La 'metamorfosis' de Concha Velasco

Agencias
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La artista vallisoletana asegura que, a pesar de su vasta experiencia, aún le abruma la responsabilidad de hacer bien hoy su interpretación de la obra de Ovidio en Mérida

La 'metamorfosis' de Concha Velasco - Foto: Jero Morales

A sus casi 80 años, Concha Velasco aún atesora la emoción propia de la juventud mostrándose infatigable. Con una trayectoria de lo más completa, sigue aprendiendo de sus compañeros, tanto jóvenes como mayores, y aprovecha su experiencia vital para trasladarla a los personajes que interpreta.

La artista vallisoletana, que vuelve al Teatro Romano de Mérida con la obra Metamorfosis, dirigida por David Serrano, confiesa estar "ilusionadísima" por su regreso. No obstante, a pesar de su vasta experiencia, todavía le abruma la responsabilidad ante el público.

Cuenta que, acostumbrada a ser una profesional de órdenes rígidos bajo el mando de directores "cuadriculados" como José Carlos Plaza, Miguel Narros o Gerardo Vera, en esta ocasión ha tenido que desaprender para interpretar desde la improvisación. Para la actriz castellano y leonesa, trabajar con Serrano ha sido un descubrimiento, "un lujo maravilloso". "Te deja improvisar y sacar de ti cosas que ni tú mismo conoces, algo que es importante a mi edad, como reírme de mi misma", explica.

Tras pasar por el festival emeritense, con Hélade primero y encarnando a la vengativa Hécuba después, en esta ocasión da vida a una particular narradora en una versión de Mary Zimmerman de la Metamorfosis de Ovidio, a la que el joven director, "siendo fiel al original, ha dado un toque distinto".

Según relata, Serrano le pidió que interpretase su papel de narrador como si de un cuentacuentos infantil se tratara: "Soy la que siempre comienza las historias como si contara un cuento, había una vez un rey rico llamado Midas que tenía mucho dinero...".

Una fórmula que Velasco cree necesario recuperar, que "los padres cuenten cuentos a sus niños porque últimamente con las tablets y los móviles están muy confusos".

Sin embargo, la veterana actriz admite que el papel que más disfruta es el de madre de Faetón, ya que en este montaje todos los actores se desdoblan en varios personajes y ella, además de maestra de ceremonias se enfrenta a otras interpretaciones, "breves pero difíciles". A su juicio, esta Metamorfosis es un espectáculo "maravilloso" que combina amor, tragedia, teatro cómico, e incluso, canciones modernas, pero el público "debe sacar sus propias conclusiones". "Nos empeñamos en decirle al espectador lo que tiene que pensar y me molesta mucho", agrega.