Lo de menos era el resultado, pero el equipo que entrena Daniel Gordo se reencontró con la victoria después de tres derrotas consecutivas. Lo hizo ante un Cisne que tampoco se jugaba nada. Ya con el final del encuentro llegó la explosión de júbilo.

Jugadores y cuerpo técnico recogieron las medallas que les acreditan como campeones de la División de Honor Plata y el capitán, Carlos Villagrán, levantó la copa en otra imagen que forma parte ya de la historia del Balonmano Nava.

Después todos los aficionados tuvieron la oportunidad de fotografiarse con el trofeo. Por allí se pudo ver a jugadores que hasta hace muy poco formaban parte de la disciplina del equipo, como David de Diego, Ismael Villagrán, Alberto García, Guillermo Campillo...

La fiesta empezó en la mañana de este sábado y acabará de madrugada ya que están previstos una cena y conciertos una vez que finalice el desfile que ha protagonizado la plantilla por las calles de Nava a bordo del remolque de un tractor. Un recorrido entre música y confeti para despedir una temporada de ensueño.