"Después de los apuros, tenemos recursos"

A.M.
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Presidente de la Diputación, entre 1987 y 1991, se hizo cargo de la Fundación Caja Segovia en abril de 2014, siendo reelegido en 2018, para cuatro años más. Abogado, ha ocupado la presidencia del PSOE y ha sido funcionario de la Administración

Javier Reguera García - Foto: Rosa Blanco

Reelegido para cuatro años más como presidente de la Fundación Caja Segovia, en 2018,  cuya escritura de constitución fue firmada el 25 de marzo de 2014,  para continuar con la labor social que vino desarrollando la entidad de ahorro,  Javier Reguera García (Segovia, 1948), asegura en esta entrevista que, «después de muchos apuros que hemos pasado, el futuro está despejado»,  para que la institución desarrolle su actividad con normalidad. 

¿En qué situación se encuentra actualmente la Fundación, es viable? 

Después de muchos apuros que hemos pasado, en lo que se refiere a la viabilidad, el futuro está despejado, se vienen generando recursos suficientes para que continúe y desarrolle su actividad con normalidad, con apoyo de otras entidades, como el que recibimos de Bankia.  Fluctuando de un año a otro, porque hemos tenido mayores gastos por el acondicionamiento del Torreón, en este ejercicio, el futuro está asegurado.  Contamos con unos 600.000 euros de ingresos y, como es lógico, procuramos ajustar los gastos a esas cantidad. En un 50% provienen de rentas propias, los arrendamientos de inmuebles; ingresos por actividades, algunos ingresos financieros y las subvenciones. 

¿Cuántos inmuebles les quedan vacíos y qué posibilidades ven de darles salida?

El patrimonio inmobiliario son como 41 edificios porque algunos, como el torreón, son varios inmuebles agrupados registralmente, de ellos 25 los están utilizando los ayuntamientos y el resto la Fundación,  buen número de ellos están desocupados pendientes de venta o alquiler. Los dos que más nos preocupan porque hay que dar una finalidad y una rentabilidad son los locales de Mahonías y los de la Plaza de Santa Eulalia que venía utilizando la UVa, que ha trasladado las aulas al campus 'María Zambrano'.  Este año, afortunadamente, se ha podido dar una buena finalidad al Palacio de Mansilla, donde IE University trabaja para obtener la licencia y comenzar la rehabilitación. 

Alquilaron el Palacio de Mansilla con opción a compra,  ¿ha sido una salida que ha aliviado a la Fundación?

Ha sido una operación buena desde todos los puntos de vista, para la ciudad porque supone comprobar hasta dónde llega el compromiso de IE con Segovia, ampliando sus instalaciones universitarias, y también para la  Fundación porque tenía unos gastos de mantenimiento importantes y era un inmueble de muy difícil salida en el mercado. Alcanzamos un acuerdo mediante un arrendamiento con opción de compra y ha sido la mejor solución, ya está perfeccionado el contrato y me consta que la universidad hace lo posible para comenzar cuanto antes las obras.

En Mahonías realizaron algún tipo de obra...

Junto con la comunidad de propietarios se han construido dos ascensores para dar accesibilidad a la planta sótano, donde están los locales de la  Fundación, junto a otros muchos privados, lo que ya está terminado, ahora intentamos dar salida en el mercado a esa propiedad, lo que no es fácil porque es una zona que se degradó mucho, en su momento.  

Trabajamos con las inmobiliarias también para ver qué posibilidades hay de colocación de los locales de Santa Eulalia, pero son difíciles de arrendar porque es una planta adaptada para actividad educativa, por lo que hay que buscarle un tipo de uso acorde con esas condiciones y a la superficie que tiene, 1.600 metros cuadrados, lo que hace difícil que se puede arrendar para una sola actividad. Los tiempos son difíciles sobre todo para el arrendamiento de locales de negocio, incluso para los que ya estaban arrendados hay constantes peticiones para que se condonen o disminuyan las rentas hasta que pase la pandemia, es un momento complicado que intentamos salvar como podemos.

