La Sala de Exposiciones Temporales del Museo Etnográfico de Castilla y León acoge la muestra ‘Termus. Territorios musicais. Instrumentos da Raia’, dentro de un proyecto respaldado por el Interreg España-Portugal, y en el que colaboran el Museo Etnográfico de Castilla y León y el Museo da Terra de Miranda (Portugal). Se trata de una muestra que forma parte de un proyecto transfronterizo, auspiciado por los fondos europeos y que está articulado entre el Museu da Terra de Miranda y el Museo Etnográfico de Castilla y León, explicó el director de este último, Pepe Calvo, quien presentó la muestra junto con la directora del centro portgués, Celina Barbaro Pinto. «Es un proyecto ambicioso que ha conllevado un intenso trabajo de campo en torno a la música en los territorios a ambos lados de la frontera de la provincia de Zamora y de las tierras de Miranda do Douro y Bragança. Hemos tenido talleres para niños, jornadas y vamos a hacer una serie de publicaciones», dijo.

Pepe Calvo recordó a Ical que saldrá próximamente una reedición del ‘Cancionero de folclore zamorano’ realizado en 1982 por Miguel Manzano. «Es una nueva edición que viene con trescientas y pico páginas más que el que hizo el maestro Miguel Manzano, que es infatigable, y 2022 tendremos congresos y más jornadas», expuso. «Uno de los platos fuertes de este proyecto es esta exposición que hemos inaugurado hoy y que estará hasta el 14 de noviembre en Zamora y después viajará al otro lado de la frontera para que la puedan disfrutar los vecinos portugueses», anunció en la presentación.

En este contexto, el director del Museo Etnográfico valoró de forma especial que la exposición «profundice en la música tradicional» a ambos lados de la frontera y que resalte las similitudes y las diferencia. 

La exposición «da mucha presencia» al patrimonio sonoro, lo que ha resultado complicado por las medidas de la seguridad sanitaria ante la pandemia. «Ha sido bastante difícil porque teníamos pensado una exposición totalmente distinta, que tuviera muchos cascos para escuchar con auriculares música y, por las vicisitudes de la pandemia, no hemos podido hacerla como queríamos», reconoció. No obstante, celebró que es una exposición que plantea «un juego de visita muy bonito, muy estimulante».