Diez partidos de sanción para el entrenador de La Granja

Nacho Sáez
-

Competición castiga a Diego Yepes por dar instrucciones desde la grada durante el partido contra el Bupolsa, pese a estar sancionado.

Diego Yepes, entrenador del CD La Granja. - Foto: Javier Segovia CD La Granja

La decisión de la jueza de Competición de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) ha caído como una bomba en el Club Deportivo La Granja, que afrontará diez de las últimas once jornadas de Liga, en las que se juega la permanencia, sin que su entrenador se pueda sentar en el banquillo, salvo que prospere el recurso que ha presentado.

El motivo es el castigo de diez partidos que ha recibido su técnico, Diego Yepes, por dar instrucciones desde la grada a sus futbolistas estando sancionado durante el partido del pasado domingo contra el Bupolsa. En el transcurso del choque, el árbitro advirtió al delegado de La Granja de que Yepes tenía que permanecer en silencio y, aunque en un principio no lo reseñó en el acta, posteriormente realizó un anexo en el que describió la situación vivida.

El Código Disciplinario recoge en su artículo 55 que "la suspensión por tiempo determinado implicará la prohibición de alinearse, acceder al terreno de juego, al banquillo y a la zona de vestuarios y en caso de los técnicos además de las prohibiciones antedichas, la de situarse en las inmediaciones del banquillo y la de dar instrucciones de cualquier índole y por cualquier medio a los que participen en el encuentro". El incumplimiento de esta normativa conlleva una sanción de cuatro a veinte partidos o de uno a seis meses, según figura en el artículo 104 del citado Código Disciplinario.

"No es manera de hacer justicia", se queja Yepes. "Soy consciente de que me la jugué, porque nos jugábamos mucho, pero considero desmesurada la sanción. Me han puesto los mismos partidos que a Pepe por pegarle una patada en la cabeza a Casquero". El club recibió este jueves la comunicación de la sanción y presentará un recurso que "esperamos que se tenga en cuenta", según señala su presidente, Pablo Alejandro Simal, también sorprendido por la "brutalidad" del castigo. "Me parece una pasada porque en ningún momento hubo insultos. Le dijeron al delegado que no podía estar ahí y se retiró dos o tres metros. Es demencial", apunta, al tiempo que reconoce la difícil situación en la que se queda el equipo. Clasificado en posiciones de descenso a Regional, podría tener que afrontar la recta final del curso sin entrenador durante los partidos. "Ahora no es momento de tomar decisiones. A ver qué pasa con el recurso", indica Pablo Alejandro cuando se le pregunta sobre el futuro de Yepes.