La bronca llegó al pleno en la segunda pregunta de la sesión de control al Ejecutivo cuando el presidente de las Cortes, Luis Fuentes, intervino ante las acusaciones de la socialista Patricia Gómez de que la vicepresidenta segunda de las Cortes, Ana Sánchez, fue expulsada «sin motivo alguno» de una sesión para equilibrar las fuerzas y que los socios PP y Ciudadanos no perdieran las votaciones tras la fallida moción de censura del PSOE.

«Es absolutamente mentira, absolutamente mentira», interrumpió el presidente de las Cortes, que tomó la palabra para desmentir lo afirmado por la procuradora socialista que una pregunta a la Junta sobre si consideraba que se estaban cumpliendo las obligaciones democráticas en la Comunidad, algo que a su juicio quedó confirmado con la intervención de Luis Fuentes.

El presidente pidió en tres ocasiones a la parlamentaria que retirara sus palabras, lo que fue rechazado por la socialista. «No lo voy a retirar», le respondió, por lo que Fuentes le advirtió de que la llamaría al orden y que de acuerdo al reglamento tenía la potestad de retirar lo que fuera «mentira». La procuradora lo invitó a hacerlo y le preguntó si también la iba a «amordazar» para que no hiciera su labor de control al Gobierno.

Además, Patricia Gómez indicó que lo hecho por Luis Fuentes confirmaba que no se respetaban los principios democráticos en las Cortes, como había asegurado previamente, cuando a su juicio, tras la moción de censura dejaron claras sus intenciones. Entre tanto, el portavoz socialista, Luis Tudanca, advirtió al presidente de las Cortes que lo iban a acabar «inhabilitando», según informa Ical.

Asimismo, la socialista sostuvo que a la vista de los últimos acontecimientos se debe acudir al parlamento con el Estatuto, el Reglamento y el Código Penal, ya que a su juicio en «esta serie de capítulos bochornosos», el pasado 28 de octubre, por una decisión «arbitraria» e «injusta» y en contra del dictamen de los letrados se inadmitió una proposición no de ley del PSOE sobre sanidad. Ante esto, les invitó a leerse el artículo 405 del Código Penal.

En su respuesta, el vicepresidente Francisco Igea acusó al PSOE de ser una «broma», un «esperpento» y «un chiste de sí mismo», tras defender que la Junta cumple la legalidad. «Vienen aquí todos los días a mentir a la población, a decir que es posible lo que es imposible», afirmó Igea, quien añadió que le decepciona personalmente ver en que se ha convertido un partido «sensato», que defendía la socialdemocracia y la separación de poderes. En su opinión, ahora se comportan como lo hacen en un «estadio brasileño», aplaudiendo y dando gritos cuando ganan una votación, como si hubiera marcado Iniesta.

Por ello, Igea consideró que eL PSOE se superó en una especie de control a la Mesa de las Cortes.