Aurelio Martín

UNA COL

Aurelio Martín

Periodista


Talento segoviano

23/01/2022

En momentos de ruido incesante e incertidumbres, con discusiones políticas sin sentido y luchas para mantenerse  en la política como medio de vida, es ejemplar la actividad dearrollada en la crisis del volcán de Cumbre Vieja, en la isla de La Palma, en Canarias,  por varios geólogos y profesionales segovianos con jornadas en vela para aportar soluciones a la crisis que se estaba viviendo producto de este fenómeno natural que, siendo urbano, afectando a núcleos importantes, no ha registrado víctimas, salvo una por circustancia accidental. 
Los científicos del Instituto geológico y Minero de España (IGME) Andrés Díez y Juana Vegas, segovianos; y Carlos Lorenzo, con antecedentes familiares en Maderuelo, donde reside cuando se lo permite el trabajo, han sido un ejemplo del bien hacer,  para actuar en unos momentos complejos, como lo han hecho otros colectivos y represententes de las Fuerzas yCuerpos de Seguridad o de la Unidad Militar de Emergencias, por cierto buen número también procedente de esta provincia.  
 Llama la atención cómo relatan la experiencia vivida, desde la humildad, este profesionales, a quien hay que sumar el ingeniero geólogo GonzaloLozano, que elaboraba la cartografía en su vivienda de Valdeprados, con los datos que le llegaban de los vuelos de los drones y los satélites. Con dos sentimientos bien encontrados, la satisfacción del deber cumplido y de haber sido testigos de un fenómeno que no volverán a ver, y el dolor que les ha causado ver a los palmeros cómo han perdido sus casas y propiedades y aún les quedaban fuerzas para agradecerles su estancia en la isla, a veces, para darles respuesta a muchas dudas, de sus palabras se desprende un amor por la profesión y una entrega a los demás digna de admiración. 
Además, por fortuna, no son talentos que han emigrado, sino que vienen demostrando un compromiso con su tierra donde organizan no pocas actividades formativas y divulgativas en torno a al patrimonio geológico y los interrogantes que se pueden desvelar desde esta ciencia a los orígenes del lugar donde vivimos y que se desconocen, aunque formen parte del entorno habitual.   
Además en este éxito de la gestión de la emergencia, que no se valora en su justa medida porque la población está preocupada de los daños, desde el primer momento, cerraron filas todos los partidos políticos, lo que no ha ocurrido en otras crisis, y se ha dado valor a la opinión de los científicos. Si decían que había gases y era necesario evacuar,  tomaban las decisiones aunque fueran  impopulares, triunfando la fe en la ciencia.   
Ha ganado la sociedad civil frente a la mediocridad que muchas veces lucen algunos representantes públicos, y más en épocas electorales, donde soncapaces de que se prime la catástrofe con el fin de alcanzar el poder  y, si hay que llevar a los tribunales el reparto de los fondos europeos, cuando de ellos depende el despegue del país, dejando que los jueces resuelvan lo que debe de hacerlo la política, pues se hace, aunque se de mala imagen y lo haya autortizado la Comisión Europea.