Se refiere a los alquilados como comercios, ¿qué actitud han mantenido ante estas peticiones?

Con algunos se ha podido llegar a algún acuerdo, hemos sido flexibles en la medida en que estaba en vigor el estado de alarma, porque si a las empresas se les prohíbe el ejercicio de la actividad es natural que haya que poner algo por parte de la propiedad para procurar que el negocio pueda continuar, hemos sido flexibles en cuanto al cobro, y en algún caso, a la reducción de la renta.   

Bankia ha cerrado la urbana de Corpus, en la capital,  junto a los locales de la Fundación, ¿no tienen interés en poderlos unir para ampliar las actividades?

Están aparentemente unidos pero registralmente son independientes. Bankia lo dejó y no hemos tenido ningún contacto al respecto, objetivamente nos interesaría pero el coste de adquisición de estos locales será muy alto, ni siquiera hemos entrado en ello, seguro que no estará al alcance de la Fundación. 

¿Qué previsiones tiene sobre la utilización del Torreón de Lozoya?, ¿cuándo concluyen las obras?

Han sido obras de distinto tipo, adaptándose una parte para oficinas de la Fundación, lo primero que se terminó. La segunda parte de la obra ha sido el ascensor porque, de lo contrario, es imposible dar uso a la primera planta porque hay que garantizar la accesibilidad, que también está terminado. En tercer lugar ha habido que acondicionar todo el edificio para que pudiera ser viable la idea de instalar en la primera planta un museo en el que se ubique la parte de más calidad de los fondos artísticos con que contaba Caja Segovia. Para que eso fuera posible ha habido que modificar el sistema de protección de incendios, la instalación de seguridad del edificio, incluso hacer alguna reforma interior, aparte de la iluminación. Además se ha dado un repaso a todo el jardín, al patio del Torreón y a la cubierta, para evitar goteras. 

Todo esto ha supuesto una inversión fuerte para la economía de la ,  cerca de 400.000 euros, pero confío en que haya merecido la pena y, cuando esté el museo abierto,  se verá que se ha hecho una buena inversión. Queremos abrir antes de fin de año, no es el mejor momento, pero no lo vamos a mantener cerrado más tiempo. El museo se abrirá en combinación con un nuevo planteamiento de los usos, teniendo en cuenta que la torre se incluirá en la visita. No hay por qué esperar al número de visitas que teníamos tradicionalmente, hay que empezar a funcionar y ver cómo se van desarrollando la cosa.  

Las obras han llevado un considerable retraso...

Las obras en un edificio de esta naturaleza conllevan que las autorizaciones vayan más despacio porque no solo hace falta que se pronuncie el Ayuntamiento, sino que las tiene que revisar la Comisión Territorial de Patrimonio, la segunda causa es que son trabajos delicados que se han alargado en los tiempos, pero es verdad que, respecto a las previsiones iniciales, el retraso de la apertura ha sido de un año. 

¿Qué actividades desarrolla actualmente la Fundación?

Cuando se abra el museo se ampliarán las actividades en cuanto a visitas con colegios, facilitando que los fondos del museo puedan llegar al mayor número de personas. Ahora desarrollamos muchas de las que se benefician miles de segovianos, cada años,  aparte de las exposiciones en el torreón, tanto propias como en colaboración con otras entidades. Fundamentalmente se llevan a cabo en los centros del Corpus y en el del Cristo del Mercado, allí se ofrecen anualmente más de 50 cursos, talleres y otros tipos de actividades, en materia de salud, arte o nuevas tecnologías, entre otras, que tienen mucha aceptación, que comienzan este lunes, con una finalidad social importante. Ahora acaba de terminar el periodo de inscripción, puede que la COVID-19 incida porque hay ciertas reservas de personas a participar en grupos.    

Se estabilizó la relación de la  con Bankia, en cuyo origen participó la desaparecida Caja Segovia, incluso colaboran en becas, ahora se ha producido la fusión con CaixaBank, ¿qué esperan de este nuevo banco?.

