"Tiene que llegar el cobro de una tasa de turismo"

A.M.
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Ingeniero Agrícola y MBA en Gestión de Proyectos, a su responsabilidad como concejal de Obras, Servicios e Infraestructuras ha sumado Turismo. En el plano político es secretario de Organización de la ejecutiva local del PSOE de Segovia.

El concejal de Turismo y Obras, Miguel Merino - Foto: Rosa Blanco

El concejal de Turismo, Miguel Merino Sánchez (Segovia, 1981), también responsable de Obras y Servicios, sostiene en esta entrevista que el cobro de una tasa turística «tiene que llegar, creo que el Gobierno regional debe escuchar las voces que le piden esto a nivel autonómico porque, al final, eso repercute en el mantenimiento de la ciudad que sufre un desgaste». Este ingeniero agrícola, graduado en Ingeniería Agronómica especializado en la gestión del Dominio Público Hidráulico y de proyectos de I+D+I, asegura que echa de menos unidad en el sector de la hostelería.   

A poco de llegar a la concejalía de Turismo se produce un puente con una afluencia de visitas importantes y parte de la oposición le dice que falsea el número de personas y que tiene la ciudad patas arriba debido a las obras, ¿cómo recibe esto?

Las estadísticas son las que están, hay un equipo profesional muy bueno que hace el recuento y como prueba, además, lo confirma el sector hostelero por cómo ha trabajado. Compaginando dos áreas como Obras y Turismo es fácil que le acusen a uno de tener la ciudad levantada, lo advertimos a finales de 2020, que iba a ser un año de mucha inversión y obras, por ello hemos pedido a los vecinos paciencia y comprensión. Este segundo semestre está siendo complicado, pero implica que habrá mejoras en la ciudad. Hay en torno a 27 obras abiertas de cierta importancia y se nos pueden juntar hasta 30 en el mismo momento, está siendo realmente estresante, también para quienes trabajan en la concejalía que son el mismo número de personas pero se ha triplicado por tres la inversión.

Miguel Merino, concejal de Turismo y ObrasMiguel Merino, concejal de Turismo y Obras - Foto: Rosa BlancoEl objetivo de la utilización de los remanentes de tesorería fue inyectar dinero para relanzar la actividad económica tras la crisis de la pandemia, algo habremos aportado desde el primer trimestre que de manera inmediata hubo falta de disponibilidad de andamios o grúas elevadoras. Desde el Ayuntamiento apostamos por tratar de mejorar la ciudad una vez que el Congreso de los Diputados plantea que el año que vienen desaparezcan también las reglas fiscales. Está claro que la inversión llegará a la ciudad y al ciudadano, pero en las obras suelen surgir problemas y bronca.  

También se originó cierta crisis, incluso Cs se preocupó porque no le había recaído la responsabilidad a otro miembro del equipo de gobierno, ¿en qué situación se encuentra este supuesto problema?

Si no me pongo de acuerdo todos los días con quien convivo y duermo es difícil decir que comparto la opinión de todos los compañeros de partido, cuando uno trabaja con un programa, lo que sí es importante es tratar de sumar, construir y normalizar la discrepancia.  La división es un handicap, la discrepancia y el debate no, sobre todo si se hace con lealtad. Todo el equipo  trabajamos a una y eso muestra la madurez del grupo socialista, como políticos y como equipo. 

Hay ambiente electoral porque nos llegan opiniones de ciudadanos que les han preguntado en una encuesta no solo por valoración de partidos sino por si cambiarían el voto en caso de que quien opte a la Alcaldía sea diferente, ¿el PSOE municipal tiene pensado plantear algún cambio?

Lo que tenemos en la agenda es ejecutar inversiones para la ciudad y salir de la manera más digna de toda la situación que hemos vivido, no solo en los sectores tradicionales como el turismo y la construcción, también reivindicamos el derecho que tiene la ciudad a optar a los fondos europeos para el Plan de Sostenibilidad Turística, que es muy importante para cambiar criterios en cuanto a nuestro desarrollo turístico, y también hay una estrategia muy bien coordinada y organizada desde la Alcaldía y las Concejalías de Desarrollo Económico y Urbanismo, para tratar de diversificar estas fuentes de desarrollo de ciudad.

