El talento cuellarano, a escena por Navidad

Cristina Sancho
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(INCLUYE GALERÍA DE FOTOS) Artistas e investigadores de Cuéllar reinterpretan el patrimonio de la villa desde sus disciplinas en una exposición que permanecerá abierta hasta el 10 de enero en la sala Tenerías.

El talento cuellarano, a escena por Navidad

La Navidad es época de reencuentros con la familia y amigos. En este aciago 2020 esto será un poco más difícil en muchos casos debido a la situación de pandemia en la que nos encontramos. No obstante es momento de reinventarse para estar unidos en la distancia o a través de las pantallas. La Concejalía de Cultura y Turismo del Ayuntamiento de Cuéllar también aprovechó el confinamiento del pasado mes de marzo para reinventar proyectos que ahora están dando algunos de sus frutos y que, cuando la normalidad y el turismo vuelvan a la villa, se mostrarán en su plenitud. 

Maite Sánchez propuso a un amplio grupo de artistas de Cuéllar que en base a sus disciplinas reinventaran un nuevo punto de vista de los monumentos y el patrimonio de la villa. El resultado de los trabajos se puede ver hasta el 10 de enero en la sala Tenerías con resultados de lo más curiosos. «Es muy bonito que los artistas de Cuéllar hagan esto porque es una mirada al patrimonio de gente que conoce muy bien el arte. Es una visión con diferentes ojos, de todo lo que tenemos en Cuéllar», apunta la concejal. Se pueden ver no solo monumentos, sino también el patrimonio taurino y natural. Este proyecto forma parte de otro que verá la luz más adelante, ya que estas obras se mostrarán junto a los elementos originales que representan para dar otra vida a los paneles turísticos que se encuentran rotos o deteriorados por la villa. 

Llama especialmente la atención por el tamaño y también por el realismo la recreación del ábside de la iglesia de San Martín que ha realizado la ceramista cuellarana Lola Velasco, que partía con el encargo de que pudiera tocarse. En este caso la intención del trabajo, según explica la concejal, es que «la gente con otras capacidades, por ejemplo la gente ciega, pueda tocarlo y entender cómo es el arte mudéjar». Todo un reto que Velasco ha logrado a base de técnica y paciencia. «He procurado hacerlo lo más cercano a la realidad posible y adaptándolo a la medida. Incluso conté los ladrillos que tienen los arcos. La preparación fue trabajosa pero una vez que estaba planteado, disfruté mucho pintando los ladrillos, me relajaba», relata la ceramista, que también ha recreado un pequeño detalle de la puerta de la iglesia de San Andrés. 

El talento cuellarano, a escena por NavidadEl talento cuellarano, a escena por Navidad

Otro reto importante, no solo por la realización sino por el estado en que se encuentra, fue el que asumió Mari Cruz Salamanca reinterpretando la calle San Pedro. Pensó cómo podía hacer algo original mezclando distintas técnicas como el bordado, el collage con telas y la pintura. El resultado sorprende e invita a buscar el detalle. También fue un desafío para Jesús Calvo ‘Tomillo’ el ábside del convento de Santa Clara. Era la primera vez que hacía conventos y más un retablo. En apenas quince días y con la pintura aún fresca explica que hay que ver la obra en la distancia y con perspectiva. Destaca no solo el retablo en sí, sino la bóveda y el tradicional cielo con la típica luna que caracteriza al pintor cuellarano. En su caso también muestra otra obra realizada durante el confinamiento como es la iglesia de la Cuesta naciendo de una maceta. 

Más realista son las dos aportaciones de José Luis Llorente Pan en su regreso a la pintura después de tres años sin coger un pincel. Recrea la torre de la extinta iglesia de Santa Marina y la iglesia de El Salvador, dos monumentos complicados que se unen al recorrido que ofrecen otros autores. La capilla de la Magdalena de Sara Perlado, el castillo de Dyango Velasco, la murallas a través de la fotografía de Eduardo Marcos, el convento de San Basilio de López Tablada, el estudio de gramática de Daniel Aguado, el ábside de Santiago y los sepulcros de San Esteban con la cerámica de Alfonsa Laguna, el Ayuntamiento a través de la fotografía de Enrique Madroño, las ilustraciones de Blanca Amelia Izquierdo que invitan a pasear por el parque de la Huerta del Duque con los ojos de un niño conociendo las características de cada especie o el recorrido de los encierros en distintos cuadros de Alfonso Rey son algunas de las obras que se pueden ver con otros ojos de artistas cuellaranos. 

Al margen de las obras artísticas, dos cuellaranas volverán a casa por Navidad para poner en valor en su tierra el trabajo que ambas desarrollan en Andalucía en la actualidad. La Concejalía de Asuntos Sociales se ha propuesto dar a conocer el interesante trabajo de vecinos fuera del municipio en una serie de charlas que se realizarán en la sala Alfonsa de la Torre bajo cita previa pero que serán grabadas para llevarlas posteriormente a los colegios e institutos. La primera en explicar su proyecto el sábado 26 de diciembre será la científica marina, ambientóloga y buceadora profesional Marina Palacios quien lidera un proyecto denominado ‘SOS Corales’ en los acantilados y fondos marinos de ‘Punta la Mona’ en Estepona (Málaga). 

El martes 29 hará lo propio la bióloga Sara Cuesta, que en la actualidad se encuentra investigando sobre cómo la microbiota, las bacterias que el ser humano tiene en el organismo, influyen en pacientes con VIH. Su trayectoria profesional se ha centrado en la investigación en terapias de envejecimiento en la Universidad Complutense de Madrid y posteriormente en el Roswell Park Cancer Institute de Buffalo. En Estados Unidos estudió la relación de la microbiota en el cáncer y la importancia de una buena alimentación. De vuelta a España tras tres años y medio fuera, en el Instituto de Investigación de Biología de Lleida investigó, mientras, sobre la relación entre microbiota y la insuficiencia cardiaca. En la actualidad en el Instituto Biológico de Cádiz, además de estudiar la influencia en el VIH, están planteando un proyecto sobre cómo afecta la microbiota en pacientes con coronavirus.