Nuestra relación con Bankia es magnífica, después de unos años difíciles porque había algún contencioso pendiente, pero, desde que se llegó a un acuerdo en el asunto del Torreón, bueno para todos. Este año, tanto para proyectos sociales como medioambientales y actividades de la Fundación, Bankia nos ayuda con 150.000 euros, lo que se viene haciendo desde hace varios años, incluso aumentando la dotación anualmente.  ¿Qué esperamos de la fusión?, todo el mundo la alaba, aunque quedan varios meses de negociación y muchos flecos, es pronto aún para ver cómo repercutirá en la Fundación, pero son entidades que tienen un cierto poso social en la medida en que su origen parte de las antiguas cajas de ahorro, en el caso de Bankia, o de la  La Caixa. El hecho de que vaya a surgir un banco con mayor entidad económica y cierta sensibilidad hacia la responsabilidad social corporativa nos hace pensar que contará con la Caja Segovia en el mismo sentido con el que Bankia la está tratando, así como a otras que estaban en su origen. Creo que será bueno porque, previsiblemente, habrá más recursos y más posibilidades. Ahora bien, habrá que ver cuál es la política que tiene CaixaBank y la  La Caixa y en qué medida alterará las relaciones que se tenían con Bankia.  En principio no creo que la fusión tenga efecto negativo para la Fundación.  

¿Qué litigios mantienen vivos, una vez que se dictó sentencia sobre las prejubilaciones?

La Fundación recurrió la sentencia solamente respecto a dos de los imputados, los exdirectores generales que estuvieron al frente de Caja Segovia, en ese tiempo, Manuel Escribano y Miguel Ángel Sánchez Plaza. Estamos a la espera de que el Tribunal Supremo dicte la resolución correspondiente y nos atendremos a ella.  Luego hay otra actuación que se planteó, que lleva dos años en trámite que se está sustanciando en los tribunales de Segovia, que es la reclamación a la compañía aseguradora Caser y a los administradores anteriores [los miembros del consejo que acordó la hipoteca del torreón] del valor que tenía la superficie que la  cedió a Bankia para poner fin al contencioso, 1,5 millones de euros. Se trataba de dos plantas no completas del edificio central de Bankia [antes sede de Caja Segovia], en la Avenida del Acueducto.

La  Fundación fue criticada por haber alcanzado acuerdos con Bankia y no haber continuado con el procedimiento penal...

El acuerdo era muy bueno en sí mismo en la medida en que suponía la condonación de cinco millones de la deuda, no podíamos decir que no a una propuesta que significaba liberar la hipoteca del Torreón y el edificio histórico de forma definitiva. Cuando hicimos aquello ya anunciamos que íbamos a reclamar ese coste a los anteriores gestores, es lo que hemos hecho y tenemos que esperar a ver si por la compañía Caser o la responsabilidad de los administradores se puede compensar... El acuerdo con Bankia fue muy cuestionado, se interpretó de distintas maneras, pero  cada vez estoy más convencido de que hicimos lo que teníamos que hacer, ahora que ha pasado el tiempo, porque si nos arriesgamos a un procedimiento judicial que podría haber terminado en nada, el asunto habría sido muy perjudicial para la Fundación, de esta forma hemos abierto un camino para liberar el Torreón y, al mismo tiempo, no hemos cerrado el camino jurídico, que sigue en marcha y dará de sí lo que determinen los jueces.

¿Qué duración tienen los periodos de mandato para patronos, cuándo habrá relevo?

Son de cuatro años y la renovación es por mitades, hasta dentro de dos años no tenemos nada que renovar en el patronato. Algunos miembros son designados por el Patronato pero otros no, como los que nombran los ayuntamientos de Segovia o Cuéllar, la Diputación Provincial, la Federación Empresarial Segoviana... Hay una buena parte de patronos designados por entidades, incluso había alguna más que, en su momento no le pareció oportuno designar a nadie y quedaron fuera. Aunque es una entidad privada, siempre he pensado que la  Caja Segovia debía tener en su Patronato una cierta representación pública, de personas designadas por las instituciones.