El turismo de congresos, convenciones y viajes de incentivo no deja de crecer. En 2009, el año en que el Ayuntamiento abrió la oficina con la que capta y ayuda a organizar ese tipo de eventos (Segovia Convention Bureau), se contabilizaron 1.435 delegados o turistas de negocios, cifra parecida a la que se registra ahora, pero no cada año, sino al mes; y sigue subiendo. En 2018 hubo 10.884 delegados (907 de media mensual), mientras que en el primer semestre de 2019 fueron 7.270 (1.211); y a estas alturas del año se pueden haber superado las cifras de todo el anterior. De hecho, la concejala responsable de esta área, Claudia de Santos, destacaba el jueves que el impacto económico directo del turismo de negocios ya asciende a «unos 2,3 millones a fecha de hoy»; con proyección, por tanto, de rondar los tres millones al acabar el año.
Tales estimaciones parten de los datos más recientes de la Spain Convention Bureau, que cifra en 103,58 euros el gasto medio diario por delegado, y en Segovia suelen pasar de dos a tres jornadas (2,47). El 34,6% de ese gasto lo dedican al alojamiento; el 25,9%, a la cuota de inscripción; 15,2%, a restauración; 11,4%, compras; 8,09%, ocio; 2,4%, transporte interno; y 1,6%, otros gastos.
Si se mide la evolución del turismo congresual por número de eventos, la Segovia Convention Bureau contabilizó 12 en 2009, frente a 92 en 2018, mientras que en el primer semestre de 2019 ya hubo 60 y hasta la fecha van unos 90.
La oficina de congresos de Segovia destaca así como la principal unidad de negocio de la Empresa Municipal de Turismo en lo que se refiere a impacto económico directo. Hay otras dos: la Central de Reservas, que factura más de 600.000 euros al año en productos propios (visitas guiadas o souvenirs, principalmente) o de empresas de turismo activo y gastronomía con las que colabora; y la Segovia Film Office, que ‘sólo’ deja entre 100.000 y 150.000 euros de ingresos directos a la ciudad, principalmente por lo que cobran los figurantes.Claro que luego está el beneficio indirecto e intangible de la promoción de la ciudad por esos rodajes y las visitas que generan por ello a medio plazo, así que todo suma para que el turismo de la ciudad del Acueducto, por suerte o desgracia, por mérito propio o demérito del resto de sectores de actividad, ya suponga casi el 20% de su Producto Interior Bruto.