Fernando Alonso partirá desde la segunda posición este domingo en su Toyota Gazoo Racing número ocho al asalto de las 6 Horas de Spa, penúltima cita del Campeonato del Mundo de Resistencia (WEC) donde confía en acercar el título.
El doble campeón del mundo de la Fórmula 1 inicia así la despedida del WEC, aventura en las carreras de resistencia a la que anunció su fin el pasado miércoles. Junto a Alonso, Sébastien Buemi y Kazuki Nakajima, el Toyota 8 (135) saca 15 puntos de ventaja al número 7 de la marca japonesa, que conducen José María 'Pechito' López, Mike Conway y Kamui Kobayashi (120) y que este viernes hicieron la pole.
La renta por esa pole baja a los 14 puntos ahora, antes de que el sábado el monoplaza del español defienda la victoria del año pasado. Justo hace un año, Alonso, aún piloto de McLaren en la F1, se llevó su debut en el Mundial y rompió su sequía de 5 años sin ganar.
"Espero una carrera difícil para todo el mundo, en condiciones muy variables durante las seis horas; y la primera prioridad es acabar la prueba, porque será dura y arriesgada. Creo que será muy interesante desde fuera, con muchos cambios. Desde dentro será algo más estresante; pero intentaremos estar preparados para cualquier cosa", declaró el asturiano.
Alonso, Buemi y Nakajima serían campeones del Mundial si repiten victoria en el trazado belga y el número 7 de Toyota no puntúa. Con los dos coches aspirantes a copar los dos primeros puestos, se espera que el Mundial se decida en junio, en la última prueba en las 24 Horas de Le Mans.