Los plantes al especialista cuestan casi un millón al año

D. A.
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Más de 2.000 segovianos no acudieron a la cita solicitada con el médico de Atención Especializada durante el primer semestre, mientras la lista de espera supera los 7.000 pacientes y la demora media para ser atendido alcanza los 38 días

Unidad donde se efectúan las pruebas de resonancia magnética en el Complejo Asistencial de Segovia. - Foto: Diego de Miguel

Más de 2.000 segovianos plantaron en primera consulta al especialista entre enero y junio de este año sin justificar su ausencia de ninguna manera. Representan el 6% de las que se programaron para ese periodo, según datos oficiales de la Consejería de Sanidad. Un porcentaje que no llamará tanto la atención como los casi 450.000 euros de gasto que se estima que supone ese absentismo, si se tiene en cuenta que una consulta de Atención Especializada sale de media por más de 200 euros. Y si tales cifras se extienden al cómputo de todo un año, el coste se dispara hasta rondar el millón de euros;más o menos, la mitad de lo que cuesta la unidad de radioterapia que la Junta prometió a Segovia hace más de diez años y que ahora se tilda de prioritaria, pero sin cerrar plazos, provocando que pacientes oncológicos de esta provincia sigan teniendo que trasladarse a Valladolid o Madrid para tratarse con acelerador lineal.

Los motivos pueden ser diversos: dejadez del paciente, un imprevisto que le surgiera a última hora o un olvido que puede verse influido por el tiempo que pasa desde que se pide la cita o incluso por hipotéticos errores en el sistema de comunicación de la cita y su recordatorio.

Sanidad incluye el dato de absentismo en su estadística del Observatorio del Sistema de Salud de Castilla y León, donde también destaca el porcentaje de pruebas técnicas diagnósticas a las que el paciente no acude y que en el caso de Segovia, curiosamente, también alcanzó el 6% en el primer semestre, igual que en las primeras consultas de Atención Especializada. Se programaron unas 6.600 pruebas entre ecografías, mamografías, TAC y resonancias magnéticas, y casi 400 no llegaron a practicarse por ausencia del interesado, aunque el hueco de esa cita, al no anularse, no pudo ser ocupado por otro paciente.

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Otro coste económico y organizativo de más sería el que supone que un paciente no se presente a la cita que haya solicitado con el médico de Atención Primaria. Ese dato no figura en las últimas estadísticas del Observatorio de Salud, pero también se presume importante, dado que una primera consulta en esta área sale por 73 euros, de nuevo según cifras oficiales.

En cuanto a la otra gran consecuencia de no acudir a la cita más allá de la económica, la organizativa, al sistema de salud le afectan otros factores de manera más directa que el absentismo.Es el caso, sobre todo, de la mayor o menor dotación de medios materiales y humanos de la que se dispone en cara área para atender la demanda asistencial y reducir tanto el número de personas en lista de espera como el tiempo medio que transcurre desde que se pide una cita hasta que efectivamente se puede celebrar. Pero todo suma, o resta, cuando se trata de buscar un uso eficiente de los recursos; y el absentismo, evidentemente, resta lo suyo.

¿Y cómo se ve esta cuestión desde la Gerencia de Asistencia Sanitaria de Segovia? «Entre los múltiples problemas que se han puesto encima de la mesa, uno de ellos está relacionado con esta situación desafortunadamente crónica», responde a El Día el doctor JorgeElizaga, que acaba de asumir el cargo de gerente (tomó posesión oficialmente el pasado 22 de octubre), pero lleva 29 años en el Hospital de Segovia y ha sido jefe del Servicio de Medicina Interna durante los últimos ocho.

«En muchas ocasiones el problema parte de los usuarios y en otras es responsabilidad nuestra o del método de comunicación de la cita», señala el gerente de Asistencia Sanitaria de Segovia, Jorge Elizaga.«En muchas ocasiones el problema parte de los usuarios y en otras es responsabilidad nuestra o del método de comunicación de la cita», señala el gerente de Asistencia Sanitaria de Segovia, Jorge Elizaga. - Foto: Ical

Elizaga no apunta únicamente a la irresponsabilidad del paciente ni rehúye de la autocrítica: «En muchas ocasiones el problema parte de los usuarios y en otras es responsabilidad nuestra o del método de comunicación de la cita», admite, por lo que «dentro del servicio de citaciones intentaremos evaluar las que están en relación con nuestro proceso. Aunque «nos consta que se mandan SMS al paciente para que recuerde su cita y avise en caso de no acudir, pero en muchos casos no se avisa, como muestran las cifras», matiza. 

En cuanto a las consecuencias de no acudir a la cita, el gerente destaca, «por una parte, desaprovechar huecos en la agenda que podían haber sido utilizados por otro paciente que sí hubiera acudido (en todos los casos); y, por otra, generar una reprogramación posterior en los casos en que el paciente no acude por causa voluntaria».

