Moscú intenta frenar el avance del coronavirus

EFE
-

El país comienza un periodo de 'vacaciones' de once días con los servicios no esenciales cerrados para evitar que los contagios continúen aumentando

Moscú intenta frenar el avance del coronavirus - Foto: SERGEI ILNITSKY

Los moscovitas iniciaron hoy once días de vacaciones decretadas por la Alcaldía, junto al cierre de los servicios no esenciales, para tratar de frenar el avance del coronavirus en la capital rusa, donde los casos superaron este jueves los 8.400 y los fallecimientos se acercan a los cien diarios.

"No sé si esta medida va a ayudar a disminuir los contagios, pero siempre se agradece días libres adicionales, porque así puedo pasear con mi hija", dijo Natalia, una empleada pública, en la Plaza Roja. "Lo único malo es que no se puede ir de tiendas", añadió.

 

La capital reduce su ritmo  

La capital no se ha paralizado durante el primer día no laborable y del cierre de los comercios no esenciales, pero ha reducido su ritmo frenético habitual de una ciudad de 12 millones de habitantes.

Al contrario de lo que ocurrió el año pasado durante más e dos meses los moscovitas no están confinados en esta ocasión y los ciudadanos pueden pasear o ir a museos y utilizar el transporte.

En el metro de la capital se observa un número menor de pasajeros, cuando en un día laborable no se pueden encontrar asientos libres. También el tráfico se redujo algo en las principales arterias.

En el centro estaba abierta únicamente una oficina postal y los restaurantes y las cafeterías que sirven comida para llevar o a domicilio.

También los teatros y los museos pueden seguir recibiendo visitantes, pero solo si llevan un código QR porque están vacunados o se han recuperado de la enfermedad hace no menos de seis meses, y únicamente pueden acoger la mitad de su aforo habitual.

 

Se echan las persianas con pérdidas  

El resto de tiendas están cerradas, incluso en los centros comerciales. Solo las farmacias y las tiendas de alimentación y de otros productos esenciales pueden abrir sus puertas al público.

Los centros médicos brindan únicamente atención sanitaria programada y de emergencia.

Todas las empresas, con excepción de los de servicio público o de ciclo continuado, han dejado echado el cierre, así como los cines, locales de ocio, gimnasios y guarderías.

Según el centro analítico de Moscú, los comercios no alimentarios con reparto a domicilio verán sus ingresos mermados en un 30 % y las empresas cerradas totalmente perderán más del 60 % durante los 11 días no laborables.

Sin embargo, el alcalde de Moscú, Serguéi Sobianin, no ha visto alternativa a las vacaciones retribuidas y el cierre de los servicios no esenciales

En la última jornada, la capital notificó 8.440 nuevos casos de coronavirus y 95 muertes por la enfermedad infecciosa, cifras que, sin ser récords, no se han visto desde finales de junio y julio, respectivamente.

El número de casos se ha cuadruplicado en las últimas semanas con unos 42.000 infecciones a la semana de media y la cifra de hospitalizaciones se ha triplicado hasta entre 1.200 y 1.500 al día.

Se trata de una tendencia que aún empeorará en los próximos días, según advirtió el alcalde, Serguéi Sobianin.

 

Escasa vacunación en los mayores 

Sin embargo, las autoridades municipales no han logrado evitar esta nueva ola, pese a haber vacunado con la pauta completa a 4,9 millones de moscovitas, de una población total de 12 millones.

El problema es el laxo cumplimiento -y control- de las medidas sanitarias, con muchos residentes prescindiendo o llevando la mascarilla por debajo de la nariz en el transporte público, y la baja tasa de vacunación entre los mayores de 60 años.

De los 3 millones de moscovitas en este segmento de edad, solo 1,14 millones se han vacunado.

Como resultado el 60 % de los pacientes hospitalizados por la COUD-19 pertenecen a esta parte de la población.

Entre los que fallecieron de la enfermedad contagiosa, el 86 % eran mayores de 60 años y por lo general no estaban vacunados.

 

Próximo paso, vacaciones para toda Rusia 

Moscú impone estas medidas dos días antes de que entren en vigor las vacaciones obligatorias en todo el país decretadas por el presidente ruso, Vladímir Putin, para frenar el coronavirus.

Rusia registró hoy 40.096 contagios y 1.519 muertes de covid-19, nuevos máximos diarios desde el comienzo de la pandemia.

Si bien la mayoría de las 85 regiones rusas han decidido implantar las vacaciones retribuidas ordenadas por Putin a partir del sábado, junto a la capital entraron hoy en vigor 11 días no laborales y otras restricciones en la región de Moscú, el enclave báltico de Kaliningrado, Adigueya, Jakasia, Smolensk y Rostov.

Hace unos días se adelantaron además el territorio de Perm, Voronezh, Nizhny Novogorod, Novogorod, Samara y Kursk, además de Saratov y Osetia del Norte