¿El cambio podría ser que no repita la alcaldesa, Clara Luquero, como candidata?

Año y medio en política da todavía para que pasen muchas cosas, sigo viendo fuerte a la alcaldesa, con ideas y proyectos para la ciudad de manera constante y muy firmes. Ya lo dirá el tiempo político, ahora nos toca trabajar, ejecutar las inversiones y mejorar la ciudad, sacarla de la crisis de la manera más digna posible y  esforzarnos por seguir reconvirtiendo determinados sectores. Tanto Prado del Hoyo como el CIDE, que estoy convencido de que muy pronto lo veremos abierto y ocupado, van a ser dos de las iniciativas más importantes de los últimos 20 años que van a trazar unas líneas de avance de la ciudad algo diferentes. 

¿Hay una solución para que no se desborde Segovia en puentes o festivos y pueda convivir el turismo con los vecinos?, ¿se aplicaría una la tasa turística?

Las medidas van a tener que llegar, nos gusten o no, desde determinadas actuaciones en cuanto a la delimitación de la zona de bajas emisiones, pasando por la creación de nuevas infraestructuras, como un aparcamiento disuasorio, pasando por plantear atractivos al turismo que no sea el paquete Acueducto-Catedral-Alcázar. Respecto a la tasa turística, la alcaldesa ha trasladado a la Junta el interés municipal que tenemos respecto a su aplicación. Incluso a nivel internacional está perfectamente asumido. El Ayuntamiento de Segovia se ha mostrado a favor desde hace bastante tiempo y creo que el Gobierno regional debe escuchar las voces que le piden esto a nivel autonómico porque, al final,  repercute en el mantenimiento de la ciudad que está sufriendo un desgaste por una actividad muy concreta y [la carga] repercute poco en el consumidor final que hace uso de estas infraestructuras. 

¿Por dónde pasa el plan de sostenibilidad turística?

Primero por la generación de una importante concienciación. Entre los cuatro ejes, se encuentra el de la transición verde, donde se trata de recuperar todo el patrimonio natural que hay en el término, incluso sacándolo del cinturón verde, como la parte que nos toca de la Sierra de Guadarrama donde Revenga es una puerta de entrada y el Acueducto un eje transversal;  hacer un programa divulgativo sobre el patrimonio histórico de la sierra, una cuestión interesante que ha aportado la Concejalía de Patrimonio, para sumar ciertos atractivos alternativos, unidos también a caminos y turismo activo entre los barrios incorporados, que cuentan con industria turística. 

Otro de los puntos claves es la gestión de recursos, el hecho de saber cuánto gasta la ciudad mediante herramientas de inteligencia artificial nos puede ayudar a predecir y prever, no solo usos de recursos y cómo gestionarlos, sino también la movilidad de los visitantes. Otro punto de sostenibilidad es la conservación mantenimiento y estudio del Acueducto, es un monumento abierto 24 horas al día, gratuito, no como el Alcázar o la Catedral, por eso planteamos el centro del agua,  como revulsivo patrimonial y turístico con conceptos ambientales. 

¿Cuáles serán las funciones de la Oficina Inteligente de Turismo?

El objetivo es saber en qué situación está la ciudad en cuanto al turismo y cada uno de sus centros de atracción, tanto públicos como privados. Nos gustaría tener en tiempo real cómo van las entradas del Alcázar, si las entradas de la Catedral están agotadas y al visitante interesado en turismo religioso le podamos plantear una alternativa que dé contenido a su viaje; queremos saber cómo van las reservas de los hoteles adscritos a esa plataforma, si hay que apoyarles, cuándo se realizan, de dónde vienen, cuántas pernoctaciones hay. Lo mismo con los restaurantes. Todo ello enlazado con los recursos principales de sostenibilidad, como que el agua tenga un uso racional y que lo sepamos prever, porque ayuda a tomar decisiones.

 ¿Qué previsiones tienen en cuanto a promoción y a la idea de que los visitantes puedan pernoctar ofreciéndo alternativas en la provincia, en colaboración con la Diputación?, ¿será esto posible?

