La curva se aplana en niveles alejados de la tercera ola

D. A.
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Segovia se afianza entre las provincias con más covid de España en esta cuarta ola y tiene más municipios en riesgo de sumarse al cierre de interior de hostelería el próximo lunes, pero sus tasas de incidencia están muy por debajo del pico de enero

La curva se aplana en niveles alejados de la tercera ola

Segovia se ha afianzado entre las provincias con más covid del país en esta cuarta ola, pero apunta a quedarse lejos del pico que alcanzó en la tercera. Cierto que los niveles ya son propios de Alerta 4 o riesgo muy alto desde hace semanas y todavía muestran una ligera tendencia al alza, pero con altibajos que invitan a pensar que la situación vivida en enero no se volverá a repetir. Hay motivos para creer en ello, empezando sobre todo por el hecho de que ya sean más de 17.000 los segovianos vacunados con el ciclo completo, incluidos los usuarios de las residencias, y más de 12.000 con la primera dosis, que ya garantiza un importante porcentaje de inmunidad. Aunque, por otro lado, sigue inquietando la alta contagiosidad y la letalidad de la variante británica, que ya es dominante, mientras los efectos de la Semana Santa todavía están por verse. Los casos que se están confirmando a lo largo de esta semana, de hecho, corresponderían más bien a contagios registrados en los días previos al puente pero, en cualquier caso, tampoco se esperan consecuencias semejantes a las sufridas durante las navidades. 

Bien pudo inquietar la manera en que Segovia fue replicando a lo largo del mes de marzo la curva de aumento de contagios de diciembre, que terminó revelándose como el prólogo de la tercera ola, pero ya la semana pasada la pendiente se revelaba menos pronunciada que la del comienzo de enero. 

Si se toma como referencia el ritmo semanal de notificación de casos, fue la que terminó el domingo 6 de diciembre la que marcó mínimos entonces en la provincia con 69 positivos acumulados en siete días. A partir de ahí empezó a subir, con 107 en la semana del domingo 13, 118 en la del 20, 144 en la del 27, 398 en la del 3 de enero y 752 en la del domingo 10. La tercera ola ya estaba desbocada, hasta el punto de que en las dos semanas posteriores se contabilizaron 1.599 y, por fin, el pico de 1.681 contagios en siete días el 24 de enero.

Marzo, por su parte, marcó un mínimo de 71 casos en la semana que terminó el domingo 7, así como 77 en la del 14, 129 la del día 21, 195 la del 28 y 307 la del 4 de abril. De esta forma, la comparación de las cinco primeras semanas de repunte que se registraron en los inicios de la tercera y de la cuarta ola revela que los paralelismos se habrían roto en la quinta (307 casos del 29 de marzo al 4 de abril, frente a 398 del 28 de diciembre al 3 de enero). Y sobre todo, el mayor contraste se está viendo en la sexta, que es la actual, con una media de menos de 50 casos por día, frente a más de 100 registrados del 3 al 10 de enero, cuando en total se acumularon 752.

La consejera de Sanidad, Verónica Casado, ya hablaba este jueves de cuarta ola, después de que una semana antes dijera que parecía que la Comunidad podía estar entrando. «Lo que no sabemos es la dimensión que puede tener», matizó. «Aumentan los casos pero de manera más suave que en la tercera». Aunque no por ello dejó de llamar a la prudencia e instó a esperar entre 10 y 14 días antes de sacar conclusiones, para poder ver así los efectos de la Semana Santa. En este sentido, admitió además que las vacaciones han podido desvirtuar el ritmo diario de realización de pruebas diagnósticas y notificación de contagios, por lo que consideró que toca «esperar a que se estabilicen los datos».

No obstante, frente a una lectura general de situación que la consejera hacía pensando en el conjunto de la Comunidad, lo cierto es que Segovia hace semanas que se puso a la cabeza, con niveles de covid por encima de los que han llevado a hablar a nivel regional de una cuarta ola que, en esta provincia, se ha manifestado antes.

