Reconociendo que ha sido un año con muchas dificultades para su mandato, el alcalde del Real Sitio de San Ildefonso, Samuel Alonso (PSOE), de 39 años,  opina que, como Carlos III, en el siglo XVIII, su municipio puede servir como laboratorio de nuevos proyectos del Gobierno de España, como los vinculados con el medio ambiente.  

Su primer año como alcalde ha tenido sus dificultades...

Sin olvidar la pandemia, nada más tomar posesión hubo un ahogamiento en ‘El Pontón’, a las tres semanas se registró el incendio en la Sierra de Guadarrama, cuyas secuelas se mantienen, y hemos vivido un crimen machista, estos días. Ha sido un año con demasiados sobresaltos. Tenemos un gran equipo que está trabajando muy duro todos los días  para intentar sacar adelante todos los proyectos, trabajando para los vecinos. 

¿Le ha dado tiempo para desarrollar algún proyecto?

Se están levando a cabo proyectos y se trabaja en otros para poder presentar a administraciones supramunicipales, teniendo en cuenta que nuestro término pertenece en un 90% a Patrimonio del Estado y otra parte a la Junta de Castilla y León. Formamos parte de un Parque Nacional, somos Reserva de la Biosfera e, igual que tiene sus grandes beneficios, también se plantean encorsetamientos que son los que debemos ir puliendo. Se han presentado diferentes proyectos e intentamos coordinar todo, a pesar de la que está cayendo.

¿Cómo es la convivencia con las demás administraciones?

La relación con otras administraciones, tanto Diputación Provincial, como Junta de Castilla y León o el Gobierno de España es buena y fluida.  El Real Sitio de San Ildefonso puede ser el modelo perfecto para proyectar en él diferentes proyectos y más hoy en día que se puede promover el empleo verde, la investigación, el I+D+i o las nuevas tecnologías.  Es el territorio, el suyo, en el que el Gobierno de España puede llevar a cabo diferentes proyectos que funcionarían como laboratorio, como en el siglo XVIII, con Carlos III, con el primer alcantarillado o el primer cementerio extramuros o la primera red de agua tal y como se concibe hoy en día, para exportarlo después a las grandes ciudades, sobre todo Madrid.  El núcleo de La Granja y Valsaín son los idóneos para emprender esos proyectos ecológicos, diseñándoles en pequeño y poderlos expandir a otro amplioss lugares más. Proponemos a las Administraciones que nos usen, en el buen sentido de la palabra.

Uno de los lastres de su ayuntamiento era la deuda de unos 4,5 millones de euros, ¿cómo la están afrontando?

La estamos abonando según nos van marcando los servicios de intervención y tesorería, aún nos quedan cinco años para liquidarla totalmente, con un endeudamiento del 90%, aunque lo permitido es el 110%.     

¿Van a seguir las directrices acordadas por la FEMP sobre los ahorros?

El año pasado el presupuesto se cerró con un remanente de tesorería de aproximadamente 600.000 euros. Desde que tomé posesión,  en el ámbito económico es la intervención quien va marcando las pautas en cuanto a legalidad y estabilidad del ayuntamiento.  Si el acuerdo se consolida en el Parlamento, se hará lo que nos diga este servicio.     

¿En qué ha cambiado el municipio en este año?  

Pues en sintonía a como ha cambiado el mundo que conocíamos antes, hemos pasado por grandes choques emocionales. Con el incendio se vio un municipio cohesionado, solidario y en lucha por algo que lo sienten como propio. De todos es sabido, que las tres primeras semanas de marzo, la pandemia impactó de forma muy cruel en nuestro municipio y esto ha hecho también que la gente haya mostrado su cohesión y ayuda mutua, sin olvidar que estamos ante un repunte que, ojalá, pase de una manera más leve.

Por la proximidad en el tiempo, ¿cómo ha afectado la muerte de la vecina de La Granja Alina Erica, apuñalada por su expareja?

Ha sido terrible, inimaginable aunque lo ves en las noticias, cada dos o tres días, por desgracia, y te preguntas ¿quién puede hacer esto?.  Es una actitud cruel, inhumana e incoherente.  Cuando pasa tan cerca el cuerpo se vacía de lógica, ¿cómo es posible que a una mujer de 37 años la haya llevado por delante un hombre por el mero hecho de no querer estar con él?.  Esa conmoción estará presente en el municipio durante mucho tiempo pero no es cuestión de una lucha de forma individual, es un daño transversal que tenemos en la sociedad, hay que planteárselo muy seriamente y esto tiene que venir desde la educación básica, de la información que se transmite al ciudadano y el comportamiento cívico de cada una de las personas que formamos la sociedad para acabar con esta lacra, a medio plazo.  Si en vez de 1.061 mujeres, desde que se tienen datos en 2003, lo que es algo terrible, los fallecidos hubieran sido deportistas, políticos o cualquier otro colectivo, estaríamos pensando que estamos todos locos.  

¿Qué le haría feliz, por haber cumplido algún proyecto completo?

Intento vivir siempre con los pies en el suelo, en el día a día, sabiendo que las circunstancias de la vida pueden cambiar de un momento a otro, como nos ha demostrado este último año. Me gustaría salir con la misma ilusión con la que empecé, sabiendo que,  tanto el equipo de gobierno, como la oposición, estaremos satisfechos porque habremos dado todo para mejorar la vida de nuestros vecinos, que ninguno se sienta agraviado porque todo lo que se hace va siempre buscando el bien común; y así serán las decisiones que tomaremos en estos tres años.  Terminar el mandato pensando que hemos hecho un trabajo bien hecho, que hemos conseguido lograr o, al menos intentado, aquello con lo que nos comprometimos en nuestro programa electoral, pese a que ha cambiado la realidad de España, de Europa y del mundo, en unos meses,  y hay que adaptarse.  Y ojalá que, en estos tres años, no tengamos que lamentar ninguna vida más que la determine el discurrir natural.