Siempre nos hemos mostrado partidarios de ayudar cuando alguna institución ha querido alcanzar algún acuerdo con el Ayuntamiento, prueba de ello es que la Oficina de Información Turística de la Junta de Castilla y León está en las dependencias municipales del Centro de Recepción de Visitantes. La directora general Estrella Torrecilla se interesó por unir fuerzas y así lo hemos hecho, tras una labor realizada por mi antecesora [Gina Aguiar]. Para fomentar las pernoctaciones es muy importante la colaboración entre administraciones porque se pueden preparar paquetes turísticos compaginando la ciudad con la provincia, como por ejemplo una ruta del románico o espacios naturales, hay mucho donde trabajar. Llevamos tiempo ya preparando la primavera y el verano del año que viene.

Es muy importante que pongamos ya la mirada a un turismo internacional, sobre todo el asiático, porque, si bien en el mes de agosto fue en torno al 11% del total, en septiembre alcanzó el 22%, lejos del 40% de las cifras prepandemia. Como no llega de un día para otro hay que comenzar a trabajar ya, incluso para que venga de otra manera, que los grupos tengan otras alternativas más allá de desembarcar, dar una vuelta y marcharse.  A pesar de que venimos de una época difícil, la ocupación hotelera está siendo bastante digna aunque con precios a los que solo pueden acceder determinados perfiles, lo que hace que la pernoctación pueda ser menos atractiva, incluso hay restaurantes que nos han comentado que, cuando hay eventos,  personas que vienen por la mañana, se van a dormir a Madrid, y vuelven al día siguiente, entonces hay que hacer una reflexión de por qué no se quedan a dormir y esto no es por falta de oportunidades o de acciones que no despierten interés. 

Si hay un sector que depende del turismo es el de la hostelería, ¿cómo se comporta con su departamento? 

Durante este tiempo he trabajado también con ellos por la ocupación de dominio municipal por el tema de terrazas, ha sido una temporada dura, hay que entenderlo porque los nervios están a flor de piel cuando se está pasando mal, aún así, hemos sido capaces de llegar a acuerdos, es verdad que lo que echo de menos en este sector es unidad porque cuando te sientas con un interlocutor a establecer una serie de pautas uno trata de adoptar medidas que den confianza, tranquilidad, que unan a determinados sectores a trabajar juntos, antes de llegar al enfrentamiento, y eso durante todo este tiempo no lo he percibido de una manera clara. Si queremos cambiar determinados conceptos de calidad turística o promoción de la ciudad también pasa porque ellos apoyen todas las iniciativas. Tengo que decir que tanto FES como Hotuse han respaldado el Plan de Sostenibilidad Turística, eso sí me parece positivo, pero espero de ellos que se unan como sector profesional y traten de hacer interesante a la ciudad para otro tipo de desarrollos, porque tienen capacidad para ello. Cuando viene una industria o una gran empresa a asentarse en una ciudad espera que, además de las infraestructuras públicas, haya unos servicios de calidad y a precios razonables, aquí también hay un recorrido que realizar en el futuro... 

¿Cómo se encuentran los segmentos de las convenciones y de los rodajes cinematográficos?, ¿qué previsiones hay para 2022?

La Film Office funciona casi de manera continua, desde que llevo en la concejalía ha habido tres o cuatro rodajes y se está trabajando en otros, entre finales de año y comienzos del próximo, además en diferentes localizaciones porque, hasta ahora, muchas se han centrado en La Cárcel_Centro de Creación. En cuanto a Segovia Convention Bureau, el turismo de congresos está comenzando a reactivarse, desde finales de septiembre, y nuestro trabajo va orientado hacia el año que viene. Hay iniciativas que pueden estar interesadas en venir a Segovia, pero vamos a ir zanjándolo antes de decir nada. Está funcionando muy bien el turismo idiomático, tenemos un convenio con el campus 'María Zambrano' de la UVa, para formar a formadores, lo que implica que 75 personas acuden a la ciudad, a la semana, conociéndola, aprendiendo, un turismo con cierto nivel, en colaboración también con la consultora Mester, el Obispado y la Junta. Confiamos en que siga funcionando en el tiempo porque hay que buscar este turismo que está fuera de temporadas altas, para dar continuidad a esta actividad económica.