultural, la antigua guardería y los parques infantiles se precintarán todas las zonas de juego. Por todo ello quedan canceladas todas las actividades socioculturales y deportivas previstas organizadas por el Ayuntamiento.
-Ante la elevada transmisión comunitaria existente rogamos extremen todas las precauciones preventivas frente a la Covid-19.
Estas medidas "se extenderán hasta el próximo 1 de febrero, sin perjuicio de que, si la situación no mejora, se puedan ampliar nuevamente". En el bando, además piden "comprensión y responsabilidad ante esta situación tan grave y extrema que estamos padeciendo, y les agradecemos el esfuerzo que están realizando, entre todos lograremos salir adelante".
El pasado domingo se celebró por última vez la eucaristía, y la parroquia de San Lorenzo Mártir, debido a las nuevas restricciones aprobadas por la Junta de Castilla y León, decidió la suspensión de los actos litúrgicos hasta nuevo aviso.
En el mes de agosto fue el municipio de Carrascal del Río el que solicitó a sus vecinos su confinamiento, aunque después, y ante la alta incidencia, se realizó un cierre perimetral por parte de las autoridades sanitarias.