La evolución de visitas al Alcázar de Segovia está experimentando una curva ascendente, semana tras semana, despues de la reapertura, desde las 300 personas diarias, a finales de junio; a las 600, a mediados de julio; unas 1.000, a primeros de agosto, y 1.245 de media, en la semana del 10 al 16 de agosto, según ha señalado a EL DÍA el alcaide de la fortaleza y coronel de la Academia de Artillería, Alejandro Serrano Martínez.
Para el alcaide, los datos reflejan el alto grado de conocimiento que los turistas tienen de Segovia y de su Alcázar y, además, a nivel interno, la alta afluencia de visitantes «ha permitido al patronato probar el buen funcionamiento de las medidas implementadas a partir del plan de contingencia, dirigidas a proporcionar los más altos niveles de seguridad frente al riesgo que supone el coronavirus, tanto para los visitantes como para los trabajadores del Alcázar».
Con un 97% de visitantes españoles, cuando la cifra de extranjeros se suele situar en un 30%, pasando ahora a ser residual, principalmente con turistas europeos, ya que han desaparecido mercados que eran muy fuertes como el americano y el asiático, el Alcázar fue el primer monumento en abrir aunque el patronato que lo rige descarta hacer comparaciones con visitas de otros bienes patrimoniales españoles, sino centrar sus esfuerzos en dar un servicio seguro y de calidad. Cerca de 500 segovianos lo han visitado en la primera quincena de agosto, que se han beneficiado de la tarifa especial de un euro.
El alcaide estima que, durante el periodo de cierre, se han dejado de ingresar en torno a 1,2 millones de euros, contando con un nivel de solvencia suficiente que ha permitido hacer frente a la crisis sin necesidad de realizar un ERTE en su plantilla, que se ha mantenido al 100%.
En cuanto a las obras que se llevan a cabo en la Plaza Reina Victoria Eugenia, el coronel Serrano, tras explicar que se vieron afectadas por el estado de alarma y el retraso en suministros, anuncia que «el grado de ejecución global de los trabajos es superior al 75%, y pronto podremos dar por finalizada una parte importante del proyecto, la restauración de las fachadas de la Casa de la Química, intervención que devolverá al exterior del edificio un aspecto muy similar al que tuvo en origen». Respecto a la conclusión de las obras, añade que se puede producir a finales de año.
En lo referente a proyectos, el alcaide subraya que los esfuerzos se centran en la conclusión de la remodelación de la plazuela, que ha incluido la mejora de la red de protección contra incendios y la restauración de la escalera histórica de bajada hacia el puente del Piojo.
Además, se está realizando algún otro pequeño proyecto de carácter correctivo, como la reestructuración del sistema de evacuación de pluviales en el inicio del adarve de la coracha, junto a la terraza del Pozo. El agua que se metía en el interior de la escalera estaba afectando al revoco de los muros, cerca de un cuadro eléctrico. También se está llevando a cabo la restauración de los bancos de madera que están colocados por todo el Alcázar y la sustitución del mástil de la bandera en lo alto de la torre de Juan II.
Con la mirada puesta en el mantenimiento del monumento, la disminución en los ingresos obligará a un control del gasto.