La nueva ley educativa que tiene lista el Gobierno, ya conocida como la 'ley Celaá', constituye la sentencia de muerte para los colegios de educación especial. Así lo creen las familias de los alumnos con discapacidad, que piden el mantenimiento de las inversiones. Hoy han protestado ante las sedes en Segovia del PSOE y de Podemos, donde han pegado corazones de papel con mensajes reivindicativos.

"No al cierre ni vaciado de colegios de necesidades especiales", rezaba uno de ellos. Las familias creen que la 'ley Celaá' supondrá el desmantelamiento de este tipo de centros educativos. La presidenta de la Asociación Ayuda a la Dependencia y Enfermedades Raras de Castilla y León, Yolanda de la Viuda, mostró ayer su rechazo a algunos artículos de la Ley Celaá que hablan de "vaciar" los centros de Educación Especial para incorporar a los alumnos en la modalidad más inclusiva.

Aseguró que la mejor inclusión es proporcionar a estos niños las necesidades educativas que requieren y garantizar sus derechos como personas. "Los centros ordinarios no tienen respuestas para estos niños, además que la ley no está dotada económicamente", sentenció. De la Viuda también se mostró esperanzada en que la reforma de la ley educativa no salga adelante en el Congreso, además de que requiere de su aprobación en el Senado. "Los experimentos, en casa y con gaseosa, señora Celaá", concluyó en declaraciones recogidas por Ical.