Las exportaciones del sector agroalimentario de Castilla y León alcanzaron los 2.400 millones de euros en 2020, lo que supuso el 18 por ciento de las ventas de la Comunidad autónoma al exterior. De esta forma, las exportaciones agroalimentarias registraron un crecimiento del 33 por ciento durante el último lustro, con el valor más alto en el ejercicio de 2020, y mantienen una tendencia al alza, según los datos registrados en el primer trimestre de este año, con un crecimiento del nueve por ciento, que supone el 21 por ciento de las exportaciones totales en ese periodo, publicados por la Dirección General de Estadística de la Consejería de Economía y Hacienda.
El sector cárnico experimentó una evolución «muy favorable» en los últimos años, con ventas que rondaron los 600 millones de euros en 2020, un 45 por ciento más que en 2015, con una cuota del 25 por ciento del total de las exportaciones del sector agroalimentario.
La mitad de la carne exportada desde Castilla y León correspondió al sector porcino, mientras que el bovino representó un 20 por ciento de las ventas y el ovino y el caprino, un siete por ciento. Las ventas de carne ovina registraron el mayor crecimiento en los últimos cinco años, con un incremento del 115 por ciento, que sitúa a Castilla y León entre las dos principales comunidades exportadoras de carne ovina de España. Así, las exportaciones de carne ovina han crecido un 115% en el periodo 2016-2020.
En este apartado, el 27 por ciento de la carne de ovino producida en Castilla y León fue exportada a Francia; el 24 por ciento, a Israel; el 13,5 por ciento, a Italia; el 7 por ciento, a lo Emiratos Árabes, y el 6,9 por ciento, a Catar, según precisaron fuentes de la Administración autonómica.
Visita a Zamora
El consejero de Economía y Hacienda, Carlos Fernández Carriedo, visitó ayer en Arcenillas (Zamora) las instalaciones de la empresa Moralejo Selección, firma productora de carne de ovino y con una larga trayectoria en el sector. Moralejo Selección integra todas las fases del proceso productivo, es decir, producción, procesos de compra y venta del animal, transformación del producto, tecnología, sistemas de aprovechamiento de todos los cuartos del cordero, sistemas de matanza, procesos previos a la matanza, estándares de calidad, bienestar del animal e I+D+i y mantiene acuerdos con ganaderos y cooperativas de Castilla y León, Extremadura, Andalucía y Castilla-La Mancha.
Fernández Carriedo, como recoge Ical, se reunió con los responsables de la empresa zamorana, que alcanzó el año pasado un volumen de negocio superior a 62 millones de euros.