2.100 firmas contra la escultura del diablo en San Juan

ICAL
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La iniciativa de recogida de firmas en change.org se inició el miércoles tras el anuncio realizado por la alcaldesa, Clara Luquero, de poner una estatua dedicada al diablo, en la parte alta de la calle San Juan, en alusión a la leyenda popular

Más de 2.100 personas respaldaron con su firma, en la plataforma change.org, la petición de una ciudadana dirigida al Ayuntamiento de Segovia oponiéndose a que, con dinero público, se coloque una estatua dedicada al diablo en la ciudad. La iniciativa de recogida de firmas se inició el pasado miércoles tras el anuncio realizado por la alcaldesa de Segovia, Clara Luquero, de poner una estatua dedicada al diablo, en la parte alta de la calle San Juan, en alusión a la leyenda popular sobre la construcción del Acueducto.

El argumento dado por esta ciudadana es que está “en contra” de que “se exalta el mal y la mentira”, ya que se siente “muy orgullosa” de que los autores del Acueducto de Segovia fueran los romanos, por lo que se opone a que “se ponga la inscripción de que el autor es el demonio”. De una forma clara y tajante escribió que no quiere que el consistorio atraiga a Segovia a “turistas que adoren a satán” sino a personas que “admiren y adoren la verdad” y la realidad histórica. “No absurdas leyendas que son mentirás”, concluyó.

Clara Luquero anunció la aceptación, por parte de la Junta de Gobierno, de los derechos de la obra escultórica ‘Segodeus Aqueducti Artifex’ de José Antonio Abella, de la que se hará una reproducción en bronce para colocarla en la parte alta de la calle San Juan, evocando “la leyenda del Acueducto”, que cuenta que una joven aguadora ofreció su alma al diablo si éste construía, en una noche, un puente para llevar el agua hasta la ciudad de Segovia. Finalmente, perdió el diablo porque le quedaba colocar la última piedra, cuando cantó el galló.

Luquero argumentó que esta escultura puede tener “ese elemento de curiosidad o de interés” para los turistas, con una “idea sencilla” pero “bien ideada” para dirigir a los visitantes hacia el casco histórico, desde el monumento romano por la calle San Juan y descentralizar el flujo de visitantes desde Acueducto hasta la Plaza Mayor, por la Calle Real.