La Subdelegación del Gobierno en Segovia ha ofrecido más detalles del crimen que se registró en Cuéllar el pasado 16 de junio. El fallecido, un hombre de 37 años, fue apuñalado en la mandíbula y en el abdomen. Por este crimen está detenido desde el pasado día 21 otro hombre, también vecino de Cuéllar, al que la Guardia Civil considera el autor de un homicidio doloso.

En el marco de esta operación, bautizada como 'Collaram', el equipo de Policía Judicial del Instituto Armado en Segovia ha llevado a cabo inspecciones oculares y ha registrado el domicilio del presunto homicida. Una actuación, esta última, en la que ha contado con el apoyo de un perro especializado en la localización de restos biológicos.

"Existen pocas unidades caninas de esta especialidad. Su labor consiste en una minuciosa búsqueda en zonas concretas como viviendas o vehículos en los que se sospeche puedan existir restos orgánicos humanos, que son los que intentará localizar el perro. El trabajo que realizan constituye un eslabón clave que podría reconocerse como prueba en un proceso judicial", ha destacado en una nota de prensa la Subdelegación del Gobierno.

En torno a las once de la noche del 16 de junio un hombre de 37 años se presentó en el centro de salud de Cuéllar con heridas de arma blanca y fue trasladado al Hospital Clínico de Valladolid, donde falleció horas más tarde. En el transcurso de la investigación, la Guardia Civil descubrió que la víctima había sido trasladada al centro de salud por un familiar.