El testimonio valiente de Ana Isabel Sanz Gómez marcó hoy el acto del Día Mundial del Cáncer de Mama celebrado en el antiguo salón de plenos del Ayuntamiento de Segovia. Ana tiene tiene metástasis en los huesos derivada de un cáncer de mama y “no tengo solución. Estadio cuatro de cuatro”. Como paciente reclamó que Segovia cuente "cuanto antes" con una Unidad de Radioterapia para que otras mujeres y hombres no tengan que pasar por la durísima experiencia que sufrió ella en sus viajes al tener que recibir fuera sus tratamientos.

La voz firme de Ana Isabel conmovió a todos los asistentes, autoridades y medios de comunicación, al pedir que las mujeres más jóvenes aprendan e inicien cuanto antes la exploración y palpación de sus pechos y ante cualquier duda sobre cómo hacerlo, acudan a la AECC. Además, consideró en voz alta que si cada vez hay más chicas jóvenes diagnosticadas, “la Junta de Castilla y León algo tendrán que hacer”.

La vida de esta segoviana dio un vuelco total cuando recibió el terrible diagnóstico, justo cuando le hicieron una mamografía después de dos años, y no de forma anual, como le venían haciendo desde hace tiempo por ser “paciente de riesgo”. Ana Isabel explicó que se quedó en shock y que sobre todo pensó en sus hijos y pasó de ir a trabajar todos los días a tener que estar en casa y “necesitar ayuda”. En su opinión, es mejor asimilarlo cuanto antes, “no quedarse en casa, no dejarse llevar por la enfermedad” porque si no "acabas de la cama al sofá y del sofá a la cama”.

Ana Isabel recomendó pedir ayuda y acudir a la Asociación Española contra el Cáncer que tiene muchas actividades y psicólogos que “te pueden ayudar en muchos sentidos”, como poder estar en un piso en Salamanca mientras recibió un tratamiento y evitar la dureza de los viajes de ida a vuelta a Segovia, en los que lo pasaba fatal vomitando en los servicios de la estación del Ave o las paradas que tenía que hacer su cuñado, antes de llegar en coche a casa.

Ana Isabel Sanz no se esconde y explica a los periodistas que no tiene curación, “tengo metástasis en los huesos”. Los médicos le hablan de “sellarlo para que no salte a órganos y que no avance, que es lo mejor que me puede pasar porque no tengo solución”, es un estadio cuatro sobre cuarto.

Con mucho sentido del humor explicó que tienen los dolores bajo control porque toma “entre 10 y 12 pastillas diarias y estoy con morfina”, además hace “yoga dos veces a la semana que me viene fenomenal”, los días que está mal hace lo que puede pero “te levantas y te vas”.

Ana Isabel Sanz agradeció a su entorno más cercano que nunca la dejan sola, a su hermana, su marido y sus dos hijos que son su apoyo y reconoció que “desgraciadamente no todo el mundo lo tiene y es muy importante”.

Tras las palabras de Ana Isabel, fue la periodista segoviana Carmen Martín Robledo, que lleva cuatro años curada de un cáncer de mama, la que dio testimonio de su lucha, en la que estuvo respaldada por grandes profesionales médicas en Atención Primaria y en Oncología del Hospital General. “Carcinoma de mama ductal infiltrante grado 3, triple negativo. Sólo el nombre asusta y encoge el corazón”, relató Carmen Martín, pero esto significaba que era “el estadio más grave pero sin metástasis”.

La periodista recordó los nombres de las profesionales que le acompañaron en el camino, cuidándola física y psíquicamente, además de la ayuda para que su madre no lo pasara mal. Carmen confesó que afrontó su cáncer de mama con una serenidad y paz que “no creía poseer” porque es una persona que le da “muchas vueltas a las cosas”, aunque decidió que en casa, con su marido y sus dos hijas, su enfermedad solo fuera “un periodo diferente”.

Carmen Martín resaltó que no le importó el aspecto físico e incluso que ir con el pañuelo hacía que la gente le preguntara y le aliviaba hablar de ellos, contar que “ya me quedaba poco para terminar los tratamientos”. La periodista segoviano finalizó recordando que hace cuatro años un cáncer se puso en su camino pero, gracias a los que tuvo cerca, “ya es historia”.

1.200 casos al año

La presidenta de la AECC en Segovia, Ana Sanjosé puso el acento en la importancia del “autocuidado” y “la prevención”, y resaltó que cada vez se diagnosticará más. En Segovia, en el conjunto de todos los tipos de cáncer, se diagnostica 1.200 casos nuevos de una enfermedad universal que afecta a todas las etapas de la vida.

En cuanto al cáncer de mama, en España, se ha pasado de 25.000 casos en 2012, a 33.000 casos en 2019, porque se hacen más pruebas diagnósticas y se “abarca a más población”, aumentando por ambos extremos de edad el número de diagnósticos.

La alcaldesa de Segovia, Clara Luquero, recordó que cada 18 de octubre es “un día para sensibilidad a la sociedad” de que hay que destinar más recursos al diagnostico precoz y la investigación y para agradecer “la labor encomiable de la AECC”, en el apoyo y acompañamiento a los enfermos y sus familias. 

A este acto simbólico también acudieron la subdelegada del Gobiernos, Lirio Martín; el delegado territorial de la Junta, José Mazarías; el vicepresidente primero de la Diputación, José María Bravo, entre otras autoridades, así como miembros de la AECC en Segovia. El acto finalizó con una foto de familia con mensajes de apoyo escritos en sus manos.