No en vano, la tasa de incidencia de casos acumulada en catorce días (IA14) ya se situaba el jueves en el entorno de los 350 en Segovia, mientras la media regional apenas rebasaba los 180 y la nacional se quedaba por debajo de 175. En ambos casos subiendo, pero de forma leve. Además, en el ranking de IA14 por provincias y ciudades autónomas, con datos actualizados hasta el 6 de abril, Segovia ya era la octava, sólo por detrás de Melilla, Ceuta, Álava, Lleida, Guipúzcoa, Guadalajara y Navarra. Y si se observa el ranking por incidencia acumulada en 7 días (IA7) ya era la cuarta, con sólo Ceuta, Melilla y Guipúzcoa por delante, mientras la vecina Madrid, siempre bajo el foco, se quedaba ya muy lejos, en el puesto 11, para frustración sobre todo de los hosteleros de Segovia capital, El Espinar o Riaza, que vuelven a tener el interior de sus bares, cafeterías y restaurantes cerrados al público desde el pasado lunes, además de las casas de apuestas. En principio para un periodo de 14 días, hasta el 19 de abril, fecha en la que Sanidad volverá a revisar la situación epidemiológica de estos tres municipios y de los otros 18 de la Comunidad que cerraron al mismo tiempo, aunque será difícil que para entonces la provincia se haya vuelto a situar por debajo del umbral que ha marcado para determinar la adopción de esta medida restrictiva: una IA14 de 150 casos en el caso de los municipios de más de 5.000 habitantes, cuando la media de Segovia estaba este jueves en torno a 350. Asimismo, no debe olvidarse que a la hora de analizar poblaciones más pequeñas se analizan también otros parámetros, aunque eso no libró a Riaza el pasado lunes.

La Junta cuenta además con celebrar una nueva sesión extraordinaria de Consejo de Gobierno el próximo lunes para revisar la situación epidemiológica y las restricciones, pero no será para facilitar precisamente la desescalada de ningún territorio, sino para valorar si incorpora más; y Segovia tiene unos cuantos municipios en riesgo de verse en la misma situación que Segovia capital, El Espinar y Riaza.

LOS MUNICIPIOS CON MÁS COVID. Riaza sigue siendo el municipio de la Comunidad con la peor tasa de incidencia de casos en 14 días, a pesar de la corrección a la baja que ha aplicado Sanidad, después de que el martes informara de la necesidad de repetir pruebas porque las muestras se habían «contaminado» en el laboratorio. Se repitieron las PCR a los más de 40 afectados y muchos dieron negativo pero, aun así, como confirmó el jueves la consejera de Sanidad,«los niveles siguen siendo muy altos». Su IA14 llegó a superar los 2.500 casos el 4 de abril y tras la actualización de este jueves había bajado a 1.795, 12 veces por encima del umbral de 150 casos por cada 100.000 habitantes.

Valverde del Majano, mientras, registraba la segunda IA14 más alta de la provincia y la sexta de la Comunidad con 807, por delante de Nava de la Asunción (582), Segovia capital (578), Torrecaballeros (364), Carbonero el Mayor (361), El Espinar (319), San Cristóbal (260), Espirdo (216), Villacastín (202) y Trescasas (186). Es decir, que con los datos del jueves, además de Riaza, Segovia y El Espinar, habría ocho municipios por encima del umbral marcado para el cierre del interior de la hostelería, pero todos ellos pendientes, en primer lugar, de ver con qué niveles de covid llegan al Consejo de Gobierno del lunes; y aparte, de que la Junta tenga en cuenta otros parámetros por tratarse de municipios con poblaciones de un tamaño tan limitado que llevan a sus tasas de covid a sufrir importantes variaciones con pocos casos positivos que se puedan registrar. Torrecaballeros, por ejemplo, a pesar de su alta tasa de IA14, no contabilizó un solo caso en los siete días previos a la actualización de datos del jueves, así como sólo uno en Carbonero el Mayor, dos en Espirdo, dos en Trescasas o tres en Villacastín.

Por otro lado, está por verse cómo afecta el repunte de los contagios a la presión asistencial y la mortalidad. Los ingresos siguen en aumento y este jueves se contabilizaban 35 pacientes en planta, después de que el 20 de marzo hubiera un mínimo de 10; pero sigue lejos el pico de presión asistencial del 10 de febrero, cuando se alcanzaron 142. Y en UCI ya están subiendo de nuevo cuando apenas acababan de empezar a bajar: de 17 pacientes críticos el 10 de febrero a 8 el 28 de marzo, y este jueves eran 11.

Tampoco la mortalidad actual tiene nada que ver con la de la tercera ola: el hospital de Segovia notificó 57 fallecidos en enero y la primera semana de abril la salvó con ninguno, aunque este viernes notificó el primero del mes en este centro; y lo cierto es que mientras los contagios sigan repuntando, el riesgo de que vuelvan a producirse más ingresos y muertes seguirá latente.