Nada tienen que ver los niveles de mortalidad que se registran ahora como consecuencia de la pandemia (dos muertes de pacientes con covid en lo que va de mes en Segovia), con los que se sufrían hace un año (43 muertes en diciembre, 10 de ellas en el hospital público y el resto en otros centros sanitarios, residencias o incluso domicilios). Entonces la vacunación aún estaba por comenzar (lo hizo el día 30) y hoy hay más de un 80% de población vacunada, lo cual obviamente resulta clave. Sin embargo, era difícil imaginar, antes de que empezara a manifestarse la sexta ola en noviembre, que se pudiera llegar a navidades con una situación epidemiológica tan preocupante. Y es que el ritmo de reescalada de contagios que se viene produciendo en las últimas semanas, y sobre todo en los últimos días, no encuentra precedentes ni en la trágica tercera ola. Todavía no se ha alcanzado el techo de aquella, pero ya se teme que pueda romperse sin tardar demasiado, aunque la mortalidad siga contenida. 

No en vano, Sanidad notificaba este miércoles 302 nuevos positivos confirmados por pruebas diagnósticas de infección activa, la segunda cifra más alta de toda la pandemia, sólo superada por los 356 que se contabilizaron el pasado 16 de enero.Y sólo contando con los 1.254 casos contabilizados en los seis últimos partes diarios de situación reportados por Sanidad hasta este miércoles, más los cientos que están por hacerse oficiales antes de Nochebuena, la provincia ya supera con creces los 1.500 ciudadanos que llegan contagiados, con enfermedad activa y por tanto deber de estar confinados, en una fecha tan señalada. Una Nochebuena que en 2020 fue dramática por las más de 700 muertes relacionadas con la pandemia que ya se habían sufrido en los meses precedentes (según el balance oficial de la Junta), y que este año es más preocupante que entonces en lo que se refiere a los nuevos contagios que pueda provocar.

Cierto que las navidades pasadas ya causaron miles de positivos y así se fraguó el estallido de la tercera ola, que entre enero y febrero dejó 143 fallecidos, pero es que esta vez, aunque las previsiones de mortalidad no tengan nada que ver, las de contagios sí que apuntan a ser mucho peores. 

 De hecho, el 'semáforo covid' marcaba en Segovia a estas alturas de 2020 una tasa de incidencia acumulada en 14 días inferior a 120 casos por cada 100.000 habitantes, mientras que este miércoles ya alcanzaba los 1.153. Se multiplica así prácticamente por 10 la cifra del año pasado, pero es que además la tasa actual de incidencia acumulada en 7 días ya supera los 900 y eso anticipa que, al ritmo actual, sin previsiones de que se detenga sino todo lo contrario, en pocos días se puede alcanzar y superar una incidencia de más de 2.000 casos en IA14. Queda así demasiado cerca el récord de incidencia de toda la pandemia, el que se marcó el 26 de enero de este año con 2.170.

Asusta por ello la estadística de incidencia, aunque la de mortalidad contenga o relativice el miedo, y en el hospital aún se perciba un aumento de los ingresos que de momento sigue sin desbocarse en Segovia, donde el miércoles se contabilizaba 14 pacientes covid en planta y 4 en UCI. Pero han vuelto las largas filas de coches con contactos estrechos esperando turno para hacerse una PCR en las casetas instaladas junto al hospital, y también en los colegios se ha visto cómo se vaciaban las clases con una rapidez que aún no se habían producido en este curso. Por de pronto, sólo entre el viernes de la semana pasada y el miércoles de la actual, Educación declaraba en cuarentena los grupos de alumnos de 24 aulas de la provincia, y después ha estado el temor de los propios padres a llevar a sus hijos pequeños a clase en estos últimos días del trimestre. «Desde la Dirección Provincial de Educación no hay constancia de que se esté produciendo esta semana (lunes y martes) absentismo masivo en ningún centro», aclaraban el martes a este periódico fuentes oficiales de la Delegación Territorial de la Junta. «Ningún director de centro ha comunicado a la Dirección Provincial absentismo masivo de sus alumnos», incidían. Aunque la sensación de los padres era otra.

En cuanto a las medidas que pudiera tomar Educación por los padres que decidieran anticipar las vacaciones navideñas de sus hijos: «Como es habitual, cuando algún alumno no acude a clase, el profesor toma nota de la falta y solicita la correspondiente justificación a los padres. Los padres hacen llegar al profesor la justificación y es el profesor el que valora si está motivada», explicaron las mismas fuentes de la Junta. Sin más... ni menos.

MEDIDAS. La precaución de cada cual y la vacunación, en cualquier caso, se plantean como los principales recursos de cada cual para intentar paliar en lo posible la explosión de covid que se está sufriendo ahora, después de que el Gobierno central anunciara el miércoles como única nueva restricción de especial relevancia el regreso de la mascarilla obligatoria en exteriores a partir de este viernes. 

Las navidades anteriores, sin embargo, la Junta decidió cerrar otra vez al interior de los establecimientos hosteleros a partir del 10 de enero. Segovia había cerrado 2020 con una tasa de incidencia acumulada de 169 casos por cada 100.000 habitantes en 14 días, pasó Reyes con más de 500 y superaba los 800 cuando llegó aquella restricción. Pero la covid ya estaba completamente desbocada para entonces y todavía el 26 de enero se marcó el pico más alto de todo el año: los ya citados 2.170 casos de IA14, que son los que apuntan ahora a superarse en pocos días.

VACUNAS. Pero ahora se mira sobre todo a la vacunación y la Gerencia de Asistencia Sanitaria de Segovia comienza el lunes 27 la administración de la dosis de recuerdo a las personas de 50 a 59 años. La programación para aplicar los antivirales a estos grupos de edad se desarrollará hasta el 7 de enero. 

El lunes se iniciará así la vacunación con la dosis de recuerdo en el pabellón Pedro Delgado para los residentes de las zonas básicas de salud de Segovia I, II y II, Segovia Rural, y San Ildefonso, de 8.30 a 20.00 horas. El 27 de diciembre, nacidos en 1962 y de enero a junio de 1963; el martes 28, nacidos de julio a diciembre de 1963 y en 1964; el miércoles 29, nacidos en 1965 y de enero a junio de 1966; el jueves 30, nacidos de julio a diciembre de 1966 y en 1967; el lunes 3, nacidos en 1968 y de enero a junio de 1969; el martes 4, nacidos de julio a diciembre de 1969 y 1970; miércoles 5, nacidos en 1971 o años anteriores que no acudieron acudir a su convocatoria y el viernes 7, nacidos entre 1962 y 1971 que no pudieron acudir en día de su convocatoria.

También se iniciará la vacunación de estos grupos en el resto de la provincia, que aun así, como el resto del país, apunta a ver cómo los contagios rompen récords y la Atención Primaria se satura, mientras se confía en que la mortalidad no llegue a ser lo que fue.