"Me gustaría que el presupuesto de mi equipo fuera lo que cobra Mirotic». La frase pronunciada por Porfirio Fisac en una rueda de prensa antes de medirse al Fútbol Club Barcelona, al que además consiguió derrotar, ilustra la magnitud de la gesta que está firmando con el Casademont Zaragoza, al que tiene tercero en la clasificación –a dos triunfos del líder, el Real Madrid– tras la primera vuelta.

Una mitad del campeonato al que ha llegado radiante tras sellar su clasificación para la próxima Copa del Rey. Ese éxito se añade al puesto de semifinalista de liga logrado la pasada temporada tras eliminar en los cuartos de final al Kirolbet Baskonia, que probó la medicina del entrenador segoviano. Fisac se ha convertido en uno de los entrenadores de moda del baloncesto español de la mano de una sobresaliente capacidad de dirección y una ambición que no conoce techo.

Pero su triunfo en Zaragoza no parece fruto de la casualidad ni flor de un día. Antes de que se le rifaran numerosos equipos de la ACB, tal y como ocurrió este pasado verano, dejó su sello en el baloncesto humilde. La EBA y la LEB fueron su escuela y donde comenzó a construir su leyenda. En 2006 ascendió al conjunto guipuzcoano del Bruesa a la máxima categoría, donde además tuvo la oportunidad de estrenarse la temporada siguiente.

Desde entonces su carrera se ha disparado. En su currículum figuran los banquillos de Valladolid, Fuenlabrada, Palencia, Guipúzcoa, la selección de Senegal y Zaragoza, donde el pasado verano no dudaron en renovarlo por dos temporadas ante las ofertas que le llegaban de otros equipos. «Creo que me debo a esa gente por lo que hemos hecho este año. Vamos a jugar Champions League, una competición interesante, con repercursiones económicas que para el club pueden ser interesantes, y hay una serie de jugadores jóvenes por los que es el momento de apostar», comentó tras estampar su rúbrica.

La decisión se ha revelado un absoluto acierto porque el equipo zaragozano se ha colado como la primera alternativa a los dos grandes. De hecho compartió el liderato hace tres semanas con el Madrid y el Barça, a los que además ha sido capaz de derrotar en su cancha en esta primera mitad del campeonato.

Las dos victorias logradas entre semana en Champions League le han servido para olvidar los dos tropiezos sufridos a su vez en la Liga Endesa, aunque este técnico natural de Fuenterrebollo ha advertido que «si te confundes acerca de cómo has llegado hasta donde estás, estaremos equivocándonos y esto nos llevará a la derrota».

La ambición, la ilusión y el margen de mejora que considera que atesora su plantilla guían una labor que también ha obtenido el reconocimiento de su tierra. El próximo 7 de febrero la Asociación Segoviana de la Prensa Deportiva le entregará una de sus distinciones durante la gala que tendrá lugar en el teatro Juan Bravo. El deporte segoviano tendrá la oportunidad de aplaudir a un hombre que también sobresale por su ideario. «Ahora tengo la oportunidad de estar entrenando en la elite pero disfruto del deporte, no de la categoría», ha señalado en ‘El País’.