Como hace una semana, el árbitro invalidó en el tiempo de descuento el tanto que hubiera dado los tres puntos a la Segoviana. Habría sido el justo premio para su convincente partido, sólo falto de un bingo en el remate. El equipo de Manu González se sobrepuso a las bajas y tuvo a raya al Ávila, que dio por bueno el empate.