Taiger ha cerrado un acuerdo con la Junta de Castilla y León para impulsar la apertura de un centro de investigación y desarrollo (I+D) de inteligencia artificial en Segovia. Con una inversión de 3,7 millones de euros cofinanciados por la Administración autonómica y previsión de alcanzar los 75 puestos de trabajo cualificados en sus primeros tres años de actividad, pero «con vocación de continuidad durante mucho más tiempo», avanza el segoviano Sinuhé Arroyo, fundador, director ejecutivo y CEO de esta empresa con sede en Singapur, presencia en diversas ciudades de Europa, Asia y América, y especializada en la aplicación de inteligencia artificial en el sector financiero, legal, seguros y Administración pública.

«El proyecto ya ha empezado y estamos buscando talento, equipo», subraya. «Buscamos programadores, ingenieros, lingüistas computacionales, gestores de proyecto, doctores, postdoctores… Perfiles potentes de investigación», señala Arroyo. Empleos de máxima cualificación y con preferencia por que ese talento proceda de las cuatro universidades públicas de Castilla y León, empezando por la Escuela de Ingeniería Informática de la UVa en Segovia. Los interesados pueden enviar su currículum a la web de la compañía (www.taiger.com).

De momento, Taiger ha incorporado a siete empleados, dos de ellos segovianos «que ahora podrán trabajar casi todo su tiempo sin desplazarse a Madrid», y ha negociado un acuerdo para instalarse de forma provisional en el coworking del Colegio de Arquitectos, mientras resuelve su ubicación en un edificio histórico del centro como sede permanente. Necesita «entre 500 y 700 metros cuadrados» de superficie e incluso baraja organizar un acto de inauguración oficial en noviembre que contaría con la asistencia del presidente de la Junta, Alfonso Fernández Mañueco, y el consejero de Economía y Hacienda, Carlos Fernández-Carriedo.

Las conversaciones con la Junta se han alargado más de lo esperado. Como ya informó El Día en su edición del 31 de agosto, Arroyo presentó su proyecto a la exconsejera de Economía y Hacienda Pilar del Olmo en diciembre del año pasado, después de haber mantenido contactos previos con la Administración autonómica a través del exdelegado territorial, Javier López-Escobar. El planteamiento inicial, abrir una software factory (desarrollo de programas) de inteligencia artificial con previsión de alcanzar los 150 empleos en cinco años. «Se lo tomaron súper en serio, pero el tema parece atascado porque hace meses que no sabemos nada», lamentaba entonces Arroyo. Esta redacción preguntaba en esas fechas tanto a la Delegación Territorial como a las consejerías de Economía y Hacienda y de Empleo e Industria, pero ninguna de las fuentes oficiales consultadas aportó información actualizada, ni positiva ni negativa.

No obstante, los acontecimientos se precipitaron desde entonces. Taiger recibió la resolución de la Junta tres semanas después, Arroyo viajó el 3 de octubre a Valladolid para negociar los últimos «flecos» con Fernández Carriedo y el acuerdo está cerrado. «La predisposición a ayudarnos ha sido increíble», valora el empresario segoviano; y el cambio de escenario que se ha producido en apenas un mes, también.

«Pondremos en valor el ecosistema brutal que existe en esta Comunidad con las cuatro universidades donde se imparte informática y crearemos empleo de calidad en Castilla y León para los castellanos y leoneses». El objetivo, concretamente, es captar financiación de programas de la Unión Europea para seguir creciendo, y Taiger ya tiene experiencia en ese ámbito: «La intención es atraer financiación de este tipo y ejecutarla con las universidades de la región desde Segovia», precisa. 

Arroyo recuerda que Taiger ya trabajó tiempo atrás en un máster con la Escuela de Ingeniería Informática de Segovia y ahora espera reforzar esa colaboración: «Vamos a tratar de retomar el proyecto, e incluso a generar especializaciones con las universidades, de forma que podamos incorporar a estudiantes de la forma más rápida posible porque sus currículums se hayan adaptado a nuestras necesidades».

La empresa. Taiger, nombre que reproduce la pronunciación de tigre en inglés, jugando a su vez con las siglas británicas de inteligencia artificial (AI) y el apodo de Singapur como ‘tigre asiático’ por sus altas tasas de crecimiento e industrialización, es la aventura tecnológica que Sinuhé Arroyo (Segovia, 1975) decidió emprender tras doctorarse en Inteligencia Artificial en Austria. Estudió Ingeniería Informática en Segovia, después la Superior en Málaga y un Doctorado de IA en Innsbruck, aparte de un MBA en Chicago.

De su trabajo de investigación en Austria surgió hace diez años su empresa, especializada en la aplicación de la inteligencia artificial al sector financiero, legal, seguros y Administración pública. «Desarrollamos tecnología para extraer e interpretar el lenguaje escrito. Sacamos los datos (de distintos tipos de documentos digitales y físicos) para computaciones varias», explica, convirtiendo así la información en conocimiento ejecutable. Entre sus principales clientes destacan el Gobierno de Singapur, Bank of America y el Banco Santander, que a principios de agosto recibía un premio por una iniciativa desarrollada por Taiger: «La apertura de cuentas bancarias en menos de 15 minutos sin ninguna intervención humana» por parte de la entidad financiera, resume Arroyo.

«En Segovia potenciaremos tecnologías del lenguaje en castellano para crear más productos de Taiger enfocados hacia el mercado de Sudamérica». Tiene oficinas en Madrid, Hong Kong, Nueva York y Vietnam. Cuenta con unos 145 trabajadores en total, pero al final del año su plantilla superará los 200, mientras sus planes de futuro le llevan a aventurar ambiciosas previsiones de «400 empleados el año que viene y 800 al siguiente». ¿Y cuál sería la progresión del centro de Segovia en esta primera fase de tres años en las que espera alcanzar los 75 puestos de trabajo? «Hay segovianos que quieren volver y gente de otras ubicaciones, principalmente de Madrid, que ve con muy buenos ojos la calidad de vida que ofrece Segovia. Taiger está en fase de hipercrecimiento y cuanto más rápido captemos talento, más rápido creceremos», sentencia.