El belga Dylan Teuns (Bahrain Merida) cantó victoria ayer después de dos años de sequía al ganar la segunda etapa del Dauphiné, entre Mauriac y Craponne-sur-Arzon, con un recorrido de 180 kilómetros, en la que además tuvo el honor de ponerse el maillot amarillo de líder.

Teuns, de 27 años, buen corredor de clásicas, aprovechó una escapada junto al francés Guillaume Martin (Wanty) para imponerse al esprint a su rival, alzando así los brazos después de dos años sin victorias, con el premio del liderato y haciendo inútil la persecución de los favoritos.

El grupo de Chris Frome (Ineos), Nairo Quintana (Movistar) y Adam Yates (Mitchelton) cruzó la meta a 43 segundos, medio minuto antes que algunos de los favoritos que perdieron comba en el último ascenso, como el francés Romain Bardet y el irlandés Dan Martin.

«Una victoria especial después de 24 meses sin vencer», manifestó Teuns en meta, vestido de amarillo, al frente de la general, con tres segundos de ventaja sobre Guillaume Martin y 20 sobre el danés y primero de los favoritos Jakob Fuglsang. En la quinta plaza aparece Nairo Quintana, a 24 segundos del líder, con el mismo tiempo que Froome, Pinot y Yates, entre otros. Una jornada de media montaña con recorrido de esos que apenas permiten respiro, de sube y baja constante, con ocho cotas, la última de ellas de segunda categoría, Saint Victor sur Arlanc, a 18 kilómetros de meta. Ya de inicio, y según se subía el Col de Moussages se formó una interesante fuga de 13 hombres. Entre ellos el holandés Tom Dumoulin, el francés Alaphilippe, los españoles Rubén Fernández y Gorka Izagirre y el italiano De Marchi. La aventura se fue desgastando puerto tras puerto, nunca con diferencias superiores a los dos minutos. Teuns y Martin lo dieron todo por jugarse entre ellos la gloria. El ciclista galo arrancó primero en la recta de meta, pero Teuns, más experimentado, salió en el momento justo para ganar.