Semana Santa 2020: más silencio que nunca

SPC
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El recogimiento, sigilo y misterio que rodea las calles de la pasión castellana y leonesa serán más atronadores este año, el primero que suspende las procesiones desde la Guerra Civil

Semana Santa 2020: más silencio que nunca

La Semana Santa de Castilla y León se escribe desde hace décadas, en algunos casos siglos atrás, con letras de oro. Pero también con los cinceles de los maestros Juan de Juni, Gregorio Fernández, Alonso Berruguete o Francisco Díez de Tudanca, aquellos imagineros de la escuela castellana que esculpieron yacentes, crucificados y vírgenes que hoy en día deleitan a oriundos y visitantes durante los días de pasión. Pero el recogimiento, sigilo y misterio que rodea a las procesiones y calles de esta tierra serán más atronadores si cabe este año, el primero en el que se suspenden las celebraciones desde aquellos desafortunados años de la Guerra Civil, evidentemente dejando a un lado motivos meteorológicos. Solo aquellos que vivieron la contienda pueden hablar de haber visto una Semana Santa sin su plato principal. Y eso solo ocurrirá con el único objetivo de impedir la propagación del covid-19.

Bien es cierto, y así lo asegura el director del Centro de Religiosidad Popular de la Universidad de Valladolid, el antropólogo José Luis Alonso Ponga, que esta celebración se puede vivir en sus domicilios particulares, priorizando más si cabe el concepto religioso de la celebración. “La perspectiva que tenemos todos es de una Semana Santa turística. Que nadie se ofenda, pero hemos pasado del culto a las imágenes, a las imágenes del culto. Hubo un tiempo en que la gente practicaba culto y adoraba a las imágenes porque tenían un sentido para cada uno de ellos”, señaló Alonso Ponga a Ical, quien sostiene que cuando llegó la “patrimonialización de estas imágenes, éstas se han situado por encima de todos, principalmente cuando se trata de primeras firmas, como Juni o Gregorio Fernández”.

El profesor señala que “antaño, en los siglos XVII y XVIII, no había problemas en suspender o recortar procesiones, pero ahora por la cuestión del turismo se analiza si los pasos salen o no a la calle”. “En muchas ocasiones se retrasa porque hay lluvia, y si vemos un claro al fondo, esperamos y salimos. Antes no”, declara.

Semana Santa 2020: más silencio que nunca
Semana Santa 2020: más silencio que nunca

Alonso Ponga, quien admite que este año las calles de las ciudades y pueblos de Castilla y León “estarán extrañas” durante estos días, señala que fenómenos de pandemia se han registrado muchos a lo largo de la Historia. “Hoy sabemos que no debemos agolparnos y mezclarnos para no contagiarnos todos, pero hasta bien entrado el S.XX “había gente que creía que Cristo y la Virgen les libraba de la peste y les rezaban y hacían penitencia”.

El antropólogo matiza que aunque se hable de la Semana Santa “como si fuese un todo en uno”, en la Comunidad cada lugar la suya, “muy diferentes y diversas”. “Los ritos son los mismos, que emanan del ritual romano, de la Iglesia Católica y el Vía Crucis. Pero cada pueblo acabó celebrando lo que no es estricto. El cura sí, pero luego cada uno lo organizó a su manera”, comenta.

En este sentido, destaca que la riqueza se mide en función “de los sujetos que la han conformado, según sus intereses, porque para ellos se cumple un punto de vista ritual, que es el identitario”. “Antes siempre se utilizaba la religión para reforzar el grupo o el pueblo. Hoy se refuerza el turismo, la gastronomía o la hostelería”, reprocha.

Semana Santa 2020: más silencio que nunca
Semana Santa 2020: más silencio que nunca

La muerte de Franco cambio el modelo

Alonso ponga considera que la “gran eclosión” de la Semana Santa para pasar “del patrimonio religioso cultural al peso del turismo en estos días llegó a partir de la muerte de Franco”. “La gente tiene ganas de tomar la calle, con las fiestas populares y la religiosidad; y es cuando las cofradías dan el estirón y se empiezan a inventarse semanas santas por ciudades y villas, algunas de las cuales las tuvieron en siglos anteriores pero las perdieron”. 

Entre las más auténticas en este sentido destaca la de Medina de Rioseco (Valladolid), una de las ocho que tiene reconocimiento de Interés Turístico Internacional, “y que nunca desapareció y sigue viva como se creó hace siglos, donde los niños aún juegan a sacar los pasos y a Semana Santa”. “Para mi es la más interesante. Procede de los gremios del S.XVI y llega hasta nuestros días. Es la más diferente y es un referente a nivel urbano. La Semana Santa de Rioseco es la espina dorsal de la población, algo que no ocurre en otras”, ensalza el antropólogo, quien añade que el paradigma de “lo auténtico” en el medio rural de la Comunidad es Bercianos de Aliste (Zamora). 

Semana Santa 2020: más silencio que nunca
Semana Santa 2020: más silencio que nunca

Debido a que este año la celebración se vivirá de otra manera, José Luis Alonso Ponga vaticina que algunos de los elementos que se están fomentando en este 2020 “se adhieran a las tradiciones”. Se refiere principalmente al bonito hecho de que este año la gente “elaborará poesías sobre el fenómeno, donde hablarán del silencio atronador de las calles vacías, de la construcción cultural de la no Semana Santa”. “Se están haciendo bellísimas elaboraciones poéticas y culturales de las que participa el público. Veremos en unos años si alguno de estos elementos se suma”, concluye.