Llenar la práctica totalidad de las gradas del Estadio Municipal de La Albuera dos días consecutivos era un hecho sin precedentes en la historia de esta instalación hasta que esta semana lo consiguieron el Unami y la Gimnástica Segoviana. Sus eliminatorias de Copa del Rey frente al Deportivo Alavés y el Mallorca arrastraron hasta las tribunas a unas 1.800 personas en el primer caso y 1.900 en el segundo.

Un espaldarazo para la apuesta del Ayuntamiento de desembolsar 10.000 euros con el objetivo de alquilar los grupos electrógenos necesarios para garantizar la retransmisión por televisión de ambos partidos. Esa masiva respuesta también ha repercutido en las arcas de los dos clubes, que a falta  de hacer los últimos números calculan que ingresarán por las taquillas 6.500 euros (el Unami) y en torno a 10.000 la Segoviana.

No obstante, el presidente del Unami, Francisco Andray, recuerda que a esas cantidades hay que restar las cantidades derivadas de la organización. «Solo el viaje para disputar la anterior eliminatoria contra el Aldeano nos costó 1.500 euros. Y para el partido contra el Alavés regalamos entradas a todos los jugadores de nuestra base, a noventa árbitros, a exentrenadores nuestros, a patrocinadores... Pero no nos arrepentimos porque no queríamos sacar beneficios sino acercar el club a Segovia», explica Andray, que aún aguarda un posible premio económico de la Federación. Asegura que para los clubes de Regional clasificados para la Copa no está fijado. En el caso de la Segoviana, que llegó desde Tercera, asciende a 29.000 euros, según apunta su presidente, Agustín Cuenca, triste solo por la derrota.