¿Y qué se puede hacer para reducir el absentismo? «Creo que la tecnología puede ayudar a reducir este porcentaje y trabajaremos en ello», concluye.

En cifras. El Observatorio del Sistema de Salud de Castilla y León contabiliza un total de 32.882 primeras consultas de Atención Especializada que sí se realizaron en el Complejo Asistencial de Segovia durante el primer semestre de este año, y destaca el citado 6% de primeras consultas a las que el paciente no acudió sin un motivo justificado, que equivaldría a unas 2.100.

Cierto es, por otro lado, que si ese porcentaje se mantuviera al final del ejercicio se estaría marcando el nivel más bajo de absentismo de los últimos cinco ejercicios en lo que se refiere a primeras consultas del especialista en Segovia, ya que el año pasado, sin ir más lejos, ascendió al 8,28%, mientras que de 2014 a 2017 se movió (con altibajos) entre el 7,18% y el 7,65%.

Además, el Complejo Asistencial de Segovia se sitúa al final del primer semestre de este año por debajo de la media de absentismo en primeras consultas de especializada de Castilla y León, que se sitúa en el 7%. En este sentido, si resulta llamativo que el ya citado 6% de absentismo de Segovia represente un gasto absolutamente innecesario de casi 450.000 euros, ese 7% autonómico equivale a más de 10 millones de euros, tal y como apuntaba recientemente la Agencia Ical, un coste equivalente a la adquisición de cuatro aceleradores lineales.

Asimismo, en la comparación por hospitales, destaca en positivo el Clínico Universitario de Valladolid, que puede presumir de presentar sólo un 3% de absentismo en primeras consultas de Especializada. Los siguientes ya duplican ese porcentaje, con Segovia entre ellos, junto al Río Hortega de Valladolid y los hospitales de Medina del Campo y Palencia. En el otro extremo destaca en negativo el hospital de Zamora, donde los plantes al especialista alcanzan el 10%, y entre medias se quedan los centros de Soria (7%), Salamanca (7%), Aranda de Duero (8%), El Bierzo (8%), Burgos (8%), León (8%) Ávila (9%) y Miranda de Ebro (9%).

Peor tendencia lleva Segovia en lo que se refiere a la cantidad de pruebas técnicas diagnósticas programadas a las que el paciente no acude. El porcentaje de absentismo en estos casos alcanzó un 8,18% en 2015, se redujo de forma notable al año siguiente (6,05%) y todavía más en 2017 (5,39%), pero ya subió ligeramente en 2018 (5,47%) y se ha mantenido al alza en el primer semestre de este año (6%). De hecho, los pacientes segovianos ya superan la media regional de absentismo en estas pruebas, que se queda en un 5%, aunque hay situaciones mucho más preocupantes en otros hospitales de la Comunidad, sobre todo los de El Bierzo (9%) y Miranda de Ebro (11%), mientras los de la capital vallisoletana, el Río Hortega y el Clínico Universitario, sólo registran un 1 y un 2% de absentismo.

Costes y esperas. La estimación del agujero económico que representan las faltas para el sistema de salud se basan en los últimos precios públicos por servicios sanitarios publicados por la Junta, que clasifica las consultas en tres tramos en función de la complejidad de cada especialidad. Las más sencillas (tramo 3) cuestan 179,81 euros; las intermedias (tramo 2), 220,58; y las más complejas (tramo 3), 227,89. Unos precios que se multiplican por la cantidad de pacientes que no acudió.

La otra vertiente a la que afecta el absentismo de los pacientes está en las listas de espera y la demora media en recibir atención. Con datos oficiales actualizados hasta el pasado 30 de septiembre, la Consejería de Sanidad refleja que en Segovia había concretamente 7.164 pacientes en lista de espera para consultas externas, mientras la demora media hasta ser atendido se situaba en 38 días. El tiempo medio de espera en Castilla y León es muy superior, 64 días, pero ese dato queda desvirtuado porque no todos los hospitales ofrecen las mismas especialidades y unas tienen más sobrecarga y complejidad que otras.

En Endrocrinología de Segovia, por ejemplo, sólo hay que esperar once días de media, mientras Dermatología se destapa como el área más sobrecargada, con 667 pacientes en lista de espera y una demora media de casi tres meses (87 días). Entre los dos extremos y por debajo de la media sorprende Oftalmología, donde una espera de 33 días en Segovia se puede calificar de positiva en comparación con la situación que se vive en otras provincias, teniendo en cuenta que en Soria, Salamanca, Aranda de Duero o El Bierzo toca sufrir tiempos medios de espera entre 140 y 204 días. Pero sin absentismo, o al menos con un absentismo más reducido, evidentemente se facilitaría un uso más eficiente de los recursos del sistema de salud.